texto de santillan

Para el debate en torno a la higiene ética en el comportamiento anarquista, y la ética y moral del Anarquismo. Filosofías de vida, cuestiones morales, vida sana, etc.
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apacheanarco
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texto de santillan

Mensaje por apacheanarco » 30 Sep 2007, 12:44

LA REVOLÚÇION DE TODOS LOS DIAS Y DETOQÁS LAS Hd.RAS
Por Diego Abad de Santillán
No somos adeptos de las revoluciones catastróficas, de aquellas revoluciones que no han sido previamente anunciadas, gestadas por una transformación de valores éticos y sociales y por una multitud creciente de instituciones y de relaciones libres entre los hombres. Si la revolución no se ha hecho efectivamente antes de los incidentes finales de la violencia popular que destruye los últimos obstáculos, los últimos baluartes del poder enemigo, aún triunfantes en la batalla, saldremos vencidos, porque los acontecimientos mismos del choque bélico no tienen la virtud de mejorar, sino, en todo caso, de empeorar a los hombres, despertando en ellos pasiones e instintos ancestrales.
Los esclavos de hoy no adquirirán el espfritu de libertad por el arte mágico de una lucha armada de unas semanas o de unos meses contra otros esclavos que defenderían los intereses de los
privilegiados. Los insaciables de hoy, los elementos antisociales no se convertirían en ángeles al día siguiente de esa revolución soñada como una palingenesia universal. Seguirían siendo aproximadamente los mismos, si no peores.
Por otra parte las instituciones, no se mantienen sólo y siempre por la fuerza; se mantienen también por el público, por las costumbres. Un aparato de dominio tiene más base en el sentimiento de obediencia que en las ansias de mando. Muchas instituciones actuales del régimen capitalista y estatal dejarían automátiçamente de existir sí la desobediencia fuese mayor, si e! acatamiento no fuera tan general.
En nuestra impotencia para desobedecer, para tesistir hoy mismo, con un poco de energía y de voluntad, a las solicitaciones e imperativos del régimen en que vivimos, soñamos con el advenimiento de una revolución mesiánica que nos redimirá hasta de los
pecadós de la cobardía, de la falta de iniciativa y de la servidumbre voluntaria.
Una revolución popular, aun cuando sea política, aun cuando no tenga otra finalidad quela de cambiar un régimen de gobierno por otro tiene algo de atractivo y de renovadoi y no seremos nosotros los que vamos a poner obstáculos a todo movimiento de esa especie; pero tampoco vamos a poner en él ilusiones desmedidas ni a soñar despiertos. Una revolución jacobina, la revólución con cuyo advenimiento se sueña, sin preocu-parse desde ya de hacer cuanto es posible, en preparación y en vida nueva, es más apta para el restable-cimiento de una dictadura, la de los triunfadores, que para la organización de una sociedad en la libertad y la solidaridad.
Pragmento del artículo publicado en el periódico El úbrero panadero. (Adheridos a la F.OR.A.) Mayo de 1946,
«Guardia no tires pelotas, que pa pelotas, Puerto Real».

en internet el anonimato no existe;
no estamos solo entre colegas;
cada cual ha de ser consciente de que es responsable de sus palabras.

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