La coherencia se da entre ideas, entre prácticas, o en la relación entre ideas y prácticas.
- Si atendemos a la razón número tres del texto, encontraremos:
3. Porque es legítimo utilizar cualquier medio para oponerse a un sistema que utilizará cualquier medio para expanderse y destruirte.
En efecto. Legítimo, lícito, justificado. Se suele decir que "
En la guerra todo vale". Si bien esto no es del todo así, pues existen principios morales... Cualquier estratega sabe que resulta contraproducente sobrelimitar la práctica con la moral. Por el contrario, el objetivo de la lucha, cuya consecución representa la victoria, sí ha de estar en concordancia con la moralidad de los combatientes. Entrar en conflicto con dicho objetivo sí es una incoherencia a evitar, pues abocaría a la derrota. Dos ejemplos sobre ello:
- Dos ejércitos abstractos están en guerra por controlar una zona rica en recursos naturales. Como es normal, cada uno de ellos demoniza y odia al enemigo en su conjunto.
- Sobrelimitación de la práctica: Como el enemigo es tan horrible, a los soldados en el campo de batalla no se les permite usar las armas enemigas que encuentren, ya que son impuras y están malditas.
- Incoherencia a evitar: El enemigo se adelanta y sitia la zona rica en recursos. Con el fin de acabar con él, se bombardea intensamente dicha zona. El resultado, se acaba tanto con el enemigo como con la riqueza natural perseguida.
- Una corriente ideológica entra por sí misma en un conflicto irreconciliable con el Sistema imperante. Ésta rechaza radicalmente tanto la forma de funcionar como los productos y consecuencias de dicho Sistema.
- Sobrelimitación de la práctica: Como el Sistema es tan horrible, los integrantes de dicha corriente ideológica rechazan el uso de todo tipo de productos del Sistema pues son impuros y están malditos. Desde ordenadores hasta bolígrafos bic, pasando por ropa, vivienda y productos alimenticios.
- Incoherencia a evitar: Como el Sistema se adelanta y adquiere todos los monopolios, los integrantes de la corriente ideológica deciden introducirse en él y tratar de controlar dichos monopolios para, cuando lo consigan, forzar el cese de su actividad. Desgraciadamente sólo colaborarán con el Sistema y serán eliminados por él en cuanto supongan un problema, gracias a la capacidad que le aporta su intacta infraestructura.
En conclusión:
El fin no siempre justifica los medios, pues algunos medios pueden ser contraproducentes para dicho fin. En realidad,
los medios han de estar autojustificados. Esto es, como se decía al principio, ser lícitos, légitimos, o dicho de otro modo, aceptables por beneficiar al objetivo principal de la lucha. Pero lo realmente importante de todo este asunto es ver cómo niegan comer ajos todos aquellos que se pican cuando se les alude en el texto. Pues sus actos también generan demanda de unos productos (en este caso ordenadores) que no han sido fabricados ni libre, ni justa, ni horizontalmente.
Un saludo.