El educador mercenario

Año publicación: 
2009
Autor / es: 
P. García Olivo
Editorial: 
Ed. Brulot
ISBN: 
Páginas: 
124
Tamaño del libro: 
12 x 17 cm
Web: 
http://www.brulot.org/

portada “El educador mercenario” recoge y desarrolla claramente a modo de entrevista las tesis de Pedro García Olivo contra la escuela y el profesor en cualquiera de sus formas. Siendo “El Irresponsable” un ejercicio de crítica y reflexión, de ataque y exasperación contra la realidad escolarizada, Brulot apuesta con este texto por una exposición clara de la antipedagogía por parte de su autor, como crítica necesaria frente a una institución totalitaria como es la escuela, pieza fundamental para la fabricación de individuos acríticos, dóciles y fácilmente manipulables. Crítica difícil y comprometida en cuanto que también afecta a todas aquellas experiencias que desde un discurso “liberador” o “libertario” defienden la “escuela” como elemento transformador de la sociedad.

“No dirijo mi crítica cotra la figura "clásica" del maestro, del profesor adicto al Sistema, "tradicional" en términos pedagógicos (...) Me parece que es ésa, como diría Marx, una "crítica sustancialmente acabada". Todas las "críticas sustancialmente acabadas" tienden a justificar lo establecido, legitimándolo 'por contraposición'; y a oscurecer, a obstruir, las "críticas por emprender", o "en curso", las críticas verdaderamente 'oportunas', 'peligrosas'. Por ejemplo, la crítica de la Dictadura, sustancialmente acabada, distrae de la crítica de la Democracia - y el recuerdo permanente de los horrores 'represivos' de las dictaduras (...) sirve a la "legitimación por contraposición" de las democracias, supuestamente no-represivas.

(...)

En nuestro terreno, la crítica facilísma, ya hecha, acabada del "profesor tradicional" diluye y pospone indefinidamente la crítica, que considero inaplazable, del "profesor moderno", "progresista", "contestatario", del "profesor reformista".

Extracto “El educador mercenario”

---

“La ideología de la escuela ha gozado de tan buena popularidad en las sociedades modernas occidentales que ha desplazado en todos los lugares al aprendizaje que naturalmente se da dentro de una comunidad determinada. Precisamente, a la disolución de la comunidad (bien la rural, bien la de los barrios de las ciudades) ha contribuído enormemente, desde la figura del maestro que en los pueblos introducía las grandes ideas desarrollistas de la urbe -como ocurre hoy con las escuelas occidentales en las comunidades indígenas- a la afirmación que ella misma representa de la diferencia entre especialistas “inteligentes” y un pueblo dependiente, necesitado de dirección y asistencia.

(...)

la tradición libertaria de las últimas décadas ha pecado en exceso de mitomanía. ¿Se han mitificado, como pasa con las heroicidades del pasado, también las escuelas libertarias?. Está claro que el tipo de formación que reivindica Pedro tomando como modelo los pueblos indígenas hace referencia a una serie de cuestiones que en el ámbito de la escuela, sea de la índole que sea, no se pueden abordar, pues tratan de un aprendizaje real, natural y espontáneo del que se han hecho cargo las comunidades tradicionales que la escuela y su ideología vienen a sustituir, incluso a despreciar. El cimiento profundo de la existencia de colegios y universidades no es otro que la separación entre gobernados y gobernantes, creando estos una clase de especialistas que en todas las materias han ido minando la autosuficiencia popular en materia de conocimiento que respondía a unos modos autónomos de trabajo y enriquecimiento personal. La escuela es una de la causas fundamentales por tanto de disolución de la autonomía y con ello, de la libertad de los pueblos para comprender el mundo y organizar su vida por sí mismos.”

De la nota de presentación de la editorial Brulot

 

Aviso Legal  |  Política de Privacidad  |  Contacto  |  Licencias de Programas  |  Ayuda  |  Soporte Económico  |  Nodo50.org