Hace varios meses pubiqué un hilo alrededor del eco-anarquismo como un filosofía de la praxis en los sistemas holísticos. Empezaré de nuevo breve, aunque la temática en realidad sea compleja. Volvamos a concepciones básicas como la teoría del plus-valor —o análogas en sus distintas varientes (proudhonianas, marxistas, etc) Después consideremos la realidad metabólico-ecólogica de la vida en la tierra, y consideremos sus analogías con las posturas alrededor de la extracción inequitativa por parte del propietario del medio de producción hacia sus trabajadores prácticos (energéticos en el sentido mecánico e intelectual). Para empezar, pondré sobre la mesa ciertas consideraciones previas que me permitan fundamentar que quiero decir y a donde quiero llegar.
Primero: Entiéndase por plusvalor tanto el hecho de que el propietario del medio de producción que no trabaja sus medios extrae del trabajador su praxis de movilidad del mismo medio como también, y eso lo señalaría Proudhon en 1840, la fuerza de la colectividad de trabajadores, que el patrón paga por asalarianismo individual, esto es, sin considerar la fuerza productiva en su necesario holismo. Aquí pretendo analizar como se concilia este fenómeno con el de sistema vivos y con el real libre-mercado
Segundo: Entiendase por metabolismo el proceso tanto catabólico como anabólico de los sistemas vivientes. Esto es, el proceso energético de desdoblamiento de moléculas orgánicas y de recomposición de las mismas por medio de energía exógena —en este caso, energía fotónica solar.
Tercero: El naturalismo dialéctico de Bookchin, una postura filosófica de los sistemas vivientes, muy poco popular pero muy interesante y sencilla de entender, que concibe el desarrollo y las potencialidades alrededor de el aumento de la complejidad de los sistema viviientes, lo cual lleva , desde mi punto de vista, aparejada un aumento en las variantes de un sistema sin una necesidad de aumento del consumo energético —como por ejemplo, el desdoblamiento de procariotas a eucoriotas, pluricelulares, sistemas nerviosos complejos, etc con más o menos la misma introducción de energía endógena. Junto a ello, aspectos de la teoría del Caos, como el hecho de que pequeñas variantes en un sistema generen cambios importantes en su desenvolvimiento, lo que nos obligaría a reconsiderar esas pequeñas iniciativas que generalmente desdeñamos de otra manera —y dejar de darle tanta importancia a fenómenos del Gran Hombre y las ideologías mesiánicas revoucionarias (de la que vive la gran parte del marxismo-retórica)
Cuarto- El fenómeno de la sedimientación de algunas moléculas energéticas producidas por el mismo metabolismo planetario permitió que se produciera la civilización de los combustibles fósiles, y lleva en consecuencia explosión demográfica tremenda, un aumento de la complejidad por un aumento en el uso de energía no renovables y produce una población enajenada e inepta en su mayoría para satisfacer necesidades básica en su medio ambiente local. Este fenómeno conmenzó justo en época de las críticas a la economía política (Proudhon, Marx etc) y ahora estamos justo en su cenit, con la decadencia en el horizonte.
Quinto-La historiografía de Kevin Karson alrededor de que el capitalismo es más un fenómenos de coerción política de instituciones centralistas que otorgan privilegios que de una mera fenomenologías de mercado (como creyera Engels más que Marx). Y por supuesto dejar de atacar muchas de las posturas del anarco-capitalismo a través de los betustos y anacrónicos argumentos marxistas de la lucha de clases y las fases históricas (puro teleologismo en pleno siglo XXI).
Venga entonces, es momento de los anarquistas dejemos de ser de izquierda o de derecha para transformarnos en algo distinto, los creadores prácticos con mayor iniciativa de la autogestión real —metabólicamente hablando. Tenemos el mejor fundamento teórica para realizar el movimiento práctico de la libertad, pero desafortunadamente demasiado disperso y sectarizado (lo primero tal vez sea un ventaja, pero en definitiva lo segundo no). Me importa menos que los idiotas dogmáticos de siempre sean convencidos y más que la teoría lleve a consecuencias prácticas reales, aunque sea en pequeña escala
Así que en vez de andar defendiendo a ultranza una postura ideológica, como sucede en la mayoría de estos foros, propongo una apertura a muchas posiciones para combinar lo mejor de ellas y que el movimiento libertario tenga más solidez teórica transformacional.
Empecemos pues con las consideraciones del plusvalor