3. Inteligencia, pensamiento, conocimiento
Un peligroso tópico -todos los tópicos son peligrosos- dice que basta ser inteligente para pensar bien. Se confunden inteligencia y método de pensamiento. Se puede ser muy inteligente y ser un desastroso pensador. Ejemplos hay a millares. Conviene detenernos en este punto porque ilustra una cosa elemental: que el pensamiento es producto de la sociedad, de la lucha de sus intereses enfrentados. La inteligencia también lo es, pero a otra escala. Ésta se desarrolla en la primera infancia y detiene luego su desarrollo pudiendo producirse un retroceso con la edad si no se mantiene un uso sistemático de ella. Al igual que la memoria y la capacidad sexual, que se mantienen con el uso, la capacidad intelectiva también se engrasa con su práctica.
1. Sobre la misma base biológica, excepto en casos de minusvalía, enfermedad o accidente, todos los seres humanos nacen con las mismas facultades intelectivas. Son los factores sociales, clasistas, de género, de opresión nacional, de familia, alimentarios, educacionales, medioambientales, etcétera, los que condicionan el desarrollo intelectivo. Todos los datos científicos disponibles destrozan los mitos racistas y sexistas sobre supuestas diferencias de potencia intelectiva según el sexo y la raza. La inmensa mayoría de los "tests de inteligencia" han sido ideados para "demostrar" la superioridad del hombre blanco, y todos los tests tienen claras deficiencias que les impiden medir las condiciones sociohistóricos que afectan a la inteligencia. De cualquier modo, los datos recientes sobre la potencialidad del cerebro humano indican que sus capacidades son impresionantes.
2 La capacidad de pensamiento sufre mayores condicionantes porque es en su totalidad una construcción social. SE APRENDE A PENSAR. El pensamiento, que es la cualidad por excelencia de la materia altamente organizada, requiere para realizarse como tal de, además del lenguaje, una serie de conceptos, juicios, teorías... que sólo se adquieren con el aprendizaje colectivo. Por esto, por su dependencia del aprendizaje, y porque el sistema educativo es uno de los instrumentos decisivos de opresión, debemos ser conscientes de que la sociedad obliga a l@s oprimid@s a no pensar, Y SI NO TIENE MAS REMEDIO, A PENSAR MAL. Más adelante volveremos sobre esta decisiva cuestión.
3. El pensamiento necesita de una metodología. Pero también de determinada dosis de voluntad y predisposición psicológica. De la misma forma que la memoria recuerda mucho más las cosas agradables y positivas, olvidando las desagradables y negativas que echa al basurero del inconsciente, el pensamiento y a través suyo la inteligencia, funcionan mucho mejor cuando se interesan por el objeto, cuando no lo ven como una obligación e imposición, cuando comprende que el esfuerzo que realizan es positivo y agradable. Toda la experiencia de pedagogía revolucionaria, incluso en el peligro de las escuelas clandestinas de formación, muestra como l@s oprimid@s, obrer@s, campesin@s muchas veces analfabet@s a la fuerza, aprenden con gran rapidez al comprender que ese esfuerzo es vital para su liberación, para su felicidad.
La voluntad de pensar bien y el gozo que se obtiene al hacerlo, nacen de algo muy simple: la superación gratificante que se logra al ampliar los conocimientos. Aprender cuesta esfuerzo porque adquirir conocimientos es una tarea doble: darse cuenta que los viejos conocimientos son eso, viejos, y esforzarse en acceder a otros nuevos, más acordes con las nuevas necesidades. Por eso, cuando nos detenemos en el proceso de pensar nos sucede lo que a los deportistas: perdemos fuerza y concentración. No es una tontería. El pensamiento, lo hemos dicho, es un proceso. Un proceso tanto más sencillo y menos cansino cuanto más se ejercita. Cuando se detiene le sucede lo que al ciclista, si para se cae. En el caso del pensamiento: se desmotiva, se enrroña, pierde concentración, agilidad de asociaciones, de conexiones, de problematización, de imaginar hipótesis, de crear provocaciones intelectuales... Luego le cuesta volver a pedalear de nuevo.
Es un proceso menos cansino cuanto más se ejercita porque su combustible no es otro que los propios conocimientos que adquieren: CUANTOS MÁS CONCEPTOS SE APRENDEN, CUANTAS MÁS PALABRAS SE USAN, CUANTAS MÁS BASES TEÖRICAS SE INTEGRAN EN EL MÉTODO DE PENSAMIENTO, MAS Y MEJOR SE PIENSA. El envejecimiento, la mala alimentación, la explotación, la castidad, el pesimismo y la desilusión vital, la docilidad y sumisión, la alienación..., merman la capacidad intelectiva y de pensamiento. La más difícil de contrarrestar es el envejecimiento pero una vida revolucionaria, digna, subversiva, rebelde, creativa, comunicativa, alegre, que respete los criterios básicos de salud psicosomática, es decir, una vida buena, de calidad, mantiene la capacidad de pensamiento. En los infrahumanos campos de exterminio nazis, l@s luchador@s crearon organizaciones armadas clandestinas. Y sabemos que, junto a los descubrimientos científicos, la creación y mantenimiento de organizaciones armadas revolucionarias ES UNA DE LAS COSAS QUE MÁS INTELIGENCIA EXIGE.
4. La adquisición de conocimientos nuevos, la mejora del pensamiento y la agilización de la inteligencia exigen la vida en colectivo. El conocimiento sólo nace, vive y se reproduce en la colectividad. PERO MUERE SI SE LE AISLA. Esta dependencia hacia la creatividad colectiva era una de las razones por las que los griegos siempre educaban, pensaban y estudiaban en grupo abierto. Es una mentira como una catedral de grande el que la vida contemplativa, cenobítica y eremita, de ermitaño, da el verdadero conocimiento. El conocimiento, si quiere ser tal, debe alimentarse del contraste, del debate, confrontación y choque con la realidad. El ermitaño no conoce nada de nada, más que su propia soledad ahogada en delirios. El conocimiento necesita el oxígeno de la vida en común, de los debates abiertos, de la circulación de textos e ideas, de la refutación de dogmas y de la comunicación de experiencias ajenas. Bertrand Russell decía que no hay diferencia entre las alucinaciones del delirium tremens de un alcohólico y las visiones celestiales de un místico que se ha autosometido a extremos desequilibrios psicosomáticos.
Precisamente porque esta exigencia de colectividad es incondicional, asistimos a dos experiencias tan opuestas: una, LA DISPERSIÖN Y AISLAMIENTO DE LOS PRISIONEROS BUSCA ENTRE OTRAS COSAS ANULAR SU CAPACIDAD DE PENSAR y otra, LAS ORGANIZACIONES CLANDESTINAS REVOLUCIONA-RIAS AGUDIZAN LA INTELIGENCIA POTENCIANDO EL CONOCIMIENTO EN LAS PEORES CONDICIONES REPRESIVAS. Tan opuestas pero tan relacionadas en algo básico: el pensamiento creativo, al saber que depende del oxígeno colectivo, es capaz de crear los más originales mecanismos para extraer ese oxígeno de las cosas más incomprensibles: una foto en la celda, una carta, un recuerdo, una canción, la espera de una visita, etc. La experiencia de l@s oprimid@s sometidos a los peores aislamientos confirma esta impresionante capacidad del pensamiento creativo. Campanella y Gramsci, por ejemplo, son dos de entre l@s muchísim@s luchador@s que superaron las peores condiciones de aislamiento carcelario. Por su parte, las organizaciones clandestinas han sido capaces de florecer en medios tan feroces como los campos de exterminio nazis o las peores dictaduras asesinas.
Sin embargo la sociedad en la que malvivimos no es lo que se dice un jardín para el buen pensamiento. Peor aún, está estructurada para limitar incluso pensar mal, porque LO QUE SE PRETENDE ES QUE L@S OPRIMID@S NO PENSEMOS, O PENSEMOS MAL. Por tanto este es un punto previo que debemos solucionar antes de seguir.
PREGUNTAS:
2-A: ¿POR QUÉ SON PELIGROSOS LOS TÖPICOS SI REPITEN COSAS SABIDAS?
2-B: ¿SE OLVIDA EL PENSAR?
2-C: ¿QUÉ LECCIONES Y RECUERDOS TENEMOS DE CURSILLOS DE FORMACIÓN?
2-D: ¿NO ES CIERTO QUE PENSAR MUCHO ES MALO, QUE "EL PESCADO EMPIEZA A PUDRIRSE POR LA CABEZA"?
2-E: ¿NO HABRÍAMOS VENCIDO YA HACE TIEMPO L@S OPRIMID@S SI FUERA TOTALMENTE CIERTO QUE LA CLANDESTINIDAD AZUZA LA INTELIGENCIA?
2-F: ¿NO SERÁ QUE NO PODEMOS PENSAR TOTALMENTE BIEN HASTA NO HABER TRIUNFADO DEL TODO?
2-G: ¿NOS DISTANCIAMOS DEL EXTERIOR AL ESTAR MUCHO TIEMPO EN LA CARCEL?
2-H: ¿LA CLANDESTINIDAD LIMITA MUCHO LA CAPACIDAD DE PENSAMIENTO?
2-I: ¿ESA LIMITACIÓN EXPLICA QUE CASI SIEMPRE GANEN LOS OPRESORES?