Noticias ALB.- El próximo 15 de Octubre se producirá una nueva jornada de lucha en solidaridad con Palestina. El contexto actual, ampliamente volátil y cambiante, hace que la lucha popular se extienda por todo el mundo. Con motivo de la solidaridad con Palestina se vienen desarrollando numerosas movilizaciones en todo el globo. En Europa estas movilizaciones además vienen acompañadas de convocatorias de huelgas generales, como es el caso de Italia, Francia y ahora el estado español.
En este caso, en Galicia convocan CGT, Soli y CUT 24 h, la CNT Galiza secunda 24 h. La CIG convoca parcial al igual que CCOO y UGT. Rede Galega pola Palestina y BDS Galiza apoyan la convocatoria de 24 h.
Con ello, se unen a la convocatoria de 2h de CCOO y UGT, que animaban a protestar ante los centros de trabajo. En cada territorio la huelga se ha ido configurando con distintos sindicatos, apareciendo convocatorias diversas según lo que ha decidido el sindicalismo alternativo. Por ejemplo, en la CNT ha prevalecido convocar una jornada de lucha, aunque aparecen como convocantes en algunos lugares.
La huelga se mantiene a pesar del inicio de las negociaciones, ya que Israel ya ha roto todas las treguas anteriores y los convocantes opinan que se debe mantener la presión de los movimientos sociales. Además, la propuesta del gabinete de Donald Trump tiene visos de servir para desplazar a la población de Gaza hacia otro territorio, culminándose así con la limpieza étnica del pueblo palestino. Se podría considerar además, que Hamas está pactando porque ya no aguanta más, más que porque se crea realmente el plan de paz. Pero esto no son más que especulaciones, ante lo que sucede en Oriente Medio. De todas formas, el movimiento de solidaridad con Palestina exige:
-
Parar el genocidio. Las cifras oficiales confirman más de 70.000 muertos, pero un informe de la ONU dice que podrían ser 680.000.
-
Forzar a Israel a abrir un corredor humanitario hacia Gaza.
-
Modificar el Real Decreto-ley 10/2025, de embargo de armas a Israel, ya que consideramos que es muy defectuoso. Para que sea un embargo real hay que eliminar cualquier posible excepción al embargo, y se debe crear un protocolo de inspección de los contenedores de los barcos para evitar el tráfico de armamento por los puertos españoles.
-
Desviar el gasto armamentístico hacia los servicios públicos, la sanidad y la educación.