[Chile] La Resurrección De Los Grupos Anarquistas y Libertarios
La Nación - Domingo 7 de mayo de 2006
LA RESURRECCIÓN DE LOS GRUPOS ANARQUISTAS Y LIBERTARIOS
Días de entrenamiento
Los desmanes del Día del Trabajador pusieron en el tapete el resurgimiento de los antisistema. Quiénes son, dónde están, cómo actúan, a qué filosofía responden, son parte de la incógnita sobre un segmento juvenil disconforme con la sociedad. Sus proclamas versan sobre estos temas. A continuación una radiografía del estallido y la nueva articulación del movimiento "anarco". Ojo. Hablamos con ellos.
Nación Domingo
Por Miguel Paz y Javier Rebolledo
Diez de la mañana del 1 de mayo. Banderas negras y rojinegras con la característica letra “A” del anarquismo cortan el horizonte de un soleado Día del Trabajador. Diversos grupos vocean repetidamente “obrero, entiende, la CUT no se vende”, y marchan por la Alameda en dirección oriente, hacia el acto organizado por la CUT en Portugal, frente a la casa central de la Universidad Católica.
Los anarquistas no eran los únicos, pero sí fueron los que dieron el piedrazo inicial de un día de furia, pese a los esfuerzos de otros asistentes a la marcha que intentaron detenerlos. Más adelante marchaban miles de manifestantes llegados de distintos puntos de la capital.
La jornada arrojó un saldo de 51 detenidos por daños a la propiedad pública y privada; dos más por robo, y 19 carabineros heridos con lesiones de menor consideración. A ellos se sumaron una periodista que recibió una pedrada en la cabeza, un fotógrafo de Associated Press herido por un ladrillazo en un ojo y otro de “LUN”, lesionado también en la cabeza.
Los primeros peñascazos volaron a media cuadra de La Moneda, poco después de las once de la mañana. A esa hora ni siquiera había empezado la ceremonia de la CUT. El discurso del presidente de la multisindical, Arturo Martínez, sobre la Ley de Subcontratación, estuvo a punto de irse al tacho.
Los proyectiles fueron a dar contra el Ministerio de Educación y el local aledaño de Burger King. Eran jóvenes encapuchados. El estallido había comenzado. Más allá, en San Isidro, los incidentes concluyeron con un local de Lápiz López y una sucursal del Banco Santander Santiago destruidos y saqueados. El resto es historia conocida.
CABEZAS DE POLERA
Aquel “día de entrenamiento” también dejó otro legado: la reaparición masiva de siglas y nombres que no dicen mucho para el chileno medio, pero que para el mundo subterráneo de la izquierda extraparlamentaria tienen significado (Bloque Anarquista, Hip Hop Activistas, CRA, OCL, FEL, Red Anarquista del Sur, Clase contra Clase, Guachunei).
No por nada, en el portal de información alternativa Indymedia Santiago, uno de los anarquistas que participó en los hechos de violencia concluyó su reporte de la batalla así: “Hace muchísimos años que un 1 de Mayo no estaba tan cargado del verdadero sentido de esta fecha: lucha contra el capital”.
La bandera rojinegra ganó rating mediático y los anarquistas volvieron a estar en boca de todos, levantando la pregunta de quiénes son, dónde están, y si el movimiento anarquista en Chile está de vuelta.
Algunos miembros de los grupos mencionados aceptaron hablar con LND. Desmintieron su participación en los disturbios del Día del Trabajador. A pesar de que justifican el uso de la violencia y ese día las siglas de sus organizaciones aparecieron en múltiples banderas y quedaron registradas en rayados callejeros.
Muchos comparten los principios básicos del ideario anarquista de la horizontalidad en las relaciones, la democracia directa en la toma de decisiones en asambleas, la autonomía individual y la autogestión (aspectos medulares de la ideología de la bandera rojinegra, surgida al alero de los escritos de Proudhon, Bakunin y Kropotkin). Sin embargo, en su interior mezclan distintas influencias políticas y sociales.
Adentrarse en el universo ácrata es como subir la torre de Babel. Hay desde anarco-ecologistas, feministas radicales y objetores de conciencia del servicio militar, anarco-sindicalistas, comunistas libertarios, fanáticos del piedrazo y la violencia callejera, hasta sesudos teóricos, ratones de biblioteca y músicos anarco-punk vegetarianos, preocupados de la liberación animal.
Un ejemplo es el colectivo Fuerza Antifascista (FAZ), que concentra anarquistas y antisistémicos de otras corrientes. Juan, uno de sus integrantes, estuvo en los actos del 1 de mayo y habló con LND. Asegura que la FAZ no participó en los actos de violencia, pero justifica las acciones en contra del Banco Santander Santiago o el Burger King, “porque se trata de símbolos de la cultura imperialista que nos oprime”. También fundamenta la violencia en contra de carabineros porque, asegura, son ellos quienes la propician.
Otra vertiente es la del Frente de Estudiantes Libertarios (FEL). Agrupa a anarquistas, marxistas y libertarios. Su punto de encuentro es el anticapitalismo. Está compuesto por cerca de 150 estudiantes universitarios y secundarios, con presencia en Arica, Valparaíso, Quilpué, Santiago, Concepción y Osorno. En este momento, dicen que su tarea “está en la creación de un movimiento estudiantil fuerte, con orientaciones revolucionarias”. El FEL es uno de los grupos que fue sindicado por Chilevisión y TVN entre los organizadores de los disturbios del 1 de mayo. Ellos lo niegan categóricamente.
La Organización Comunista Libertaria (OCL) recoge la experiencia de los anarquistas de la guerra civil española y de los anarquistas rusos en el exilio. Surgió de las cenizas del CUAC (Congreso de Unificación Anarco Comunista), que se disolvió por diferencias entre tendencias internas; la OCL está inserta en organizaciones de base del Valparaíso, Santiago y la VIII Región. Su trabajo está en la calle. Así lo definieron en un cuestionario que respondieron por correo electrónico.
Respecto a la violencia del 1 de mayo destacan que se debe a la opresión que sufre una generación que, en la estructura actual del mundo, no encuentra un lugar. Sus lienzos fueron vistos en el acto de la CUT, pero ellos también se desmarcan de los desmanes: “Hace rato que no vamos a estos actos, porque no reflejan los intereses de los trabajadores, sino los de los empresarios. Además, preferimos conmemorar el Día de los Trabajadores en los espacios en donde estamos construyendo”.
Otros grupos reconocibles son Clase contra Clase, trotskistas que mantienen un subgrupo universitario, llamado Las Armas de la Crítica. Tienen más arrastre entre los estudiantes, porque “los viejos están muy desprestigiados”, explica un militante de un colectivo del Pedagógico. También están el Frente Antifascista, el Bloque Anarquista, la Red Anarquista del Sur, Colectivo Estudiantil Andamios, los antiservicio militar Chorizos Insumisos y Ni Casco ni Uniforme; y el Guachunei, agrupación que resurgió hace poco, con su clásico grito de guerra: “Sin Dios ni ley, ¡avanza el Guachunei!”.
En la jungla universitaria también pululan el Frente de Estudiantes Revolucionarios, la Coordinadora Revolucionaria y el Motor Rebelde, más dados al encapuchamiento en las fechas rituales.
Todos defienden el saqueo como un símbolo de “acción en contra del capitalismo” y asumen sin problemas el uso de la violencia con fines políticos.
Desde la vereda de los teóricos del anarquismo, la principal crítica que le hacen a estos grupos no es el uso de la violencia, sino que no esté apareada con propuestas concretas. El periodista e investigador del anarquismo Andrés Pérez, si bien comparte el diagnóstico de OCL, sobre el origen de la violencia, no adhiere a ella sin objetivos claros. Para él, que los disturbios se produzcan en fechas simbólicas, como el 29 de marzo, Día del Joven Combatiente, y el 1 de mayo, no es más que una demostración de que estos grupos están insertos en el sistema y replican la lógica de las efemérides.
En la misma línea de Pérez, el sociólogo Felipe Tombolini dice que estos grupos aún no superan la fase del disturbio. Otro estudioso lo ejemplifica así: “Si el saqueo de Lápiz López hubiese sido para recuperar lápices, cuadernos y libros para después entregarlos en una población, con toda una campaña publicitaria y de prensa, va y pase. Pero no fue así”.
Otros, como Roberto Torres, del Instituto de Estudios Anarquistas (IEA), dicen que más que actos de anarquistas lo visto en el 1 de mayo “pareció un desahogo social de distintos grupos”.
Es entendible, asegura. Debería ser casi normal que los jóvenes estallen en un país con uno de los peores índices de igualdad en la distribución de la riqueza y donde el acceso a buena educación y empleo están marcados por la cuna.
CASAS OKUPA
Un alto miembro de una organización de izquierda destaca que actualmente los grupos anarquistas están mejor organizados.
No sólo viven hoy de palos y piedrazos para el Día del Trabajador. Los de la bandera rojinegra también participan en federaciones de estudiantes universitarios y centros de alumnos, defendiendo sus reivindicaciones educacionales y el acceso universal a la educación superior.
Ejemplos de esto son el FEL y la OCL. Esta última organización participa en comités de allegados y organizaciones sociales de sectores poblacionales.
Dentro del ideario ácrata destaca el trabajo que efectúan en centros culturales, casas okupa y, en general, en espacios públicos, ya sea canchas de fútbol o plazas, donde montan ferias de revistas, hacen trueques, promueven música de contenido social, venden comida y montan foros de discusión. El Parque Forestal, detrás del MAC, es un punto de encuentro regular.
En los centros culturales 771, en calle San Francisco, y Manuel Rojas, en el barrio Yungay, se llevan a cabo talleres literarios, serigrafía y teatro abiertos a los vecinos. Son lugares de discusión de ideas y de frecuentes tocatas de agrupaciones afines, como Malgobierno, Marcel Duchamp, Red Hip Hop Activista, Faltan Moneys, Monjas en Escabeche, Curasbún, Punkoria y muchos más de una larga lista de grupos.
Las casas okupa cumplen un rol similar. Éstas son inmuebles deshabitados que han sido tomados y recuperados por jóvenes como vivienda y para organizar actividades culturales. Un ícono okupa fue La Marraqueta. Esta antigua panadería derruida cobró vida y despertó la simpatía de los habitantes del sector de Vicuña Mackenna con Agrícola, debido a las múltiples actividades que realizaban para los niños y a la ayuda solidaria que los punks prestaban a sus vecinos. Actualmente, las okupas Zacco y Vanzetti, en calle Santo Domingo, y la CASA, al inicio de Independencia, continúan la tradición de La Marraqueta.
MOTÍN EN LA SALA
En los espacios universitarios es donde más ha resurgido un anarquismo teórico que coquetea con el socialismo libertario y otros afluentes más contemporáneos.
En el Arcis y las universidades Bolivariana y de Los Lagos, Óscar Ortiz, quien fuera secretario privado y discípulo de Clotario Blest, realiza talleres sobre anarquismo, desde 1992.
A su trabajo se agrega el del IEA, y las publicaciones de Ediciones Espíritu Libertario, que edita autores como Noam Chomsky. El IEA acaba de lanzar la convocatoria de un coloquio de “Historia del anarquismo en Chile”, que se realizará en Santiago en enero próximo, para conmemorar los 100 años de la matanza de la Escuela de Santa María de Iquique.
Uno de sus hitos fue la organización de la visita a Chile el año pasado del sicoanalista Eduardo Colombo, hecho que marcó al movimiento. Colombo, referente contemporáneo de la filosofía ácrata, realizó talleres y charlas en actividades a tablero vuelto en las universidades de Concepción, Arcis y Chile.
El IEA busca “contribuir a despejar al ideario anarquista de las tergiversaciones de que ha sido objeto”, y propugna la reflexión teórica para vincularla a la práctica de los grupos anarquistas.
¿MOVIMIENTO O GRUPOS?
A diferencia de los jóvenes que hablaron para este reportaje, Torres es lo que denominaríamos un “viejo crack” del anarquismo. Tiene 52 años de edad y lleva 33 ligado a esta filosofía. Su linaje es –casi literalmente– negro puro. Su abuelo y padre fueron actores del fuerte movimiento anarco-sindicalista de principios y mediados del siglo XX. Le traspasaron los ideales libertarios, casi como quien transfiere un secreto familiar.
Él no cree que haya un “movimiento anarquista”. El historiador Ortiz también reniega de la denominación. Argumenta que ello se debe a que los “grupos anarquistas son incapaces de ponerse de acuerdo en cosas mínimas; cunden el personalismo y los inquisidores, más preocupados de acusarse los unos a los otros que de construir un movimiento unitario”.
“Los anarcos de hoy”, dice, “son hijos de la democracia. Piden muchos derechos pero son incapaces de comprometerse con los deberes, siendo que el anarquismo es la responsabilidad máxima”.
Muchos de los consultados coinciden que, con altibajos, la ideología está creciendo en toda Latinoamérica. Señalan que en Chile las manifestaciones indígenas de rechazo a la conmemoración de los 500 años del descubrimiento de América fueron un hito para el crecimiento del anarquismo nacional. “Se marcó presencia autónoma, una estética y un discurso”, explica Andrés Pérez, quien junto a Felipe del Solar escribió “Anarquistas: presencia libertaria, 1970-2000”, una investigación histórica que saldrá editada por Lom.
APRIETEN LOS HUEVOS
Uno de los puntos en común de la mayoría de los grupos anarquistas es su preocupación por la seguridad de sus integrantes. Los rostros en las fotos que suben a Internet están borrados. Entre ellos usan “chapas” o seudónimos y cuando realizan manifestaciones públicas se cubren el rostro.
Esta es una característica heredada de las prácticas “clandestinas” de las organizaciones de izquierda de los ’80 que no se condice con los tiempos, asegura Torres. “Hay cierta mística con el asunto conspirativo”, reconoce. “Pero también hay otros que funcionan abiertamente”.
¿Y por qué no hacerlo? Si basta con darse una vuelta de 30 minutos por los foros y páginas web anarquistas en Internet para hacerse un mapa virtual del “who is who” de la bandera negra y roja.
El subsecretario del Interior, Felipe Harboe, sostiene que en las manifestaciones violentas hay gente que se repite. Asegura que “las investigaciones sobre estos grupos ya están en marcha”.
Algunos estudiantes que integran grupos rojinegros temen la posibilidad de que se ordene la infiltración de agentes encubiertos en las universidades más conflictivas. Para ser llevada a cabo, la medida tendría que contar con la autorización de un juez de garantía y con el visto bueno del rector de cada casa de estudios. No es broma, porque, “guste o no, estos grupos organizados de hoy son el caldo de cultivo de donde saldrán mañana otros grupos más y mejor organizados”, advierte nuestro entrevistado de la organización de izquierda dura, con una sonrisa entre los labios. LND
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Gentileza Agencia Prensa
Gentileza Agencia Prensa Humanista
Por Raúl Clerc
La manera en que El Mercurio da cuenta de las movilizaciones sociales de esta semana, da cuenta, a su vez, de la histeria en que la derecha se instala frente a las movilizaciones; de hecho publican que: la “celebración del 1 de mayo se vio perturbada por graves incidentes y saqueos que unos 300 encapuchados e individuos a rostro descubierto desataron [2] en la Alameda entre Amunátegui e Irene Morales desde el inicio del acto organizado por la CUT, al que asistieron unas 14 mil personas.
Hubo 72 detenidos, 21 heridos y pérdidas millonarias en una extensión de 14 cuadras. Las hordas las emprendieron contra paraderos de la locomoción, letreros, jardines y rejas, en tanto que frente al escenario, en la intersección con Portugal, tres cantantes de micros se desnudaron en protesta por el Plan Transantiago, que les impide actuar, y un grupo de mapuches reclamó por la prisión de miembros de su etnia en Temuco y que están en huelga de hambre.
La policía se vio sobrepasada por la violencia de los ataques, mientras que el presidente de la multisindical, Arturo Martínez calificó de delincuentes a los vándalos. De noche y madrugada la violencia se fue a Lo Hermida y La Faena, donde, según el Mercurio “el lumpen instaló barricadas”.
Una imagen caótica , por cierto.
No sólo es casi gracioso que el Mercurio se refiera al 1 de mayo como “celebración”, sino que sus palabras favoritas: hordas, cantantes desnudos, mapuches, vándalos, lumpen, barricadas.... instala – como siempre- la imagen de la ciudad amenazada por los bárbaros.
Cada vez que la prensa deja de entender a los movimientos sociales, las acusaciones van desde el anarquismo hasta los infiltrados. Después de la “ordenada” manifestación del Primero de mayo, el fenómeno se repite, pero esta vez los actores del conflicto sí que se dicen anarquistas. En rigor, no debiera ser sorprendente: “basta con ver los foros y páginas web anarquistas en Internet para hacerse un mapa de la nueva izquierda juvenil: La serie de siglas y nombres no dicen mucho para el chileno medio, pero que basta ver los muros.: Bloque Anarquista, Hip Hop Activistas, CRA, OCL, FEL, Red Anarquista del Sur, Clase contra Clase, Guachunei, etc).
En algunos casos, son ya bastante antiguos: Clase contra Clase, kamina libre, grupos trotskistas que mantienen muy buenas páginas en la web, otro grupo universitario, llamado Las Armas de la Crítica, también se relaciona con el antiguo trotskismo. Basta con mirar algunos de sus pintadas: “Vota por tu próximo opresor”, “Lucha por tu clase, no por tu país”. Están el Frente Antifascista, el Bloque Anarquista, la Red Anarquista del Sur, Colectivo Estudiantil Andamios, los antiservicio militar Chorizos Insumisos y Ni Casco ni Uniforme; y Al Choke, el Guachunei, agrupación que resurgió hace poco, con su clásico grito de guerra: “Sin Dios ni ley, ¡avanza el Guachunei!”.
Bastante viejo el grupo, debutó ya en los tardíos ochenta y para la primera guerra en Irak rayaban con energía: “Fuerza Saddam!”. Es digno de mención el ya clásico lienzo de la Barra Los de Abajo “Sin Dio$ ni Ley”. Después de la aparición de los “nuevos encapuchados” que ya no responden a la clásica orgánica de la ultraizquierda nacional, el discurso del presidente de la multisindical, Arturo Martínez, sobre la Ley de Subcontratación, pasó a un segundo plano. El Diario 7 habla de protestas con formato web, ya que los grupos se concertan de esta manera. También aparece hablando el subsecretario del Interior, que cree que se trata de “grupos que tienen alguna afición común, pero que no tienen organización alguna… tienen ganas de sobresalir en una sociedad que sienten que los excluye.”¿ Sólo es un problema de sentimiento?
En Indymedia Santiago, uno de los anarquistas que participó en los hechos de violencia concluyó su reporte de la batalla así: “Hace muchísimos años que un 1 de Mayo no estaba tan cargado del verdadero sentido de esta fecha: lucha contra el capital”. Lo curioso es que, pese a lo antiguo de las consignas – algunos grupos reparten textos de Kropotkin – la Conquista del Pan – y de Bakunin-, la presencia mediática en la internet es decisiva: son los propios Carabineros, dicen, quienes le preguntan a los detenidos las direcciones de los sitios para poder “verse” en acción durante los incidentes.
En Peñalolén, tras la nueva toma de terrenos, el alcalde Orrego acusa a esta nueva izquierda de generar un “plan piloto para crear agitación”. “Si no fuera por los cabros del Pedagógico y de la Arturo Prat, no habría nadie para hacer las tomas.”… Si se tuviera que ver con ojos más históricos, aunque desordenados, en 1965, la imposibilidad de la izquierda tradicional por levantar una alternativa seria a lo que se veía como la aplanadora freista, terminó por reunir a un grupo de organizaciones pequeñas en lo que terminó llamándose Movimiento de Izquierda Revolucionaria, en 1967 en Alemania, la gran coalición CDU-PSD terminó copando el espectro político y empujando a la oposición extraparlamentaria hacia la izquierda armada, en lo que se conoció como el Grupo Baadeer Meinhof.
En Chile, lo ocurrido este año no es todo. Hace un par de años, los secundarios se negaron frente a la entonces Ministra Mariana Aylwin a presentar una sola organización en una mesa de negociaciones cuando se movían por el pasaje escolar. Esta semana ocurrió algo parecido con los secundarios, que para El Mercurio y La tercera “amenazan” con Paros. Pero los secundarios de Mariana son hoy universitarios. Algunos, al menos. Han desarrollado más o menos sistemáticamente principios básicos del ideario anarquista de la horizontalidad en las relaciones, la democracia directa en la toma de decisiones en asambleas, la autonomía individual y la autogestión (en algunos casos, al borde de la inocencia, como el correo que circuló para hacer cerveza en casa) hasta discusiones con el marxismo en aspectos medulares de la ideología anarquista.
Si se entra en las páginas anarquistas o se busca en los diarios murales de universidades e institutos, “le lleva de todo”: anarco-ecologistas, feministas radicales y objetores de conciencia del servicio militar, anarco-sindicalistas, comunistas libertarios, fanáticos del rock y la violencia callejera, hasta anarco-punk vegetarianos, preocupados de la liberación animal.
Los grupos son pequeños. Puede que cada uno no tenga mucho más que 150 estudiantes universitarios y secundarios, con presencia en Arica, Valparaíso, Quilpue, Santiago, Concepción y Osorno. En este momento, declaran transversalmente que la tarea “está en la creación de un movimiento estudiantil fuerte, con orientaciones revolucionarias”.
Recientes incidentes en universidades más bien de carácter progresista, así parecen demostrarlo. Este tipo de grupos, más que levantar un discurso instrumental sobre la violencia, que asumen sin problemas, esgrimen el derecho al uso de la violencia con fines políticos, esgrimen un cierto “derecho a la ira”. El que los disturbios se produzcan en fechas simbólicas, como el 29 de marzo, Día del Joven Combatiente, y el 1 de mayo, es una demostración de que estos grupos están insertos en el sistema y replican la lógica de las efemérides, con lo que en realidad puede verse como un “desahogo social de distintos grupos”, lo que no debiera sorprender en un país con uno de los peores índices de igualdad en la distribución de la riqueza y donde el acceso a buena educación y empleo están marcados por el nacimiento y donde se propone seriamente reducir el sueldo y las imposiciones a los trabajadores jóvenes.
Si ver las noticias sobre Francia y las manifestaciones sobre la flexibilidad laboral juvenil no sirvió de nada, puede que los eventos del Primero de Mayo hayan desatado esta “fiebre” de artículos sobre los jóvenes anarkos.
Pocos han tomado nota del trabajo que efectúan estos grupos en centros culturales, casas okupa y, en general, en espacios públicos, ya sea canchas de fútbol o plazas, donde montan ferias de revistas, hacen trueques, promueven música de contenido social, venden comida y montan foros de discusión. Hay lugares que ya son emblemáticos, como se dice hoy: San Francisco 771, el Centro Cultural Manuel Rojas, que alguna vez se definió como anarquista -,en el barrio Yungay, realizan preuniversitarios “populares”, talleres literarios, serigrafía y teatro abiertos a los vecinos.
Hay un musculoso movimiento musical organizado en “tocatas”: Malgobierno, Marcel Duchamp, Red Hip Hop Activista, Faltan Moneys, Monjas en Escabeche, Curasbún, Punkoria y muchos más de una larga lista de grupos. El movimiento –algo en baja por la persecución de los alcaldes– de las casas okupa es una parte dentral de esta nueva izquierda. Casas deshabitadas o abandonadas que son recuperadas por jóvenes como vivienda y para organizar actividades culturales. No necesariamente con la molestia del rsto de la sociedad. La casa okupa de Vicuña Mackenna con Agrícola, debido a las múltiples actividades que realizaban para los niños y a la ayuda solidaria que los punks prestaban a sus vecinoso despertó la simpatía de los habitantes del sector.
También tienen un movimiento editorial: publican a autores como Noam Chomsky y organizan encuentros para discutir la “Historia del anarquismo en Chile”, o para conmemorar los 100 años de la matanza de la Escuela de Santa María de Iquique.
El gobierno asegura que “las investigaciones sobre estos grupos ya están en marcha”. Probablemente sean parte de las preocupaciones del nuevo Ministerio(¿) de Seguridad Ciudadana.
Explícitamente, en la prensa, algunos estudiantes que integran grupos anarquistas temen la posibilidad de que se ordene la infiltración de agentes encubiertos en las universidades más conflictivas. Para ser llevada a cabo, la medida tendría que contar con la autorización de un juez de garantía y con el visto bueno del rector de cada casa de estudios.
HUELGA DE HAMBRE MAPUCHES
Paralelamente a este re-nacimiento de grupos proptestatarios, aparece el “fantasma” de la violencia mapuche. De hecho, al centro de Cumplimiento Penitenciario de Temuco, y en ambulancia, fueron trasladados desde el penal de Angol los comuneros mapuches que cumplen condena de 10 años por el delito de incendio terrorista que afectó en diciembre de 2001 al fundo Poluco Pidenco de la Forestal Mininco. Además, deben pagar una indemnización de $425 millones. Se trata de atricia Troncoso, de Juan Huenulao, y los hermanos José y Jaime Marileo, quienes llevan 55 días en huelga de hambre. El alcaide del presidio temuquense calificó de preocupante el estado de salud de los huelguistas, que han perdido ya 20 kilos de peso, mientras El Mercurio se refiere a ellos, como “delincuentes”, enfatizando el uso de alias, el resto de la Prensa ha optado por ignorar el tema.
Una marcha en Temuco a favor de los presos el jueves terminó en disturbios violentos, además de 29 detenidos indígenas y estudiantes. Los hechos se iniciaron en la plaza Dagoberto Godoy, cerca del hospital regional, con un desfile que fue interceptado por Carabineros, lo que provocó la reacción de los manifestantes y los incicentes posteriores.
OFENSIVA COMUNICACIONAL DE LA DERECHA
El llamado “tema” de la Concertación privatizada aparece con nuevos ángulos.A partir de temas como el Transantiago o el “fracaso” en la licitación pública de la construcción de cárceles, la derecha criticò explícitamente la gestión del ex Presidente Ricardo Lagos, con lo que obligó al Gobierno Bachelet a reivindicar para sí la labor concertacionista de Lagos, lo que había evitado en la campaña y hasta ahora.Hasta el momento, Bachelet tiene un 62,1 % de aprobación ciudadana de Bachelet, casi 10% más de lo obtenido en marzo, de acuerdo a lo que ayer anticipó el presidente de Adimark, Roberto Méndez. Encuesta sábado 5
Aunque podría achacársele al cosismo que ahora la derecha repudia, Roberto Méndez de Adimark señala que “la gratuidad para los mayores de 60 años es un hecho, la están gozando; el reajuste a las pensiones en un 10 por ciento, ¿dónde está?, en el bolsillo de los abuelitos, de las abuelitas, está operando; se están construyendo salas cunas, este es un gobierno que trabaja, este es un gobierno que avanza”En efecto, aunque eran temas conocidos, desde el comienzo de la Presidencia Bachelet se ha anunciado la postergación de la entrada en vigencia de proyectos emblemáticos de la administración de Ricardo Lagos Escobar, como el Transantiago, la de la Jornada Escolar Completa, el sistema de Responsabilidad Penal Juvenil, o el atochamiento de los tribunales especiales de familia.
Usando los argumentos que la misma prensa concertacionista ha dado, la UDI destaca los fracasos emblemáticos y pregunta: “¿ Dónde están quienes afirmaron esto?. Probablemente en alguna embajada o como director de alguna empresa pública. ¿Quién se hace responsable que hoy un nuevo proyecto 'estrella' del gobierno deba prorrogarse?"
El tema no es Bachelet.
Más que un hombre de partido – ¿ Hay alguien que recuerde si Lagos es PPD o PS?- Lagos es una figura mediática desde el famoso dedazo. No son hoy líderes de opinión, sino figuras habituales de la farándula criolla que se declaran, como la mayoría de los chilenos, apolíticos, quienes levantan su figura. La Nación remarca que, en un programa tipo reality, “lñìderes de opinión” como Kathy Barriga, la bailarina Claudia Miranda y el conductor Daniel “Huevo” Fuenzalida– fueron sometidos a un minicuestionario de actualidad y opinión. Los tres sostuvieron que el sucesor natural de la Mandataria Michelle Bachelet es el ex Presidente Ricardo Lagos. Un síntoma de que el 70% de popularidad con el que el abogado abandonó La Moneda es también una especie de consenso nacional respecto de que debe retornar el 2009. Algo preocupante para la Alianza y también para la DC.
La DC, como partido de la Concertación, no tiene la libertad de la derecha para tratar de botar a Lagos de una posible carrera presidencial y posicionar sin contrapeso a la senadora y electa timonel DC, Soledad Alvear, como próxima abanderada. La derecha, en cambio, está en un óptimo pie para –tal como hizo el oficialismo desde el año 2000 con Joaquín Lavín, cuando éste era la carta presidencial de la Alianza– atacar cualquier posibilidad de que Lagos se vuelva a postular.
El discurso de la derecha parecería estar pensado desde la izquierda dura, que en general, se ha portado “bien” con Bachelet: “Hemos perdido la capacidad de sorpresa después de saber de tantos proyectos emblemáticos del gobierno de Lagos, anunciados con bombos y platillos, cuyas cintas fueron debidamente cortadas y que hoy comienzan a mostrar fisuras: la infraestructura de la Reforma Procesal Penal en la Región Metropolitana, la Jornada Escolar completa, el Transantiago, el colapso de los tribunales de familia, el retraso en el proceso de concesiones carcelarias, entre otros, son algunos buenos ejemplos de ello", dijeron parlamentarios UDI.
Al atacar a Lagos no solamente se ataca tangencialmente a Bachelet sino que se rompe lo que - la derecha cree - que es su sucesión natural.
El viernes, y al unísono, como se ha vuelto costumbre en la nueva etapa de la coalición aliancista, RN y la UDI entregaron documentos donde se enumeran las iniciativas fallidas del Gobierno pasado. Desde abril de este año, las falencias en la educación, el atochamiento de los tribunales especiales creados en el sexenio 2000-2006, y “el caso” del Patio 29, han sido levantados por la derecha y el Mercurio como la “herencia maldita” de Lagos.
“Los hechos demuestran que el que se pensaba un gran Gobierno, sólo fue un gran montaje publicitario”, asevera el vicepresidente de la UDI, el senador Hernán Larraín.
Según la UDI, “no se está pensado en los próximos cuatro años, sino simplemente constatando que Chile fue víctima de una campaña de inauguraciones que han fracasado una tras otra”.
En general, si se compara con las situaciones de Aylwin y Frei, la situación de Lagos es inédita, porque terminó su mandato con una tasa de apoyo popular demasiada alta. Lagos terminó su período en alza y le traspasó – mal que le pese- esa âura” a su sucesora. A diferencia de Piñera y Lavín que siguen siendo promesas incumplidas, Lagos està posicionado. Aunque el denunciar cosas que están mal hechas es parte de las funciones de la derecha, lo que se busca es, explícitamente que Bachelet se haga cargo de los problemas. La derecha lo ve de manera diferente, obviamente. Si Frei pensó el 2000 que tenía un capital que lo haría volver naturalmente a gobernar, porque era el candidato obvio, porque no había otros liderazgos, lo cierto es que Alvear y Bachelet surgieron el 2003 y desde ese momento se acabó la candidatura de Frei.La derecha ya inició su propia batalla contra uno de los rostros más potentes de la Concertación y posible rival en las presidenciables del 2009