REVOLUCION SOCIAL Y LA ORGANIZACION REVOLUCIONARIA

Presente y futuro de la Lucha Obrera, así como la validez, aciertos y contradicciones de las formas de organización de la Clase Trabajadora. Seguimiento de conflictos laborales, huelgas, etc.
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magidd
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REVOLUCION SOCIAL Y LA ORGANIZACION REVOLUCIONARIA

Mensaje por magidd » 19 Oct 2007, 10:32

Una alternative forista

Somos comunistas. No en aquello sentido vulgarizado y deformada que en todo momento, como el espantajo, es a nosotros de las páginas, los canales y las ondas los mass media (el regimen “comunista”, el Estado “comunista”, el partido “comunista”). El verdadero comunismo es anarquico, sin el Estado y la autoridad, esto es libre, libertario. Y cualesquiera hace ciento años, habiendo encontrado la mención de los comunistas, la persona podía ser asegurado casi a 100% que el discurso va sobre los anarquistas. Sólo en 1917 esta palabra fue robada por los bolcheviques, y luego es desfigurado por ellos y es presentado en el hazmerreír de todo el mundo…
Somos comunistas en aquello sentido antiguo, no robado todavía. En aquello, que significa la comuna libre y la asociación. Cuando la gente interesada juntos, conjuntamente (en las asambleas generales) acepta las decisiones de aquello, como vivir y que de hacer, ayudando uno a otro. Cuando ellos usan conjuntamente el bien disponible y de nuevo hecho de la planeta - diciendo las palabras del poeta-anarquista de XVIII s. Sylvaine Marechal, como usan luz del Sol que resplandece para todos.

ASAMBLEAS GENERALES

Somos comunistas no sólo en nuestra representación sobre el objetivo, sobre el futuro, por que luchamos. Somos comunistas tambien en nustra lucha misma. Por nuestra convicción, solamente las asambleas generales de las trabajadores en las empresas y en los establecimientos, solamente las asambleas generales de los habitantes de los barrios y las localidades deben solucionar, como estar en huelga o rebelar, como realizar las manifestaciones y los mitines, como romperse de las represiones y los órganos de la guardia del des-orden existante. Decidir por si mismo, sin representantes impostados o "elegidos-apoderados" - los partidos, las burocracias sindicales, los diputados y los jueces. Tales asambleas generales soberanas son no sólo el empeño del éxito de la lucha de hoy, sino también el prototipo, la base y la piedra angular de la Mañana libre.
Pero si vosotros, los anarquistas, defendeis las asambleas generales y veis en ellos la base de la sociedad libre - por qué contáis necesario la creación de la organización anarquista obrera? - puede preguntar el lector. Para que ella, si se reúnen tales asambleas?
Comenzaremos de esto que las asambleas generales son la rareza en Rusia moderna. Aquí la lucha es más a menudo conducida y encabezada por los partidos, los políticos y los sindicatos burocráticos. Sobre aquello, tanto como estar en huelga y para que, soluciona el comité del sindicato, y la asamblea reune sólo para ratificar las decisiones ya aceptadas. Al alguno más grande, como es aceptado de pensar, la masa "ignorante" es incapaz. Esta "tradición" triste debe ser demolida a toda costa! Por eso es vitalmente necesario de unir aquellos quién defende el principio de la soberanía de las asambleas generales.
Pero solamente las asambleas generales no son bastante hoy. En Francia, a distinción de Rusia, su convocación, al contrario, es la tradición. Tales "asambleas" se reúnen casi siempre, tan pronto como se inflama la huelga seria. Pero el poder en ellos es tambien muy rápido cogido por los representantes de cualesquiera partidos de oposición o los sindicatos. Después de esto, todas las decisiones reales del curso y la organización de la lucha son aceptadas ya por ellos, los líderes, en vez de asamblea de los trabajadores, bullicioso y indócil. Ellos dicen, deliberan, negocian con los empresarios y el poder, concluyen las uniones y la transacciónes después la espalda de los trabajadores… Y la gente "habitual" abajo se hace de nuevo a los figurantes - como siempre durante el capitalismo. Y esta vez las "partes inferiores" mismas renuncian la sua soberanía, ellos mismos "confían" a los jefes pensar y decidir por ellos.
Por qué ocurre así?
El hecho es que las asambleas generales serán sólo la forma de la aceptación de las decisiones. La mejor posible, pero con todo no el objetivo propio. De hecho, es posible aceptar sobre tal asamblea las decisiones más diferentes. Incluso las misantrópicas. Incluso sobre la renuncia de los reunidos de sus plenos poderes propios y su entrega en las manos de los "representantes", los jefes y los dictadores. No sólo la forma, sino también el contenido es importante, es importante la armonía entre ellos. Y el contenido de las decisiones de la asamblea es determinado por aquella gente, que en él participan. Por sus deseos, sus necesidades, sus convicciones, sus miradas. Todo depende de ellos.
Claro, el hombre es un ser social (en esto se contiene, como guste, su rasgo biológico). Claro, su conducta es determinada en mucho por el impulso profundo, genesíaco de la ayuda mutua y de la solidaridad. Pero no vale la pena de no hacer cuenta la realidad de esta sociedad, en que vivimos. Los milenios del Poder, del Dominio y de la Propiedad han desfigurado pesado a la persona humana. El capitalismo con su competencia, su egoísmo bestial, su persecución después la ventaja privada, sul conformismo y su consumerismo corrupto ha progresado especialmente en esto. Hoy muchos son despuestos de cambiar su libertad por el confort y contentarse con las migajas adquiridas por los esfuerzos mínimos y en la medida de lo posible sin la lucha. Vivimos en la sociedad enferma, en el mundo loco. Pero los enfermos siempre son tocarán de formas diferentes por la enfermedad. Las personalidades de nuestros contemporáneos son deformadas y desfiguradas en el grado diferente. No decimos ya de los gobernadores, los ricos, los empresarios y los banqueros: claro que el portamonedas puesto a la derecha, a ellos sustituye a menudo el corazón, como es conocido, situado a la izquierda. Pero de hecho y entre la gente del trabajo hoy es mucho aquellos, quién no piensa romper con el capitalismo y el poder, no desea tomar la carga de la dirección de vida propia.
Por consiguiente, si queremos que las asambleas generales se queden el órgano independiente que decide, que la misma gente «ordinaria» sea dueños de su lucha y su destino, por los partidarios de tal opción es necesario unirse y defenderlo juntamente.
Aquí para que la organización revolucionaria es necesaria: ella es llamado de unir en sus filas aquellos quién quiere y puede luchar conscientamiente por el triunfo de la Libertad, la Solidaridad y la Acracia; por aquello que la gente acuerde conjuntamente entre ellos como vivir; por la sociedad fundada en la autorrealización de la personalidad y la coordinación de los esfuerzos de la gente en las asambleas generales; por la posibilidad igual de usar el bien del mundo - por el comunismo anarquista. Que hoy en ella pueden ingresar sólo muy pocos. Somos firmemente asegurados que tarde o temprano nuestros ideas cristalmente claras convencerán la mayoría aplastante de la gente y cambiarán el Mundo.

NI PARTIDO POLITICO O GRUPO IDEOLOGICO...

Si significa esto que nosotros, los partidarios del comunismo libre, deben crear el partido político y luchar por el poder político?
La palabra misma el "partido" contiene ya en sí aquello que rechazamos: ello significa la "parte" - la parte del pueblo, que funciona en vez de él y por él. Ella es creada por aquellos quién pretende los puestos de los líderes, los jefes, los "representantes", aquellos quién quería que "la gente ordinarial" les haya entregue el papel de los dirigentes de la lucha y la vida. Los partidos funcionan siempre "de arriba" - hasta entonces, cuando ellos trabajan "abajo", en el ambiente popular. Confien a nosotros la representación de vuestros intereses, dicen ellos al "hombre pequeño", y nosotros entonces… Y el pobre, como Danae hipnotizado por el fantasma de la lluvia dorada que se vierte a ella, se arrastra obediente o incluso con entusiasmo por dar su voz, su tiempo, sus fuerzas, sus manos, sus cerebros … - más corto, darse, "ser dado".
Completamente insignificante, sobre cual partido va el discurso: parlamentario o "de vanguardia". En el primer caso, sus líderes tratan de presentar (lobby) los intereses de los grupos distintos de la sociedad que existe, prometiendo a todos los todo, pero satisfaciendo, al fin y al cabo, solamente a aquellos, quién tiene una riqueza y el poder. En segundo, sus jefes se declaran por la parte "avanzada" del pueblo, la élite natural solamente no comprenda y no estimada por los señores actuales. Pero siempre y dondequiera los objetivos y tareas de los partidos son unos y aquellos: venir al poder, formar el gobierno y violar la sociedad de arriba.
No, no vamos a crear un partido. Pero no queremos quedarse el grupo ideológico-propagandista, aunque somos obligado a veces comenzar así. La teoría es muerta sin práctica, las raciocinaciones de la torre del marfil sin vida real después sus límites son impotentes. Las ideas mueven el mundo, pero sólo entonces cuando ellos se hacen las fuerzas sociales.
No deseamos ser limitado con la difusión simple de nuestras ideas. A nosotros no es bastante de ser "allí, donde las masas son" y de decir con otra gente - parecidos y no parecidos de nosotros. Por nosotros, no es bastante de venirnos a los mitines y la asamblea de huelgistas o a las iniciativas de los inquilinos y llevar la agitación por la soberanía de las asambleas generales y la acción directa (por la defensa directa par la gente de sus intereses, no autorizando éste a las políticas, los partidos y los burócratas). Creemos que un movimiento potente social es necesario que se base conscientemente sobre el suelo de nuestras ideas y lucha por Libertad. No, no queremos ser grupo ideológico, que analiza, generaliza lo ocurrido y de las alturas "científicas" y "culturales" con la arrogancia más o menos escondida engreída alecciona a los hermanos «de clase», "conducidos" y "dirigidos" por el.
Aspiramos ser movimiento social, que destruye el régimen social existante y crea un nuevo.
La lucha contra este mundo de la explotación, del dominio, del poder y de la injusticia comienza de la resistencia contra cualquier atentado a nuestra vida y libertad. De las huelgas dirigidas al aumento del salario y la reducción del tiempo laboral (entonces, a la restricción de nuestra explotación y el aumento del tiempo para nuestro autodesarrollo). De las protestas contra la construcción de las casas para los ricos y comercial replanifiocacion de los barrios, en que vivimos. De la oposición a la construcción y la instalación de los objetos industriales o energéticos nocivos para la salud de la gente y la naturaleza. Con otras palabras, de las intervenciones, durante quellos nosotros, explotados, humillados y ofendidos, defendemos nuestras derechos y nuestras intereses en el sistema social existente, mientras que nosotros no en el estado por ahora de destruirlo.
Y ante todo, claro, esto tiene relación con la esfera del trabajo. Nos sometemos a la explotación y la opresión a cada paso - en el trabajo y en la familia, allí, donde vivimos, y allí, donde estudiamos… Pero la esfera principal de nuestra inderecha, donde es empeñada la base de nuestra esclavitud diaria, es sin embargo el trabajo. El era puesta por el capitalismo en el centro del mecanismo enorme y universal de nuestra humillación y del nuestro esclavizamento. Precisamente en el trabajo, nosotros, vendiendo nuestras fuerzas, manos y cerebros, vivimos la mayor parte de nuestra vida, gastando el tiempo restante por un poco de cobrar aliento, por descansar, por dormir y llevarse en el orden relativo. Es allí donde somos hechos descender hasta el papel de la máquina viva y el apéndice de otras máquinas - del metal y de la plástica. Es allí donde creamos la mayoría del bien necesario para la vida - y dependemos por completo de cualquier capricho de nuestros señores - el dueño o el jefe - que se son apropiado por las riquezas sociales, cfeadas por nosotros… Es porque aspiramos poner la esfera de nuestro trabajo (la empresa o el establecimiento, donde trabajamos, la escuela o la escuela superior, donde estudiamos) en el centro de nuestra resistencia contra el Capital y el Estado que nos oprimen.

... NI SINDICATO...

Pero entonces vosotros debeis entrar activamente en los sindicatos o - si ellos no arreglanvos por alguna razón - crear nuevos, dirá el lector. Y de nuevo somos obligados decir: no!
Los sindicatos han surgido a 19 siglo (en Rusia - en 20 siglo), más a menudo habiendo venido en vez de las asociaciones gremiales artesanales de los productores, disoludas y destruidas par el capitalismo. Siendo unido en las uniones segun las profesiones, los obreros trataban de ayudar uno a otro en la vida y el trabajo, ajustar el trabajo cultural, la partida por los enfermos y los ancianos. Muchas sindicatos intervenían como las sociedades de la resistencia, luchando por el aumento del salario, el mejoramiento de las condiciones del trabajo y la reducción del tiempo laboral. Con frecuencia ellos funcionaban de manière revolucionario, realizaban las huelgas de combate y las huelgas generales, se hacían el corazón de la especifica cultura obrera que se resistía a la civilización del capital. Muchas proclamaban abiertamiente los objetivos de la revolución social.
Pero ellos - incluso más revolucionarios - conservaban siempre el lugar débil. De hecho los sindicatos eran formados, respondiendo las necesidades de la gente del trabajo en la sociedad que existe. En primer lugar - las necesidades materiales, económicos. En las condiciones de la miseria salvaje del pueblo en 19 y el comienzo de 20 siglos parecía que el capitalismo no puede satisfacerlos y que, arrancando constantemente del capital su rejo, es posible pegarlo por ultima a la pared y terminar con él. Pero esta carrera a porfia fue perdida por los obreros. Resultaba que el sistema industrial-capitalista puede organizar la producción masiva despersonalizada para el consumidor despersonalizada de mase. Claro, la mercancía industrial fue donde peor por la cualidad, que la obra maestra del artesano medieval, pero él fue accesible a casi cada pobre "medio". Además, se ha aclarado que la burguesía y el estado pueden completamente aceptar muchos exigencias salariales de la gente del trabajo, habiéndolos satisfecho… a cuenta de otros trabajadores. Por ejemplo, levantar el salario de los trabajadores de cualquiera empresa que está en huelga - pero aumentar los precios de la mercancía producida y vendible. O reducir el tiempo laboral - pero simultáneo hacer el trabajo más intensivo y por el número menor de las horas sacar de los trabajadores de más energía y las fuerzas. Era claro: solamente de las necesidades materiales y económicas resulta ni mucho menos obligatoriamente la demolición del sistema injusto que existe. De hecho y el esclavo puede preferir, ni por que no respondiendo, vivir hartamente en la satisfacción a un "bueno" dueño, que llevar vida, completa el riesgo, de la persona libre.
Además, quedando en los cuadros del régimen existente de las cosas y no luchando directamente por la sociedad nueva, los sindicatos fueron abiertos para la gente con las convicciones más diferentes. Incluso aquellos, que no se decidían a la ruptura con el capitalismo y el estado y buscaban a sí unos señores más "decentes" - en la persona de los líderes de los partidos socialistas, y más tarde - los partidos "comunistas". Entregando la lucha por sus intereses en las manos de estos aventureros ávidos hasta el poder, los miembros de los sindicatos eran limitados voluntariamente aquello que defendían las exigencias completamente materiales y momentáneas de las mejores condiciones de la esclavitud. Había así una dualidad: los partidos ideológicos conducen la lucha política, y los sindicatos - económica. Y los mismos sindicatos se han reorganizado gradualmente segun esta esquema de la "representación" de los intereses. Dentro de estas organizaciones crecía y se reforzo una burocracia propia, y los miembros ordinarios se hacían cada vez más a los figurantes simples - los pagadores de los cuotas y los ejecutores de las decisiones. Al fin y al cabo, los sindicatos se han convertido en aquellos monstruos enormes burocráticos, que son bien conocidos a cada uno sobre la piel propia y son dignos solamente de uno - la demolición, la destrucción.
No queremos organizar un sindicato habitual, no ideológico y abierto "para todos trabajadores", porque no queremos contentarse con el mejoramiento simple de la posición de esclavo, no queremos romper el hilo único y vivo de nuestra lucha contra el Sistema todopoderoso a los momentos separados, no ligados uno con otro - económico, político, moral, ideológico, cultural… No, aspiramos vivir no simplemente mejor - pero de otro modo. Queremos ser gente libre!

SINO UNION OBRERA ANARQUISTA

La organización revolucionaria, que creamos, no es ni el partido, ni el sindicato. En su base ella es la unión obrera, ya que une la gente del trabajo, que resisten contra la explotación diaria y la opresión y por eso luchan por la reducción del tiempo laboral, por el mejoramiento de la situación material y moral. Pero tal mejoramiento no es para ella el objetivo propio, pero sólo el medio de despertar en la persona los principios que dormitan - de la solidariedad y la ayuda mutua, inspirarlo al espíritu de la rebelión revolucionario contra el poder y la propiedad, la desigualdad y la opresión. Solamente defendiendo los derechos y los intereses codo con codo, nosotros trabajadores podemos superar el egoísmo, hallar la dignidad humana y despertarse de la hibernacion secular, reconociendo: para liberarse nosotros mismos, es necesario terminar con todo el Sistema existente de la producción, la administración y la vida - y sustituir para un nuevo: el comunismo anarquista, acrata, libre.
Por eso nuestras sociedades de la resistencia de los trabajadores (segun las profesiones e interprofesionales) son al mismo tiempo las organizaciones ideológicos. Ellos son creados no en base de los intereses momentáneos económicos, aunque luchan y por ellos, y por el mundo nuevo. Nosotros somos por la organización trabajadora consciente anarquista. Ella es libre de la burocracia, la politiquería y el arribismo, todas las decisiones en ella se ponen por las asambleas generales de los miembros o (alta cerca de el nivel local) por los delegados de tales asambleas. Y los delegados serán no los "representantes", pero sólo la "voz" de aquellos quién de ellos ha dirigido, habiendo ligado con el mandato obligatorio para la ejecución.
Que tiene por delante ocuparse tal federación de la gente del trabajo? Las uniones, que la componen, son llamadas llevar un trabajo ideal, de agitacion y cultural, haciendo propaganda con la palabra y con el hecho de los objetivos altos y los principios del comunismo anarquista. Ellos deben preparar, organizar y realizar las huelgas y otras acciones de la resistencia contra el yugo del estado y el capital. Y al mismo tiempo, sus miembros son obligados actuar segun la manera anarquista en las grandes asambleas generales de todos los trabajadores de uno o de algunas empresas y establecimientos, en las asambleas y las iniciativas de los habitantes y etc. - conseguir que estas asambleas solucione las preguntas básicas de la lucha y la vida, oponerse a la influencia y el poder de los partidos políticos, los sindicatos y los líderes. Con otras palabras, ellos deben aplicar y defender la acción directa y el comunismo libertario.
Nuestro objetivo consiste en aquello que las masas de la gente del trabajo pasen en las posiciones conscientamente anarcocomunistas, comenzaban a pensar y obrar como los comunistas anarquistas, independientemente de lo que consisten ellos en nuestras uniones, o no. Entonces los órganos de la resistencia creados por ellos (las asambleas generales y los delegados de ellos), hoy tan rares, fluctuadas e inestables, pueden hacerse en el futuro por las estructuras regulares y constantes de la autoorganización y la autoadministración sobre la base comunista libre. Y entonces, todos nosotros explotados y oprimidos, inspirados por las ideas-fuerzas del comunismo anarquista, iremos en la cierta Gran Tarde al asalto último y decidido de los bastiones del Mundo Viejo.

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Mensaje por Jove Obrer » 11 Feb 2008, 17:09

En mi opinión veo varias contradicciones. Por una parte decís no ser un sindicato, ni partido, sin embargo habría que aclarar antes que es un partido, y que es sindicato.

Decís que no sois un partido, porque no sois "una parte del pueblo", por lo que se llega a la conclusión que un partido es una porción del pueblo, con una ideología o programa determinado. Sin embargo utilizais eufemismos como "grupo", que se encargaría de fomentar "las asambleas generales". Eso en mi opinión es un partido, si cojemos esa definición de partido. Sobretodo porque parece que se hace mucho incapié en que ese grupo o partido, tiene una línea ideológica muy determinada, en este caso la anarquista.

Decís estar en contra de los sindicatos, aunque en ningún momento realiceis una definición clara de que es para vosotros un sindicato, y creo que esto es muy importante porque a los trabajadores si nos vienes con líos así no entendemos mucha cosa, sobretodo si entendemos que un sindicato es una asociación de trabajadores para defenderse del capital en sus arremetidas contra el trabajo. Frentre al sindicato, proponeis la "unión de obreros anarquistas", antes vista, pero sin embargo defendeis las Asambleas Generales. ¿porque son válidas las asambleas generales (plurales) y no un sindicato (plural, pero no tanto)? ¿porque es válido la actuación dentro de la mepresa o la asmablea dell grupo o partido específico y no de un sindicato? ¿no es un retroceso democrático que tenga más importancia el grupo político en la labor de agitación laboral, que un conglomerado de trabajadores con un programa de mínimos pero ya unidos por un lazo de solidaridad y de apoyo mutuo? Sobretodo teniendo en cuenta que la afinidad puramente ideológica no garantiza un planteamiento de clase determinado denetro de la empresa, que si lo garantiza la afinidad de clase.

En momentos en los que no se puede ni debe acatar las decisiones de una Asamblea General, no entiendo porque un grupo compacto es más positivo que una sección sindical o comité sindical con actividad permanente y autónoma respecto a la asamblea.

Al fin y al cabo me parece que proponeis lo mismo que los sindicalistas revolucionarios, sólo que adjetivais más y utilizais otros conceptos para nombrar la misma esencia.
“Si lo real es móvil, que nuestro pensamiento sea también móvil y que sea el pensamiento de ese movimiento. Si lo real es contradictorio, que nuestro pensamiento sea pensamiento consciente de la contradicción.”

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