Estados plurinacionales y naciones pluriestatales

La directora de Alasbarricadas, La Amalia, me envía un correo amenazante, que o hago un artículo de fondo sobre el proceso catalán y la ofensiva del Estado, o me echan a patadas… En fin. Que hay grandes denuncias de lo mal que se está portando el Estado obstaculizando el referéndum. 

La verdad es que no sé de qué se extrañan. Todo Estado y su Gobierno, funcionan con actos de despotismo despótico: vigilar imprentas y carreteras, secuestrar papeletas, cerrar los colegios, amenazar funcionarios con circulares, juicios y cosillas de esas, son justamente las actividades que llevaría yo a cabo si estuviera mandando y me diese por joder el referéndum ese…, en lugar de estar metido en el bar bebiendo tinto cada rato libre.

Me dicen los partidarios de la Independencia, que más tarde, o más temprano, se hará el referéndum. Y el PP y el PSOE responden…, "pues más tarde, sin problema". Como el "vuelva usted mañana" del pobre Larra. Que por si no lo sabéis se suicidó pegándose dos tiros con dos pistolas que descargó a la vez en la cabeza. Por si acaso una fallaba, y no, no fallaron. 

Las opiniones de los anarquistas, esto… Hay libertarios que piensan que la Independencia de Cataluña es una oportunidad de cambio… Je. Sin querer ser un cenizo. Vamos ver, ¿hemos nacido ayer? ¿Acaso algún proceso de independencia medio reciente, ha finalizado con una relación de fuerzas progresistas en el Parlamento? Ahí se va a meter una banda de trepas como dios manda, más grande de la que existe, que harán su nomenklatura, su burocracia y a tomar por culo el "siete veces más ricos". Hay otros libertarios que nos recuerdan que se trata de un proceso estatista y burgués… Ja. Bueno, para mí está claro que no se trata de una epidemia de zombis montados en dragones de hielo. Luego están los que dicen que con la independencia los catalanes tendrán que estar dispuestos a sufrir. Sí, eso de sufrir con independencia o sin ella no nos lo va a quitar nadie. Todo obviedades, pienso. Muy poco creativo.

Esto que medito, no quiere decir que yo esté en contra de lo que se traen entre manos los pobladores del Reino. Sea lo que sea: para nada. Yo soy favorable a que cada cual haga lo que quiera. Así que si Cataluña quiere su propio Estado, pues que lo tenga. Y si España quiere mantener ahí sus provincias, que las tenga. Seamos libres por favor. Lo único que tienen que hacer los desdichados habitantes, es ver cuál Estado les conviene más, y una vez al año, apuntarse a España o a Cataluña, cada uno lo que prefiera a la hora de pagar los impuestos, que a eso se reduce en realidad lo de la nacionalidad: a pagar los putos tributos a Hacienda. Este año eres catalán, el que viene español, y más lejos, quién sabe.

¿Que sería un lío la coexistencia de dos o tres Estados en un país? Para nada. ¿Acaso no hay tres o cuatro naciones con un solo Estado? Pues claro, es cuestión de organizarse. Ya hay hospitales públicos catalanes que alquilan plantas completas a empresas privadas, así que no debería ser muy complicado que una parte de camas hospitalarias, fueran para catalanes o para españoles, según conste en la cartilla. Lo mismo podría hacerse con las escuelas, con los cementerios y con todo en general. Así las detenciones de españoles podría hacerlas la guardia civil, y las de catalanes los mossos de escuadra. Todo es cuestión de voluntad política y de buscar soluciones pacíficas basadas en un amplio consenso legal monárquico-republicano. Y constituyente.

E incluso podríamos ser más creativos. Yo he expresado en más de una ocasión, que puestos a elegir un Gobierno, yo juro que preferiría que fuese extranjero. Está uno hasta las narices de tener tiranos locales, es un asco. ¡Que venga a mandar alguien de fuera! Ahora mismo, que Michelle Obama y Hillary Clinton están libres, se las podría contratar, la Obama para Madrid, la Clinton para Barcelona… ¿No sería simpático tener gobernando a mujeres socialdemócratas americanas? Ganaríamos un montón en prestigio, el turismo se levantaría más aún, y Aznar no sabría ni para donde tirar, ahora que está en Venezuela "mediando". Y si no os gustan los americanos, pues podríamos hacerle la oferta a algún ruso importante que esté sin empleo, porque Putin… Anda muy atareado untado en aceite estrangulando osos en Siberia con las manos desnudas sin camisa al borde de un acantilado… Y no tendrá tiempo de venirse al Reino.

Yo, por mi parte, aún respetando el procés, con todos esos fondos y recursos institucionales superiores a los míos, más los que le hacen la contra, y aplaudiendo en positivo todos esos puestos de trabajo que proporciona a tirios y troyanos… Miro ese enredo con serena displicencia, ya que nunca me he sentido ni de este país, ni de la comunidad autónoma, ni de mi ciudad, ni de mi barrio, ni de mi casa. No me ofendo si me recriminan mi ausencia de patriotismo grande o chico. Me resbalan las burlas de que soy un cateto porque tengo mi autoestima, gracias a unos cursillos que me dio el terapeuta ocupacional.  Veo el tema –no lo puedo evitar, así lo siento– como una disputa doméstica de sacerdotes cristianos (católicos y luteranos), que están colgaos en torno a si en la hostia está Cristo, o hay gluten de trigo. 

Además, no me gustan los partidos políticos grandes, ni los equipos de primera división, ni las catedrales barrocas, ni la lotería nacional. Por eso me apunté a una ideología minúscula como la anarquista. Así es, y no puede ser de otro modo. Pero que oye, que si alguien quiere cantar el himno y respirar hondo cada vez que ve los símbolos sagrados, y hacerse un selfie con este o el otro diputado, no le pongo impedimento. Allá cada cual con sus gustos.

Por acabar, si alguien de mucho poder, toma en consideración mi propuesta de tener varios Estados en una sola Nación, yo pediría que como premio a la innovación y a la pacificación de las relaciones nacionales, me permitiesen hacerme Neozelandés. Que es lo más lejos que puedo estar de todo este lío patriotal.

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