Puede que usted tenga una pequeña parcela, una huertica y le hayan salido algunas molestas gramineas que desee eliminar. No se preocupe: hay solución.
Arriba mencioné la fresadora, que por aquí es otra forma de llamar a la
motoazada. Si vives en pueblo posiblemente un familiar o conocido disponga de un cacharro de éstos. Posiblemente tambien conozcais a alguno que le falta una extremidad o esté criando malvas por culpa de ésta herramienta. Por eso hay que tener sumo cuidado en utilizarlo y tener algo de experiencia.
Otro inconveniente es que mete mucho ruido, por si no quereis despertar a los vecinos.
En definitiva podeis hacer un gran estropicio en esas gramineas molestas, algo así como Atila paseandose por Europa.
Otra solución es la tradicional
azada, azadón, pala de corte, laias (tradicionales o modernas), etc, Con esto también podeis mandar unas cuantos yerbajos del huerto a fabricar materia orgánica. También sirve para hacer unos bellos y profundos bujeros, por si quieres plantar algo ahí, o simplemente por decoración.
No mete ruido y es ecológica, aunque las lómbrices y las herbas se caguen en tus muertos.
El Herbicida. Esto ya es de mala persona. Pero somos malos y queremos aniquilar esas malas yerbas. Coge herbicida con toda la precaución del mundo, ni oler, ni tocar (siempre con guantes aislantes y si es posible mascarilla), lavarse siempre después. Las gramíneas de césped tienen una cualidad natural, y esque sus raíces están interconectadas unas a otras, como una alfombra, evidentemente ésto se les ocurrió antes de que el ser humano inventara un arma de destrucción masiva como es el herbicida. Al mezclar el herbicida con el agua y esparcirlo, el agente activo viaja a través de los tejidos de la planta, y se va trasladando de raíz a raíz, de una planta a otra. Puede ser divertido.
Hay que mirar que el herbicida sea adecuado para eliminar gramineas y que no vaya a llover ni antes, ni durante, ni justamente después de la aplicación. Los días soleados y con temperatura agradable son los más indicados para efectuar el genocidio. Y por supuesto que el resto de veneno no llegue a corrientes de agua.
Sal. Bien ésto son palabras mayores. Damos por hecho que ya estamos locos y que nuestra única meta vital es joder esas jodidad yerbas y de paso llevarnos por delante lo que hay debajo. Antiguamente cuando una ejército conquistaba una ciudad se les solía ocurrir, después de pasar por armas a la población, el sembrar los campos con sal para que nada creciera allí en años. Es lo que hicireon los romanos con Cártago.
Huelga decir que se necesitará una gran cantidad de sal para dicha labor, si tu huerta o jardín es grande. También puedes probar a modificar el terreno con otro tipo de sustancias, o quemar la vida vegetal sobrandote con el abonado. Las posibilidades son infinitas.
Otras soluciones podría ser introducir semillas de plantas competidoras de las yerbas a eliminar, para joderlas sutilmente, o animales escarbadores para alegrar tu piecica de tierra, etc, etc.
¡Que maravilloso es el mundo de la horticultura!