Saint-Imier 2023: Los Encuentros Internacionales del Anarquismo. Relato de la FAI

[[Nota de NoticiasALB: creemos que parte de este texto no se comprende bien si no se han leído previamente otros que explican los conflictos que hubo en torno a un libro "islamófobo" y la cuestión ucraniana que suscitaron toda la polémica, como el traducido por los compas de Briega:  St-Imier 2023: libros islamófobos, acción directa y evacuación de la crítica]]]

Este verano en Saint-Imier, Suiza, del 19 al 23 de julio, se celebró una de las reuniones anarquistas internacionales más importantes de los últimos años, los Rencontres Internationales Antiautoritaires (RIA) "Anarchy 2023". Participaron miles de personas de diferentes continentes, aunque una parte significativa provino de la Europa francófona y de habla alemana. Como Federación Anarquista Italiana - FAI hemos participado en el proceso organizativo desde 2020, y participamos con una gran delegación contribuyendo activamente: proponiendo debates, organizando una exposición y teniendo un stand de la revista semanal Umanità Nova y de las ediciones Zero in Condotta en la feria del libro.

Esta reunión celebró 150 años más uno (el evento fue pospuesto debido a la pandemia) del congreso que se celebró en este pequeño pueblo del Jura bernés los días 15 y 16 de septiembre de 1872, y que pasó a la historia como el acto de nacimiento del movimiento anarquista organizado. Fue entonces cuando por primera vez la corriente antiautoritaria del movimiento obrero y revolucionario definió colectivamente sus principios. En torno a la cuestión de la toma del poder político hubo una profunda fractura dentro de la Association Internationale des Travailleurs (AIT), más conocida como la Primera Internacional. En el Congreso celebrado en La Haya del 2 al 7 de septiembre de 1872, Marx aprovechó la ilegalización de la sección francesa, la más grande, después de la Comuna de París, para transformar las secciones nacionales de la Internacional en partidos destinados a participar en las elecciones. El Congreso de Saint-Imier fue consecuencia de esta fractura, y en la declaración "la destrucción de todo poder político es el primer deber del proletariado" encontramos resumida la posición de las secciones antiautoritarias de la AIT juraciana, italiana, española, francesa y americana que, en esa ocasión, iniciaron una experiencia organizativa en continuidad con el camino internacionalista que acababa de dividirse.

Sin embargo, no fue una reunión de celebración, de hecho solo hubo una conferencia de estudio histórico sobre el Congreso de 1872. Desde el principio, se ha dado centralidad a la actualidad de las prácticas e ideas anarquistas. Fue una clara elección del comité organizador, formado en 2020 a instancias de exponentes del movimiento anarquista y libertario local, con la participación de la Federación Anarquista Francófona y la Federación Anarquista Italiana.

Se llevaron a cabo más de 400 debates, presentaciones, conferencias y talleres, docenas de proyecciones de películas, y luego conciertos, representaciones teatrales, actuaciones, exposiciones y una feria del libro que acogió a más de 100 expositores. Las actividades, así como en las calles y plazas, se llevaron a cabo en 12 espacios diferentes repartidos por todo el país que cuenta con poco más de 5000 habitantes. Varios colectivos de cocinas móviles instalaron dos grandes cocinas y prepararon desayunos, almuerzos y cenas para los participantes, más de 5000 comidas se distribuyeron solo el sábado por la noche.

Ya en 2012 se celebró una reunión similar en Saint-Imier, con cerca de 4000 participantes. En esa ocasión, las presencias no europeas fueron ciertamente más consistentes y representativas, especialmente de América Latina. El papel de las organizaciones, federaciones, sindicatos, redes internacionales y grupos anarquistas también fue mayor, mientras que esta vez grandes partes del movimiento anarquista organizado no estaban formalmente presentes, dejando más espacio para la espontaneidad y la participación individual. Esto probablemente hizo que la reunión de 2023 fuera menos representativa de la realidad plural del movimiento anarquista organizado globalmente. Claramente, en 2012 hubo un contexto diferente marcado por movimientos que, tanto en las orillas del Mediterráneo como al otro lado del Atlántico, vieron la participación, aunque de una manera diferente, del movimiento anarquista.

Sin embargo, también esto fue en parte una elección precisa del comité organizador, que inmediatamente prefirió abrir la reunión por lo posible a la participación espontánea. De hecho, cualquiera podía proponer debates y actividades a través de una plataforma en línea, y ni siquiera una presentación fue programada directamente por el comité organizador que actuó solo como filtro e infraestructura. También hay limitaciones en esta fórmula: en las semanas previas a las RIA, hubo duras críticas a la presencia de oradores más cercanos a las posiciones "liberales" o "conspirativas". Por lo tanto, el programa fue revisado, y algunas iniciativas claramente alejadas del movimiento anarquista fueron canceladas. El problema, sin embargo, ciertamente no es técnico, es político. La falta de participación de organizaciones capaces de hacer contribuciones colectivas al debate del movimiento se hizo sentir, incluso en la fragilidad de la base política del evento en sí.

En cualquier caso, aquellxs que han leído el programa de "Anarquía 2023" pueden identificar los temas en torno a los cuales se desarrolla la actividad del movimiento anarquista hoy, temas centrales en la realidad actual: la guerra, el resurgimiento de regímenes autoritarios y dictaduras militares, el retorno del fascismo en diversas formas, el clima, la actividad sindical, la explotación capitalista, las luchas feministas y queer, políticas racistas y de cierre de fronteras; Todos estos son elementos tratados en debates, talleres y conferencias desde diferentes puntos de vista. Probablemente las iniciativas más interesantes fueron las presentaciones de las realidades más alejadas del contexto europeo en el que tuvo lugar la reunión. Este es el caso de las actividades propuestas por los grupos de Brasil, Chile, Perú, Filipinas, Irán, Turquía, que han aportado un aporte significativo de nuevas experiencias y perspectivas, permitiéndonos ampliar nuestra mirada, y tratar de salir de una visión eurocéntrica.

Como Federación Anarquista Italiana hemos hecho una contribución específica sobre los temas del antimilitarismo y el antifascismo. Grupos individuales e individuos federados también promovieron y participaron en diversas presentaciones y conferencias. Además, la FAI junto con la FAO de Eslovenia y Croacia y la APO de Grecia, federaciones de IFA activas a lo largo de las fronteras europeas más sangrientas, desplegaron una pancarta contra la Fortaleza Europa. El taller antimilitarista se dividió en tres días separados, en tres lugares diferentes. El jueves 20 se celebró la primera reunión en la sala principal, casi llena; en esa ocasión se presentaron principalmente nuestras posiciones sobre el concepto de antimilitarismo anarquista y sus prácticas, sobre la guerra en Europa del Este, y con ejemplos de luchas en las que estamos comprometidxs, desde el Movimiento No Base de Pisa hasta las huelgas generales contra la guerra organizadas por el sindicalismo de base. En los dos días siguientes las reuniones se llevaron a cabo en locales menos oficiales y esto permitió una mayor interacción y comparación con compañerxs de diferentes países sobre las prácticas de lucha. También hubo momentos de contradicción, con intervenciones críticas que abrieron el debate sobre las diferentes posiciones que surgen sobre la situación en Ucrania.

Sin embargo, este ciclo de iniciativas ha tenido un resultado concreto. A partir de la reunión con individuos y grupos antimilitaristas de diferentes partes del mundo, se lanzó la idea de una iniciativa común que se realizará en noviembre. Sobre el fascismo hemos tratado de aportar una contribución específica para alimentar el debate a nivel internacional, tratando de definir las características del régimen fascista histórico en Italia, y las características del gobierno fascista que se sienta hoy en Roma. Se señaló que el gobierno actual en materia de guerra, explotación de la clase obrera, autoritarismo, racismo, no hace más que seguir el camino ya trazado por gobiernos anteriores, distinguiéndose en cambio por el ataque a las mujeres y las subjetividades no binarias, en un intento de consolidar la dominación patriarcal. Recordando el compromiso del movimiento anarquista en la lucha contra el fascismo durante el siglo pasado, se subrayó la importancia de mantener una perspectiva de transformación social radical, porque solo la revolución social puede detener al fascismo. La especificidad de la situación italiana despertó gran interés y al final de la presentación, a pesar de las dificultades de traducción, se abrió un debate interesante y animado en una sala abarrotada, con preguntas e intercambios sobre las respectivas experiencias de lucha en los diferentes países.

Sin embargo, además de las muchas cosas positivas, hemos sido testigos en algunas ocasiones de la implementación de prácticas que no se ajustan a nuestra ética y de la difusión de mensajes que nos parecen incompatibles con los valores y principios que el movimiento anarquista ha estado llevando a cabo durante 150 años. Si exponemos estas críticas no es para polemizar con este u otro grupo, sino porque pensamos que no podemos callar sobre los problemas que el movimiento anarquista internacional debe enfrentar si quiere crecer frente a los desafíos que nos esperan. Nos referimos a la actitud de algunos individuos y grupos que han tratado de utilizar la reunión para imponer su propia línea política incluso violentamente, identificando a algunas organizaciones históricas del movimiento anarquista como nada menos que el "enemigo".

El primer caso fue el de grupos que apoyan a los llamados "combatientes antiautoritarios" enmarcados en el ejército estatal ucraniano. Si bien consideramos que esta opción es contraria a nuestros principios y a nuestra práctica antimilitarista, nunca nos hemos opuesto a su presencia en Saint-Imier, en el espíritu de apertura y pluralismo que caracterizó esta edición de la RIA. Lo grave no es que estos grupos hayan intentado obtener la máxima visibilidad, sino que lo han hecho de una manera incompatible con lo que consideramos un método libertario. Estos grupos organizaron algunos talleres y una conferencia en la sala principal. En estas reuniones, a cualquiera que intentara expresar críticas o simplemente opiniones diferentes se le negaba sistemáticamente la palabra. En los raros casos en que se concedió la palabra a quienes expresaron una visión diferente a la de lxs organizadorxs, se interrumpieron desde la “mesa”, por lo tanto desde una posición de poder, las intervenciones más desagradables para ellxs con el pretexto de que estaban "fuera del tema". Aquellxs que han intentado alzar sus voces para protestar contra estos métodos han sido insultadxs, deslegitimadxs y amenazadxs incluso físicamente. Lxs compañerxs que intentaron hablar en el debate del sábado por la tarde estaban rodeadxs de individuos que formaban parte de una especie de "servicio de seguridad", que no se hicieron escrúpulos para arrancar carteles de las manos de algunxs compañerxs pacifistas que los habían expuesto.

Esto nos parece grave no solo porque censurar violentamente el debate es una práctica autoritaria, sino también porque fue la privatización de un espacio que ha sido conquistado colectivamente por quienes han organizado las RIA en los últimos años. También fue grave que los miembros de estos grupos repitieran públicamente mentiras contra las organizaciones anarquistas que se pronunciaron en contra de la guerra, incluso acusándonos de "ser súcubxs de la propaganda de Putin". Frente a estas calumnias y falsedades sólo podemos referirnos al documento "Por un nuevo manifiesto anarquista contra la guerra" https://www.federazioneanarchica.org/archivio/archivio_2022/20220722manifestonowar_en.html que expresa claramente la posición de la FAI, que difundimos ampliamente en cientos de copias en Saint-Imier, y enfatizamos que la censura, así como la denigración sistemática y la deslegitimación de lxs opositorxs son prácticas autoritarias que no deben tener cabida en el movimiento anarquista.

Finalmente, individuos no identificados agredieron físicamente y repetidamente el banquete de la FA francófona, con el pretexto de que dos libros que algunxs consideraban "islamófobos" fueron expuestos, rompiendo y quemando los libros en cuestión, atacando a compañerxs individuales, intentando organizar una protesta más amplia contra la FA como tal, supuestamente acusado de "racismo". Si los debates que tienen lugar en Francia sobre estos complicados problemas no pueden abordarse exhaustivamente en estas pocas líneas, quisiéramos subrayar que ninguna crítica política puede expresarse en formas que recuerden los métodos de los peores regímenes autoritarios contra los que luchamos. Al señalar el comunicado de solidaridad con la FA firmado por varias federaciones de la IFA https://www.federazioneanarchica.org/archivio/archivio_2023/20230808solidarieta.html, debemos enfatizar que estos ataques han tenido lugar sistemáticamente contra las organizaciones históricas del movimiento anarquista. Además, en algunas de estas situaciones tensas lamentablemente ha habido una falta de mediación por parte de los grupos de trabajo responsables de esta función.

Creemos que la reunión de Saint-Imier, así como la Feria del Libro Anarquista de los Balcanes celebrada en Liubliana a principios de julio, fue de crucial importancia para nuestro movimiento, una oportunidad excepcional para el intercambio, el renacimiento y la clarificación para continuar, en una fase compleja como la que estamos atravesando, nuestra lucha internacionalista, antimilitarista y revolucionaria. También es importante enfatizar las limitaciones de estos eventos y, sobre todo, rechazar todas prácticas dogmáticas y sectarias. Aunque estos eventos contaron con la participación de solo una parte del movimiento, es claro que la actualidad de los temas abordados, la vivacidad del debate, la pluralidad de posiciones es un signo de un dinamismo que es difícil de encontrar en otras corrientes revolucionarias. Incluso en un contexto global muy difícil, el movimiento anarquista todavía tiene una influencia significativa y puede desempeñar un papel central. Depende de nosotrxs mostrar la contribución crucial que puede hacer como práctica revolucionaria a la causa de las clases oprimidas y explotadas en todo el mundo.

Comisión de Relaciones Internacionales de la FAI (Federazione Anarchica Italiana)

Desde Umanità Nova: https://umanitanova.org/vacanze-intelligenti-gli-incontri-internazionali-dellanarchismo/