Parte de lo de Interviú ya está en la web.
En la impresa hablan de otros intentos de infiltración en Ford-Almussafes y del caso de Aníbal Pascual, que fue representante de CGT en la Junta de Personal de la Universidad de Valencia (ya expulsado), que fue cabeza de lista del MSR por Teruel.
http://www.interviu.es/reportajes/artic ... -en-la-cgt
Juan Antonio Aguilar fue miembro del grupo neonazi Bases Autónomas y candidato de la Plataforma España 2000, y es dirigente del partido ultra Movimiento Social Republicano. En un juicio celebrado en junio en la Audiencia Nacional, definió a Roberto Luengo como “buena gente y nada reprochable en principio”. Roberto Luengo, conocido como el Führer de Getafe, sería condenado luego a tres años de cárcel por dirigir Blood & Honour (Sangre y Honor), un grupo neonazi que dio como domicilio social la sede del Movimiento Social Republicano en San Sebastián de los Reyes (Madrid).
Aguilar y otros tres neonazis forman parte, como representantes del sindicato anarquista, del comité de empresa en Madrid de la multinacional Tecnocom, una de las cinco primeras compañías del sector de la tecnología de la información en España. Los neonazis que ahora han causado el conflicto en el Sindicato de Banca de la CGT fueron elegidos en 2008 en las listas de CC OO, pero se les apartó de la organización poco después.
Sectores de la coordinadora de Informática del Sindicato de Banca de CGT advirtieron esa infiltración neonazi y decidieron ponerse en contacto mediante un correo electrónico con sus compañeros en el comité de empresa de Tecnocom. En el correo añadían un archivo con datos políticos sobre la militancia y activismo político de los neonazis, lo que incluía varios BOE con las candidaturas a las elecciones generales de 2000 y 2004 y locales de 2007, además de libros de contenido ultra.
La respuesta de los representantes de CGT Tecnocom, con fecha de 25 de marzo de 2010, decía lo siguiente: “La información que nos facilitas ya nos la entregó previamente CC OO (hace casi 10 años), y en CC OO admitieron su afiliación sin ningún problema (o para evitar problemas). Los sindicalistas anarquistas no veían problema en la militancia racista de Aguilar y sus compañero. Según antifascistas de la CGT, “es tan grave la presencia de los neonazis como de aquellos que les dan apoyo dentro de la organización o que justifican su presencia”. Un documento facilitado a interviú define uno a uno a los miembros del comité de empresa de CGT en Tecnocom y su postura ante el conflicto; además de los datos ya conocidos de Juan Antonio Aguilar incluye a Manuel Manzano y a su hermano Antonio, miembros de CGT y de MSR.
Antonio Pérez Collado, secretario general de CGT del País Valenciano y Murcia, informaba a esta revista mediante un correo electrónico enviado el día 16 de julio que “se puede afirmar que los neonazis que se infiltraron en una de nuestras secciones sindicales ya han sido apartados de todo lo que tenga que ver con CGT”. Insiste en que CGT no puede aceptar la presencia de estos elementos en el sindicato y en que hay que apartarlos si se detectan: “CGT es el único sindicato en el Estado español que no acepta la afiliación de trabajadores que utilicen las armas o la violencia como herramientas de trabajo”.
Más información en la revista ‘Interviú’.
Nazis en sindicatos
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Beatriz Antifa
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Re: Nazis en sindicatos
Leído en un foro de España 2000:
esp2000.org/forum/forum_entry.php?id=190286&page=0&category=all&order=time
LOS EXPULSADOS SON PATRIOTAS NR DEL ENTORNO DE LA REVISTA DISIDENCIAS
escrito por Patriota madrileño E-mail, Madrid, 14.08.2010, 17:29
Son patriotas que se podrían definir de izquierda nacional.
Que se afilian buscando abrir vías de influencia en los sindicatos de izquierdas que -en teoría- podrían ser receptivos a ideas sindicalistas revolucionarias con tinte patriota.
Recordemos que una corriente que ha alimentado historicamente al socialpatriotismo fue la sindicalista revolucionaria, con gente como Sorel.
Y no olvidemos las conversaciones de Angel Pestaña (del anarquista Partido Sindicalista) con gente de Falange y en concreto con Ramiro Ledesma Ramos, en los años 30 del pasado siglo, cuando Ramiro estaba construyendo una opción que se podría definir como precursora de lo que ho llamamos patriotismo nacional-revolucionario.
Aunque en este caso de la CGT, personalmente dudo de la eficacia de tal operación.
Conozco personalmente a varios camaradas que han protagonizado esta situación y puedo decir que su calidad política es de las más valiosas del panorama patriota, en concreto Juan Antonio Aguilar, conocido en todo el mundo patriota y fundador de la magnífica revista DISIDENCIAS.
En cuanto al mensaje del Sr. Pozo, decirle que una cosa es el anarco-capitalismo, al que sin duda él se refiere, y otra distinta es al anarco-sindicalismo, que es de izquierdas claramente, mientras que el anarco-capitalismo es una sublimación del liberalismo libertario ultraindividualista, que nada tiene que ver con el anarcosindicalismo.
Los camaradas a los que se refiere la noticia merecen toda nuestra admiración aunque no compartamos todas sus estrategias.
esp2000.org/forum/forum_entry.php?id=190286&page=0&category=all&order=time
LOS EXPULSADOS SON PATRIOTAS NR DEL ENTORNO DE LA REVISTA DISIDENCIAS
escrito por Patriota madrileño E-mail, Madrid, 14.08.2010, 17:29
Son patriotas que se podrían definir de izquierda nacional.
Que se afilian buscando abrir vías de influencia en los sindicatos de izquierdas que -en teoría- podrían ser receptivos a ideas sindicalistas revolucionarias con tinte patriota.
Recordemos que una corriente que ha alimentado historicamente al socialpatriotismo fue la sindicalista revolucionaria, con gente como Sorel.
Y no olvidemos las conversaciones de Angel Pestaña (del anarquista Partido Sindicalista) con gente de Falange y en concreto con Ramiro Ledesma Ramos, en los años 30 del pasado siglo, cuando Ramiro estaba construyendo una opción que se podría definir como precursora de lo que ho llamamos patriotismo nacional-revolucionario.
Aunque en este caso de la CGT, personalmente dudo de la eficacia de tal operación.
Conozco personalmente a varios camaradas que han protagonizado esta situación y puedo decir que su calidad política es de las más valiosas del panorama patriota, en concreto Juan Antonio Aguilar, conocido en todo el mundo patriota y fundador de la magnífica revista DISIDENCIAS.
En cuanto al mensaje del Sr. Pozo, decirle que una cosa es el anarco-capitalismo, al que sin duda él se refiere, y otra distinta es al anarco-sindicalismo, que es de izquierdas claramente, mientras que el anarco-capitalismo es una sublimación del liberalismo libertario ultraindividualista, que nada tiene que ver con el anarcosindicalismo.
Los camaradas a los que se refiere la noticia merecen toda nuestra admiración aunque no compartamos todas sus estrategias.
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camarada nikolai
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Re: Nazis en sindicatos
lo que en mi opinion esta en tela de juicio es que segun algunas fuentes el sindicato CGT estaba alertada por algunos afiliados al propio sindicato de la infiltracion neonazi sin tomar medida alguna durante meses, seguramente hasta que a habido una trancendencia publica
" Algunos miembros del sindicato ya denunciaron en marzo pasado los hechos a varios miembros de la sección sindical de CGT en Tecnocom, pero la respuesta que recibieron por correo electrónico fue la siguiente: “Desde que le conocemos, el comportamiento de Juan Antonio, cuando formaba parte de CCOO y ahora que ha pasado a nuestras filas, siempre ha sido el mismo: coherencia en la defensa de los derechos de los compañeros y siempre intentando implicar a los mismos en su defensa. Es más, siempre ha trabajado por encima de la media del resto de representantes”.
Sin embargo, no ha sido hasta ayer cuando, tras una llamada recibida por este diario, el sindicato no ha enviado un comunicado interno a sus miembros en el que asegura que “detectada la presencia de personas de ideología neonazi como afiliadas en una sección digital de CGT, la organización ha puesto en marcha sus procedimientos estatutarios y ya han dejado de pertenecer al sindicato de forma fulminante”.
" Algunos miembros del sindicato ya denunciaron en marzo pasado los hechos a varios miembros de la sección sindical de CGT en Tecnocom, pero la respuesta que recibieron por correo electrónico fue la siguiente: “Desde que le conocemos, el comportamiento de Juan Antonio, cuando formaba parte de CCOO y ahora que ha pasado a nuestras filas, siempre ha sido el mismo: coherencia en la defensa de los derechos de los compañeros y siempre intentando implicar a los mismos en su defensa. Es más, siempre ha trabajado por encima de la media del resto de representantes”.
Sin embargo, no ha sido hasta ayer cuando, tras una llamada recibida por este diario, el sindicato no ha enviado un comunicado interno a sus miembros en el que asegura que “detectada la presencia de personas de ideología neonazi como afiliadas en una sección digital de CGT, la organización ha puesto en marcha sus procedimientos estatutarios y ya han dejado de pertenecer al sindicato de forma fulminante”.
soy un hombre nada de lo humano me es ajeno
Re: Nazis en sindicatos
El kulebrón neonazi (capítulo 2)… o el inocente es culpable
El pasado -reciente- se hace presente : quien ya ha sido expulsado se dice que sigue ocupando el cargo. Así se vende más y mejor una información, según los cánones éticos de algún Baltasar Garzón del periodismo, llámese por ejemplo Joan Cantarero (ver http://www.interviu.es/reportajes/artic ... -en-la-cgt).
Es preferible -siempre, además de fácil- juzgar que ser juzgado. Y es aconsejable hacerlo -siempre, además de fácil- desde un doble estatus de poder, político y mediático : desde el ser un afamado antifascista des-velador de entuertos en la cloacas del neo-arcaico-nazismo y desde el tener una plataforma editorial donde colocar sus ¿investigaciones ? periodísticas.
Lo primero se supone que le da una credibilidad en ciertos sectores de la izquierda social. Cuestionarle en algo, por lo tanto, puede significar darte de bruces con sectores que creías propios, y quizás se tornen ajenos. Sinceramente espero que no, aunque asumo el riesgo.
A mediados de febrero de este año, salió su libro "La huella de la bota", en el que el autor "se sumerge en el oscuro mundo de la nueva ultraderecha racista y xenófoba española para desvelar qué se esconde detrás de sus acciones violentas, cómo se organizan y se financian y cuáles son sus vinculaciones con sus homólogos internacionales y los antiguos criminales de guerra nazis que todavía se esconden en nuestro país." Con este visado de presentación tan impresionante resulta complicado y quizás poco oportuno polemizar abiertamente.
Quizás lo razonable sería que la CGT le agradeciera públicamente sus revelaciones, pues por las mismas la organización a abierto los ojos, tiene claro que tiene un problema, y por lo tanto, tendrá que resolverlo apropiadamente. El que a la CGT se le cuelen fascistas es claramente un problema, importante sin duda, pero no el único. Quizás lo verdaderamente razonable o lo mínimamente ético hubiera sido que quien tiene tanta información privilegiada, antes de usarla impúdicamente para bien de su bolsillo y de su fama, la hubiera ofrecido en primer lugar a la propia organización para que tomara cartas en el asunto, según sus procedimientos y estatutos internos. Entonces sí tendría sentido un agradecimiento público, pues se habría antepuesto el interés antifascista (el suyo y el de la CGT) de eliminar y cortar toda posible cobertura sindical a esos grupos ultras. Pero no ha sido así. Lo que se ha antepuesto es el interés de poner en la diana pública a la CGT, señalándola como organización que tiene y que mantiene a grupos ultras, con la oscura esperanza de que esto la desacredite, de alguna u otra forma.
La cuestión es sencilla, aunque retorcida : por informar sobre los movimientos de ciertos fascistas se culpabiliza a una organización antifascista. Es aquí donde interviene el segundo poder del afamado escritor : tener una atalaya pública mediante la cual difundir ampliamente su propia tesis, hábilmente ornamentada con ’hechos’ (cartas sin firmas y documentos que quizás algún afiliado ’impaciente’ le ha hecho llegar, sesuda investigación que otros hicieron por él) y que rápidamente convierte en ’evidencias’ ("lo sabían hacen años") para insinuar que toda la CGT es cómplice por acción u omisión de sostener a indeseables nazis en sus filas. Internet hace el resto. Y en el camino la CGT aparece entre líneas como una caótica organización que o bien es tonta (se deja engañar fácilmente), bien está descontrolada (cada cual hace lo que quiere) o incluso, y lo peor, como una estructura permeable y, en última instancia, permisiva con las vanguardias ultrareaccionarias, nazis, xenófobas y racistas.
Lo que subyace en todo esto a mi entender son dos obsesiones : una patológica desconfianza de los informantes y del propio periodista en que CGT con sus propios medios internos sea capaz de resolver el problema (obviamente expulsando a quien hubiera que expulsar), y otra no menos patológica obsesión por dar publicidad gratuita a esos indeseables y a sus siglas.
Y, bueno, ya puestos habría una tercera ’evidencia’ : al afamado escritor la CGT le trae al pairo. Y quizás por esto, no sabe que la CGT es una Confederación de Sindicatos, por lo que cada Sindicato tiene una amplia autonomía de funcionamiento, siempre y cuando se respete el pacto confederal de principios y normas inscritos en sus acuerdos y en sus estatutos. Los tiempos de deliberación y decisión no son los de una ejecutiva que con manu militari (pues CGT es también antimilitarista) lo resuelve todo y, obviamente, no se corresponde con los ritmos mediáticos de cierto periodismo sensacionalista, amante de las denuncias fáciles que prometen mucho ruido de fondo.
Es cierto, hay que ser comprensivos y generosos con quienes tienen a bien informar de lo que sucede en este cruel mundo. Comprensión y generosidad de la que no hace gala nuestro periodista. Pero claro, él es simplemente un trabajador autónomo más (freelance lo llaman para prestigiarlo) que se ha hecho un hueco en el duro y competitivo mundo desregulado del periodismo y los medios de comunicación, sector en el que casi es un dogma no tener afiliación ninguna a ninguna organización (que no sea de periodistas claro). Así, falazmente, algunos creen que informan desde una objetividad inexistente, desde un púlpito en el que ciertos hechos, adecuadamente seleccionados, se mezclan con otros en el atanor alquímico de la imparcialidad, y se presentan vírgenes, como si de la prístina verdad se tratara.
Gracias, pues, insigne escritor, por revelarnos nuestra cruda verdad : contaminados estamos como el resto de la sociedad de elementos fascistas, autoritarios, machistas, racistas, xenófobos. Gracias por restregarnos a la cara que somos un reflejo más de la sociedad que queremos cambiar y transformar. Gracias por darnos publicidad gratuita, y no deseada. Y gracias, una vez más, por librar a tus lectores de informaciones secundarias que no vienen al caso : de nuestras ideas anticapitalistas y antiautoritarias, de nuestras propuestas contra la crisis, de nuestra lucha rebelde en los tajos y en los puestos de trabajo, de nuestra convocatoria de huelga general el 29 de septiembre.
Antonio Carretero, Rojo y Negro
El pasado -reciente- se hace presente : quien ya ha sido expulsado se dice que sigue ocupando el cargo. Así se vende más y mejor una información, según los cánones éticos de algún Baltasar Garzón del periodismo, llámese por ejemplo Joan Cantarero (ver http://www.interviu.es/reportajes/artic ... -en-la-cgt).
Es preferible -siempre, además de fácil- juzgar que ser juzgado. Y es aconsejable hacerlo -siempre, además de fácil- desde un doble estatus de poder, político y mediático : desde el ser un afamado antifascista des-velador de entuertos en la cloacas del neo-arcaico-nazismo y desde el tener una plataforma editorial donde colocar sus ¿investigaciones ? periodísticas.
Lo primero se supone que le da una credibilidad en ciertos sectores de la izquierda social. Cuestionarle en algo, por lo tanto, puede significar darte de bruces con sectores que creías propios, y quizás se tornen ajenos. Sinceramente espero que no, aunque asumo el riesgo.
A mediados de febrero de este año, salió su libro "La huella de la bota", en el que el autor "se sumerge en el oscuro mundo de la nueva ultraderecha racista y xenófoba española para desvelar qué se esconde detrás de sus acciones violentas, cómo se organizan y se financian y cuáles son sus vinculaciones con sus homólogos internacionales y los antiguos criminales de guerra nazis que todavía se esconden en nuestro país." Con este visado de presentación tan impresionante resulta complicado y quizás poco oportuno polemizar abiertamente.
Quizás lo razonable sería que la CGT le agradeciera públicamente sus revelaciones, pues por las mismas la organización a abierto los ojos, tiene claro que tiene un problema, y por lo tanto, tendrá que resolverlo apropiadamente. El que a la CGT se le cuelen fascistas es claramente un problema, importante sin duda, pero no el único. Quizás lo verdaderamente razonable o lo mínimamente ético hubiera sido que quien tiene tanta información privilegiada, antes de usarla impúdicamente para bien de su bolsillo y de su fama, la hubiera ofrecido en primer lugar a la propia organización para que tomara cartas en el asunto, según sus procedimientos y estatutos internos. Entonces sí tendría sentido un agradecimiento público, pues se habría antepuesto el interés antifascista (el suyo y el de la CGT) de eliminar y cortar toda posible cobertura sindical a esos grupos ultras. Pero no ha sido así. Lo que se ha antepuesto es el interés de poner en la diana pública a la CGT, señalándola como organización que tiene y que mantiene a grupos ultras, con la oscura esperanza de que esto la desacredite, de alguna u otra forma.
La cuestión es sencilla, aunque retorcida : por informar sobre los movimientos de ciertos fascistas se culpabiliza a una organización antifascista. Es aquí donde interviene el segundo poder del afamado escritor : tener una atalaya pública mediante la cual difundir ampliamente su propia tesis, hábilmente ornamentada con ’hechos’ (cartas sin firmas y documentos que quizás algún afiliado ’impaciente’ le ha hecho llegar, sesuda investigación que otros hicieron por él) y que rápidamente convierte en ’evidencias’ ("lo sabían hacen años") para insinuar que toda la CGT es cómplice por acción u omisión de sostener a indeseables nazis en sus filas. Internet hace el resto. Y en el camino la CGT aparece entre líneas como una caótica organización que o bien es tonta (se deja engañar fácilmente), bien está descontrolada (cada cual hace lo que quiere) o incluso, y lo peor, como una estructura permeable y, en última instancia, permisiva con las vanguardias ultrareaccionarias, nazis, xenófobas y racistas.
Lo que subyace en todo esto a mi entender son dos obsesiones : una patológica desconfianza de los informantes y del propio periodista en que CGT con sus propios medios internos sea capaz de resolver el problema (obviamente expulsando a quien hubiera que expulsar), y otra no menos patológica obsesión por dar publicidad gratuita a esos indeseables y a sus siglas.
Y, bueno, ya puestos habría una tercera ’evidencia’ : al afamado escritor la CGT le trae al pairo. Y quizás por esto, no sabe que la CGT es una Confederación de Sindicatos, por lo que cada Sindicato tiene una amplia autonomía de funcionamiento, siempre y cuando se respete el pacto confederal de principios y normas inscritos en sus acuerdos y en sus estatutos. Los tiempos de deliberación y decisión no son los de una ejecutiva que con manu militari (pues CGT es también antimilitarista) lo resuelve todo y, obviamente, no se corresponde con los ritmos mediáticos de cierto periodismo sensacionalista, amante de las denuncias fáciles que prometen mucho ruido de fondo.
Es cierto, hay que ser comprensivos y generosos con quienes tienen a bien informar de lo que sucede en este cruel mundo. Comprensión y generosidad de la que no hace gala nuestro periodista. Pero claro, él es simplemente un trabajador autónomo más (freelance lo llaman para prestigiarlo) que se ha hecho un hueco en el duro y competitivo mundo desregulado del periodismo y los medios de comunicación, sector en el que casi es un dogma no tener afiliación ninguna a ninguna organización (que no sea de periodistas claro). Así, falazmente, algunos creen que informan desde una objetividad inexistente, desde un púlpito en el que ciertos hechos, adecuadamente seleccionados, se mezclan con otros en el atanor alquímico de la imparcialidad, y se presentan vírgenes, como si de la prístina verdad se tratara.
Gracias, pues, insigne escritor, por revelarnos nuestra cruda verdad : contaminados estamos como el resto de la sociedad de elementos fascistas, autoritarios, machistas, racistas, xenófobos. Gracias por restregarnos a la cara que somos un reflejo más de la sociedad que queremos cambiar y transformar. Gracias por darnos publicidad gratuita, y no deseada. Y gracias, una vez más, por librar a tus lectores de informaciones secundarias que no vienen al caso : de nuestras ideas anticapitalistas y antiautoritarias, de nuestras propuestas contra la crisis, de nuestra lucha rebelde en los tajos y en los puestos de trabajo, de nuestra convocatoria de huelga general el 29 de septiembre.
Antonio Carretero, Rojo y Negro
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turiferario
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Re: Nazis en sindicatos
Comunicado de 2 militantes de CGT y de la Coordinadora Antifascista de Zaragoza, en la que se desmienten algunas de las cosas publicadas en el diario Público.
En el mes de marzo, un compañero de CGT Madrid, (administrador de la lista de correo de la coordinadora informática), detectó y denuncio la presencia de varios dirigentes del MSR (entre ellos Juan Antonio Aguilar), que tras ser expulsados del comite de empresa de CCOO en Tecnocom pasaron a CGT. El mismo día en que se denunció su presencia, fueron expulsados de la lista de correo a la que pertenecían como trabajadores del sector de informática. Ésta información llegó incluso a la Coordinadora Antifascista de Zaragoza a través de un afiliado de CGT Zaragoza, que también pertenece a la Antifa .
Una vez informado el sindicato de Banca de Madrid, al que pertenece esta sección, y verificada la denuncia se anunció la convocatoria de una asamblea (siguiendo los mecanismo de funcionamiento interno del sindicato) para expulsar a estas personas, las cuales una vez enteradas de dicha asamblea se dieron de baja antes de que se llegase a celebrar. De los 8 delegados que pasaron de CCOO a CGT, son expulsados los 4 que tenemos constancia que pertenecen al MSR. (por lo que es falso la notica de Público en la que se expecifica que CGT no hizo nada hasta el día de ayer)
El problema parece ir más allá,un periodista denuncia que en la seccion de Tecnocom de CGT pudiera algún afiliado o simpatizante del MSR, algo que CGT está intentando verificar y de lo que no tiene constancia, así mismo denuncia que dicha sección trabaja en conjunto con la gente expulsada en el comite de empresa, algo de lo que el Secretariado Permanente de CGT no tiene constancia. En el caso de que sean ciertas las acusaciones, se pondrán en marcha los mecanismos internos para expulsar del sindicato a todas aquellas personas que hayan hecho la vista gorda o hayan convivido con esta gente, incluido si es necesario, la expulsión de la Sección completa de Tecnocom.
El periodista en cuestión, nos ha hecho llegar la información de que, además, pudiera haber afiliados de base del MSR infiltrados en CGT en varias ciudades del Estado, sin que hasta el momento nos haya desvelado sus identidades y no podamos actuar en consecuencia.En estos momentos desde CGT hemos abierto una investigación a nivel estatal para intentar descubrir la posibilidad de que haya más inflitrados, a sabiendas de la dificultad de identificar a nazis que no sean conocidos.
Desde hace años, dirigentes de movimientos nazis se infiltran en sindicatos, partidos, asociaciones culturales, colectivos...Dentro del mundo sindical, teníamos constancia de la presencia de nazis, por ejemplo en Zaragoza, tanto en UGT como en CCOO. La razón de estos movimientos, no está muy clara, si es destrozar el colectivo desde dentro o simplemente espiar.
En nuestro caso, fuese la razón que fuese, lo que esta apunto de conseguir el MSR (cuando dicho periodista publique la noticia en Interviú y Diagonal) es su mayor triunfo hasta ahora. En un momento laboral y social como el actual, en el que CGT se está convirtiendo en un referente frente al sindicalismo aburguesado, una acusación pública de "convivencia" con los nazis va a hacer muchísimo daño. El único perjudicado va a ser CGT, mientras la gente del MSR se va a jactar de habernos destrozado y además se va a llevar una publicidad impensable para un grupúsculo como el que realmente es.
CGT está trabajando en todo el Estado español en los distintos movimientos Sociales y plataformas antifascistas, dando la cara junto a la gente de otros colectivos que luchan contra el mismo fin. La denuncia de convivencia de unos delegados de una sección, o de personas individuales de dicha sección, con delegados que no pertenecen a CGT, no debería empañar ni dañar el trabajo que la práctica totalidad de los militantes y afiliados de CGT llevamos a cabo contra el fascismo.
También somos conscientes del momento en que se va a publicar dicho artículo, a un mes de una Huelga General, y tras haber sido referente en la anterior, y a dos meses de unas elecciones sindicales, que tras publicarse la noticia por un grupo empresarial con relaciones con uno de los sindicatos burgueses, será el otro beneficiado de la noticia. No nos sorprende de donde vienen los ataques contra CGT, del periódico de Mediapro (simpatizante del PSOE) y de una revista en la que tiene participación el grupo Prysa, y el momento en que vienen, a 1 mes de una huelga general. Algo debemos estar haciendo bien cuando el gobierno se ve en la obligación de poner en marcha su maquinaria "sucia" contra nosotros.
Un saludo libertario:
Dos militantes de CGT pertenecientes a la Plataforma Antifascista de Zaragoza
En el mes de marzo, un compañero de CGT Madrid, (administrador de la lista de correo de la coordinadora informática), detectó y denuncio la presencia de varios dirigentes del MSR (entre ellos Juan Antonio Aguilar), que tras ser expulsados del comite de empresa de CCOO en Tecnocom pasaron a CGT. El mismo día en que se denunció su presencia, fueron expulsados de la lista de correo a la que pertenecían como trabajadores del sector de informática. Ésta información llegó incluso a la Coordinadora Antifascista de Zaragoza a través de un afiliado de CGT Zaragoza, que también pertenece a la Antifa .
Una vez informado el sindicato de Banca de Madrid, al que pertenece esta sección, y verificada la denuncia se anunció la convocatoria de una asamblea (siguiendo los mecanismo de funcionamiento interno del sindicato) para expulsar a estas personas, las cuales una vez enteradas de dicha asamblea se dieron de baja antes de que se llegase a celebrar. De los 8 delegados que pasaron de CCOO a CGT, son expulsados los 4 que tenemos constancia que pertenecen al MSR. (por lo que es falso la notica de Público en la que se expecifica que CGT no hizo nada hasta el día de ayer)
El problema parece ir más allá,un periodista denuncia que en la seccion de Tecnocom de CGT pudiera algún afiliado o simpatizante del MSR, algo que CGT está intentando verificar y de lo que no tiene constancia, así mismo denuncia que dicha sección trabaja en conjunto con la gente expulsada en el comite de empresa, algo de lo que el Secretariado Permanente de CGT no tiene constancia. En el caso de que sean ciertas las acusaciones, se pondrán en marcha los mecanismos internos para expulsar del sindicato a todas aquellas personas que hayan hecho la vista gorda o hayan convivido con esta gente, incluido si es necesario, la expulsión de la Sección completa de Tecnocom.
El periodista en cuestión, nos ha hecho llegar la información de que, además, pudiera haber afiliados de base del MSR infiltrados en CGT en varias ciudades del Estado, sin que hasta el momento nos haya desvelado sus identidades y no podamos actuar en consecuencia.En estos momentos desde CGT hemos abierto una investigación a nivel estatal para intentar descubrir la posibilidad de que haya más inflitrados, a sabiendas de la dificultad de identificar a nazis que no sean conocidos.
Desde hace años, dirigentes de movimientos nazis se infiltran en sindicatos, partidos, asociaciones culturales, colectivos...Dentro del mundo sindical, teníamos constancia de la presencia de nazis, por ejemplo en Zaragoza, tanto en UGT como en CCOO. La razón de estos movimientos, no está muy clara, si es destrozar el colectivo desde dentro o simplemente espiar.
En nuestro caso, fuese la razón que fuese, lo que esta apunto de conseguir el MSR (cuando dicho periodista publique la noticia en Interviú y Diagonal) es su mayor triunfo hasta ahora. En un momento laboral y social como el actual, en el que CGT se está convirtiendo en un referente frente al sindicalismo aburguesado, una acusación pública de "convivencia" con los nazis va a hacer muchísimo daño. El único perjudicado va a ser CGT, mientras la gente del MSR se va a jactar de habernos destrozado y además se va a llevar una publicidad impensable para un grupúsculo como el que realmente es.
CGT está trabajando en todo el Estado español en los distintos movimientos Sociales y plataformas antifascistas, dando la cara junto a la gente de otros colectivos que luchan contra el mismo fin. La denuncia de convivencia de unos delegados de una sección, o de personas individuales de dicha sección, con delegados que no pertenecen a CGT, no debería empañar ni dañar el trabajo que la práctica totalidad de los militantes y afiliados de CGT llevamos a cabo contra el fascismo.
También somos conscientes del momento en que se va a publicar dicho artículo, a un mes de una Huelga General, y tras haber sido referente en la anterior, y a dos meses de unas elecciones sindicales, que tras publicarse la noticia por un grupo empresarial con relaciones con uno de los sindicatos burgueses, será el otro beneficiado de la noticia. No nos sorprende de donde vienen los ataques contra CGT, del periódico de Mediapro (simpatizante del PSOE) y de una revista en la que tiene participación el grupo Prysa, y el momento en que vienen, a 1 mes de una huelga general. Algo debemos estar haciendo bien cuando el gobierno se ve en la obligación de poner en marcha su maquinaria "sucia" contra nosotros.
Un saludo libertario:
Dos militantes de CGT pertenecientes a la Plataforma Antifascista de Zaragoza
“Todo el problema con el mundo es que los tontos y los fanáticos siempre están tan seguros de sí mismos, y la gente inteligente tan llena de dudas.”
- Bertrand Russell (A Word a Day)
- Bertrand Russell (A Word a Day)
Re: Nazis en sindicatos
Vamos, que se meten en la CGT igual que podrían sembrar arroz en el desierto. Menudo momento para dejar de esnifar fungusol el mío!.Son patriotas que se podrían definir de izquierda nacional.
Que se afilian buscando abrir vías de influencia en los sindicatos de izquierdas que -en teoría- podrían ser receptivos a ideas sindicalistas revolucionarias con tinte patriota.
Salud.
-
Beatriz Antifa
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Re: Nazis en sindicatos
El señor Carretero escribe muy bien, y argumenta cada vez mejor. Pero quiero hacerme eco aquí, al igual que ha hecho Males con Carretero, de algo que me ha hecho llegar un afiliado ’impaciente’:
- todo este problema lleva coleando desde marzo, con varios cierres en falso y con la única obsesión en la CGT en que no transcediera y jamás yendo al fondo del asunto: el enorme problema que supone una sección sindical quemete a nazis a sabiendas de que lo son, que cuando se les detecta avalan su presencia y la línea ideológica del MSR, y que después de todo colabora activamente estos con neonazis en el Comité de Empresa, estén o no con carné de CGT. Esto tendría que haberse solucionado ya, por mucho de lo intrincado del organigrama de la CGT
- uno de los afiliados ’impacientes’ ha recibido distintas amenazas y por distintas vias (incluso en el ámbito laboral) de los neonazis que estaban en la sección sindical en Tecnocom, y eso Carretero lo sabe perfectamente, porque incluso ofreció el Rojo y Negro para hacerlo público. Que despiste más tonto no comentar nada de todo esto ¿no? ¿o que haya amenazados en este proceso no tiene ninguna importancia?
- no ha habido NINGUNA expulsión, repetimos, NINGUNA. En CGT para expulsar a alguien hay que convocar una asamblea, algo que en el sindicato de Banca de Madrid sucede con una periodicidad similar a la del Cometa Halley. Un sindicato "asambleario" como CGT Banca de Madrid que se niega a convocar una asamblea ante hechos tan graves demuestra que tiene un problema más grave que los propios nazis. Lógico, por tanto, que haya 'impacientes' que pongan en duda que CGT de Banaca, con sus propios 'medios internos', sea capaz de resolver el problema. A dia de hoy no lo ha hecho, y sin asambleas de por medio lo tiene difícil, si no es un sindicato 'ejecutivista'
- los neonazis se han ido por la via del impago de cuotas y por su propio pie, sin rechistar, cosa que no deja de sorprender. Peor lo más grave: colaborando de manera constante con la "CGT" de Tecnocom, que a dia de hoy todavía no ha escrito una línea sobre el confilcto, más allá de mandar emails insultantes y amenazando con "demandas" a afiliados 'impacientes'
- queremos agradecer a Carretero también el librar a sus lectores de informaciones secundarias que no vienen al caso: un sindicato asableario que no convoca asambleas, las amenazas, que CGT Tecnocom sigue colaborando con los nazis que se han ido, que no expulsados etc etc, porque así hemos podido entender mejor por qué un problema como el de Tecnocom se está dirimiendo en internet y no en una asamblea del sindicato, que es donde procede.
- todo este problema lleva coleando desde marzo, con varios cierres en falso y con la única obsesión en la CGT en que no transcediera y jamás yendo al fondo del asunto: el enorme problema que supone una sección sindical quemete a nazis a sabiendas de que lo son, que cuando se les detecta avalan su presencia y la línea ideológica del MSR, y que después de todo colabora activamente estos con neonazis en el Comité de Empresa, estén o no con carné de CGT. Esto tendría que haberse solucionado ya, por mucho de lo intrincado del organigrama de la CGT
- uno de los afiliados ’impacientes’ ha recibido distintas amenazas y por distintas vias (incluso en el ámbito laboral) de los neonazis que estaban en la sección sindical en Tecnocom, y eso Carretero lo sabe perfectamente, porque incluso ofreció el Rojo y Negro para hacerlo público. Que despiste más tonto no comentar nada de todo esto ¿no? ¿o que haya amenazados en este proceso no tiene ninguna importancia?
- no ha habido NINGUNA expulsión, repetimos, NINGUNA. En CGT para expulsar a alguien hay que convocar una asamblea, algo que en el sindicato de Banca de Madrid sucede con una periodicidad similar a la del Cometa Halley. Un sindicato "asambleario" como CGT Banca de Madrid que se niega a convocar una asamblea ante hechos tan graves demuestra que tiene un problema más grave que los propios nazis. Lógico, por tanto, que haya 'impacientes' que pongan en duda que CGT de Banaca, con sus propios 'medios internos', sea capaz de resolver el problema. A dia de hoy no lo ha hecho, y sin asambleas de por medio lo tiene difícil, si no es un sindicato 'ejecutivista'
- los neonazis se han ido por la via del impago de cuotas y por su propio pie, sin rechistar, cosa que no deja de sorprender. Peor lo más grave: colaborando de manera constante con la "CGT" de Tecnocom, que a dia de hoy todavía no ha escrito una línea sobre el confilcto, más allá de mandar emails insultantes y amenazando con "demandas" a afiliados 'impacientes'
- queremos agradecer a Carretero también el librar a sus lectores de informaciones secundarias que no vienen al caso: un sindicato asableario que no convoca asambleas, las amenazas, que CGT Tecnocom sigue colaborando con los nazis que se han ido, que no expulsados etc etc, porque así hemos podido entender mejor por qué un problema como el de Tecnocom se está dirimiendo en internet y no en una asamblea del sindicato, que es donde procede.
males escribió:El kulebrón neonazi (capítulo 2)… o el inocente es culpable
El pasado -reciente- se hace presente : quien ya ha sido expulsado se dice que sigue ocupando el cargo. Así se vende más y mejor una información, según los cánones éticos de algún Baltasar Garzón del periodismo, llámese por ejemplo Joan Cantarero (ver http://www.interviu.es/reportajes/artic ... -en-la-cgt).
Es preferible -siempre, además de fácil- juzgar que ser juzgado. Y es aconsejable hacerlo -siempre, además de fácil- desde un doble estatus de poder, político y mediático : desde el ser un afamado antifascista des-velador de entuertos en la cloacas del neo-arcaico-nazismo y desde el tener una plataforma editorial donde colocar sus ¿investigaciones ? periodísticas.
Lo primero se supone que le da una credibilidad en ciertos sectores de la izquierda social. Cuestionarle en algo, por lo tanto, puede significar darte de bruces con sectores que creías propios, y quizás se tornen ajenos. Sinceramente espero que no, aunque asumo el riesgo.
A mediados de febrero de este año, salió su libro "La huella de la bota", en el que el autor "se sumerge en el oscuro mundo de la nueva ultraderecha racista y xenófoba española para desvelar qué se esconde detrás de sus acciones violentas, cómo se organizan y se financian y cuáles son sus vinculaciones con sus homólogos internacionales y los antiguos criminales de guerra nazis que todavía se esconden en nuestro país." Con este visado de presentación tan impresionante resulta complicado y quizás poco oportuno polemizar abiertamente.
Quizás lo razonable sería que la CGT le agradeciera públicamente sus revelaciones, pues por las mismas la organización a abierto los ojos, tiene claro que tiene un problema, y por lo tanto, tendrá que resolverlo apropiadamente. El que a la CGT se le cuelen fascistas es claramente un problema, importante sin duda, pero no el único. Quizás lo verdaderamente razonable o lo mínimamente ético hubiera sido que quien tiene tanta información privilegiada, antes de usarla impúdicamente para bien de su bolsillo y de su fama, la hubiera ofrecido en primer lugar a la propia organización para que tomara cartas en el asunto, según sus procedimientos y estatutos internos. Entonces sí tendría sentido un agradecimiento público, pues se habría antepuesto el interés antifascista (el suyo y el de la CGT) de eliminar y cortar toda posible cobertura sindical a esos grupos ultras. Pero no ha sido así. Lo que se ha antepuesto es el interés de poner en la diana pública a la CGT, señalándola como organización que tiene y que mantiene a grupos ultras, con la oscura esperanza de que esto la desacredite, de alguna u otra forma.
La cuestión es sencilla, aunque retorcida : por informar sobre los movimientos de ciertos fascistas se culpabiliza a una organización antifascista. Es aquí donde interviene el segundo poder del afamado escritor : tener una atalaya pública mediante la cual difundir ampliamente su propia tesis, hábilmente ornamentada con ’hechos’ (cartas sin firmas y documentos que quizás algún afiliado ’impaciente’ le ha hecho llegar, sesuda investigación que otros hicieron por él) y que rápidamente convierte en ’evidencias’ ("lo sabían hacen años") para insinuar que toda la CGT es cómplice por acción u omisión de sostener a indeseables nazis en sus filas. Internet hace el resto. Y en el camino la CGT aparece entre líneas como una caótica organización que o bien es tonta (se deja engañar fácilmente), bien está descontrolada (cada cual hace lo que quiere) o incluso, y lo peor, como una estructura permeable y, en última instancia, permisiva con las vanguardias ultrareaccionarias, nazis, xenófobas y racistas.
Lo que subyace en todo esto a mi entender son dos obsesiones : una patológica desconfianza de los informantes y del propio periodista en que CGT con sus propios medios internos sea capaz de resolver el problema (obviamente expulsando a quien hubiera que expulsar), y otra no menos patológica obsesión por dar publicidad gratuita a esos indeseables y a sus siglas.
Y, bueno, ya puestos habría una tercera ’evidencia’ : al afamado escritor la CGT le trae al pairo. Y quizás por esto, no sabe que la CGT es una Confederación de Sindicatos, por lo que cada Sindicato tiene una amplia autonomía de funcionamiento, siempre y cuando se respete el pacto confederal de principios y normas inscritos en sus acuerdos y en sus estatutos. Los tiempos de deliberación y decisión no son los de una ejecutiva que con manu militari (pues CGT es también antimilitarista) lo resuelve todo y, obviamente, no se corresponde con los ritmos mediáticos de cierto periodismo sensacionalista, amante de las denuncias fáciles que prometen mucho ruido de fondo.
Es cierto, hay que ser comprensivos y generosos con quienes tienen a bien informar de lo que sucede en este cruel mundo. Comprensión y generosidad de la que no hace gala nuestro periodista. Pero claro, él es simplemente un trabajador autónomo más (freelance lo llaman para prestigiarlo) que se ha hecho un hueco en el duro y competitivo mundo desregulado del periodismo y los medios de comunicación, sector en el que casi es un dogma no tener afiliación ninguna a ninguna organización (que no sea de periodistas claro). Así, falazmente, algunos creen que informan desde una objetividad inexistente, desde un púlpito en el que ciertos hechos, adecuadamente seleccionados, se mezclan con otros en el atanor alquímico de la imparcialidad, y se presentan vírgenes, como si de la prístina verdad se tratara.
Gracias, pues, insigne escritor, por revelarnos nuestra cruda verdad : contaminados estamos como el resto de la sociedad de elementos fascistas, autoritarios, machistas, racistas, xenófobos. Gracias por restregarnos a la cara que somos un reflejo más de la sociedad que queremos cambiar y transformar. Gracias por darnos publicidad gratuita, y no deseada. Y gracias, una vez más, por librar a tus lectores de informaciones secundarias que no vienen al caso : de nuestras ideas anticapitalistas y antiautoritarias, de nuestras propuestas contra la crisis, de nuestra lucha rebelde en los tajos y en los puestos de trabajo, de nuestra convocatoria de huelga general el 29 de septiembre.
Antonio Carretero, Rojo y Negro
Re: Nazis en sindicatos
Hola Beatriz:
Desconozco los hechos hasta que ha aparecido publicado y CGT ha dado su versión de los hechos (de forma pública que no orgánica, pues no se han tratado en ninguna Plenaria). Lo que no me parece bien es que des tú versión de estos hechos de forma pública desde un anonimato en Internet sin que antes se traten de forma orgánica en la Confederación (creo que si eres militante eso no es de recibo)
Por lo demás sin poner en duda tu versión la publicada por los compañeros de “Dos militantes de CGT pertenecientes a la Plataforma Antifascista de Zaragoza” la contradice
Desconozco los hechos hasta que ha aparecido publicado y CGT ha dado su versión de los hechos (de forma pública que no orgánica, pues no se han tratado en ninguna Plenaria). Lo que no me parece bien es que des tú versión de estos hechos de forma pública desde un anonimato en Internet sin que antes se traten de forma orgánica en la Confederación (creo que si eres militante eso no es de recibo)
Por lo demás sin poner en duda tu versión la publicada por los compañeros de “Dos militantes de CGT pertenecientes a la Plataforma Antifascista de Zaragoza” la contradice
Bueno salud compañera y creo que tus argumentaciones las tienes que realizar en los organos internos de la organizaciónturiferario
Asunto: Re: Nazis en sindicatos Responder citando
Comunicado de 2 militantes de CGT y de la Coordinadora Antifascista de Zaragoza, en la que se desmienten algunas de las cosas publicadas en el diario Público.
En el mes de marzo, un compañero de CGT Madrid, (administrador de la lista de correo de la coordinadora informática), detectó y denuncio la presencia de varios dirigentes del MSR (entre ellos Juan Antonio Aguilar), que tras ser expulsados del comite de empresa de CCOO en Tecnocom pasaron a CGT. El mismo día en que se denunció su presencia, fueron expulsados de la lista de correo a la que pertenecían como trabajadores del sector de informática. Ésta información llegó incluso a la Coordinadora Antifascista de Zaragoza a través de un afiliado de CGT Zaragoza, que también pertenece a la Antifa .
Una vez informado el sindicato de Banca de Madrid, al que pertenece esta sección, y verificada la denuncia se anunció la convocatoria de una asamblea (siguiendo los mecanismo de funcionamiento interno del sindicato) para expulsar a estas personas, las cuales una vez enteradas de dicha asamblea se dieron de baja antes de que se llegase a celebrar. De los 8 delegados que pasaron de CCOO a CGT, son expulsados los 4 que tenemos constancia que pertenecen al MSR. (por lo que es falso la notica de Público en la que se expecifica que CGT no hizo nada hasta el día de ayer)
El problema parece ir más allá,un periodista denuncia que en la seccion de Tecnocom de CGT pudiera algún afiliado o simpatizante del MSR, algo que CGT está intentando verificar y de lo que no tiene constancia, así mismo denuncia que dicha sección trabaja en conjunto con la gente expulsada en el comite de empresa, algo de lo que el Secretariado Permanente de CGT no tiene constancia. En el caso de que sean ciertas las acusaciones, se pondrán en marcha los mecanismos internos para expulsar del sindicato a todas aquellas personas que hayan hecho la vista gorda o hayan convivido con esta gente, incluido si es necesario, la expulsión de la Sección completa de Tecnocom.
El periodista en cuestión, nos ha hecho llegar la información de que, además, pudiera haber afiliados de base del MSR infiltrados en CGT en varias ciudades del Estado, sin que hasta el momento nos haya desvelado sus identidades y no podamos actuar en consecuencia.En estos momentos desde CGT hemos abierto una investigación a nivel estatal para intentar descubrir la posibilidad de que haya más inflitrados, a sabiendas de la dificultad de identificar a nazis que no sean conocidos.
Desde hace años, dirigentes de movimientos nazis se infiltran en sindicatos, partidos, asociaciones culturales, colectivos...Dentro del mundo sindical, teníamos constancia de la presencia de nazis, por ejemplo en Zaragoza, tanto en UGT como en CCOO. La razón de estos movimientos, no está muy clara, si es destrozar el colectivo desde dentro o simplemente espiar.
En nuestro caso, fuese la razón que fuese, lo que esta apunto de conseguir el MSR (cuando dicho periodista publique la noticia en Interviú y Diagonal) es su mayor triunfo hasta ahora. En un momento laboral y social como el actual, en el que CGT se está convirtiendo en un referente frente al sindicalismo aburguesado, una acusación pública de "convivencia" con los nazis va a hacer muchísimo daño. El único perjudicado va a ser CGT, mientras la gente del MSR se va a jactar de habernos destrozado y además se va a llevar una publicidad impensable para un grupúsculo como el que realmente es.
CGT está trabajando en todo el Estado español en los distintos movimientos Sociales y plataformas antifascistas, dando la cara junto a la gente de otros colectivos que luchan contra el mismo fin. La denuncia de convivencia de unos delegados de una sección, o de personas individuales de dicha sección, con delegados que no pertenecen a CGT, no debería empañar ni dañar el trabajo que la práctica totalidad de los militantes y afiliados de CGT llevamos a cabo contra el fascismo.
También somos conscientes del momento en que se va a publicar dicho artículo, a un mes de una Huelga General, y tras haber sido referente en la anterior, y a dos meses de unas elecciones sindicales, que tras publicarse la noticia por un grupo empresarial con relaciones con uno de los sindicatos burgueses, será el otro beneficiado de la noticia. No nos sorprende de donde vienen los ataques contra CGT, del periódico de Mediapro (simpatizante del PSOE) y de una revista en la que tiene participación el grupo Prysa, y el momento en que vienen, a 1 mes de una huelga general. Algo debemos estar haciendo bien cuando el gobierno se ve en la obligación de poner en marcha su maquinaria "sucia" contra nosotros.
Un saludo libertario:
Dos militantes de CGT pertenecientes a la Plataforma Antifascista de Zaragoza
-
Beatriz Antifa
- Mensajes: 21
- Registrado: 09 Ago 2010, 11:30
Re: Nazis en sindicatos
Leído en Interviú:
http://www.interviu.es/reportajes/artic ... -en-la-cgt
#
PARA ÁCRATA 17/08/2010 13:56
Para el compañero ácrata. Inesacto es incorrecto. Lo correcto es "inexacto" con X, Por lo demás tus aseveraciones no responden a la verdad. El secretario general de CGT Madrid ha afirmado edsta mañana en una emisora de radio que los cuatro neonazis dejaron de pagar las cuotas. Primero lo hizo Aguilar, y en julio lo hicieron los otros tres. No fueron expulsados dejaron de pagar, pero en Tecnocom siguen trabajando conjuntamente con nuestro sindicato y de hecho Juan Antonio Aguilar, que además de neonazi racista y prologuista de obras dedicadas a la memoria y obra del falangista Ramiro Ledesma, es suboficial del glorioso Ejército español y da frecuentes charlas junto a militares del antiguo CESID, actual CNI. Limpiemos la casa que a estas alturas no vana venir los nazis a decirnos como se negocia un convenio. Anna CGT barcelona
http://www.interviu.es/reportajes/artic ... -en-la-cgt
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PARA ÁCRATA 17/08/2010 13:56
Para el compañero ácrata. Inesacto es incorrecto. Lo correcto es "inexacto" con X, Por lo demás tus aseveraciones no responden a la verdad. El secretario general de CGT Madrid ha afirmado edsta mañana en una emisora de radio que los cuatro neonazis dejaron de pagar las cuotas. Primero lo hizo Aguilar, y en julio lo hicieron los otros tres. No fueron expulsados dejaron de pagar, pero en Tecnocom siguen trabajando conjuntamente con nuestro sindicato y de hecho Juan Antonio Aguilar, que además de neonazi racista y prologuista de obras dedicadas a la memoria y obra del falangista Ramiro Ledesma, es suboficial del glorioso Ejército español y da frecuentes charlas junto a militares del antiguo CESID, actual CNI. Limpiemos la casa que a estas alturas no vana venir los nazis a decirnos como se negocia un convenio. Anna CGT barcelona
Re: Nazis en sindicatos
Como ya han dicho algunos compas por aqui, el treintismo y la FAI no eran infiltraciones. Ni buscaban deliberadamente buscar el poder, ni nada de eso. Eran corrientes que se hicieron fuerte cuando por medio de articulos y textos en los periodicos libertarios convencian por sus argumentos y luego, los militantes, convencidos tras estas lecturas, actuaban en consecuencia en sus sindicatos.
Y el debate de la FAI y del treintismo, a mi ver, mas que una lucha de anarquistas contra sindicalistas, que no lo era, ni de puristas contra reformistas, ni nada por el estilo, era en realidad dos diferentes maneras de llevar la estrategia revolucionaria. A mi entender los treintistas pedian mas tiempo para la preparacion y formacion del obrero revolucionario y de la sociedad en general, y la gente de la FAI lo que dijo es que no se puede pedir paciencia a trabajadores que ya tienen muchos problemas y que aspiran a la revolucion para ya, y que ya se apañaran en la formacion revolucionaria, se esta es necesaria. Lo que habia es que un sector pedia mas planificacion y el otro mas accion. Era una cuestion de estrategia, por lo que se explica que algunos como Peiro que eran de la FAI (y de los primeros miembros) tambien firmo el Manifiesto.
En cuanto a el asunto que hablamos, el de los nazis, tampoco hagamos un dramon. Por lo que veo ahora entiendo las contradicciones en el comunicado de CGT. Parece que la cosa es de hace tiempo y que estaban informados, y que no fue tan despiste. Con todo, creo que hay que distinguir entre la organizacion CGT con sus estatutos, que sin duda no es filo-fascista ni nada por el estilo, con los errores de algunos de sus miembros.
Para que no haya confusion lo mejor es que CGT haga un comunicado coherente sobre lo que ocurrio. En todo caso, y lo mas importante, han hecho un comunicado claramente contrario al fascismo y a la presencia de estos elementos indeseables. Eso esta claro. Ahora, acaso, es una cuestion interna de ellos depurar si hubo responsabilidades y como se puede mejorar. Sin duda fallos hubo, por lo que veo, pero ahi a insinuar que CGT va por estos lares... no se, ni la gente de CNT llegamos tan lejos cuando la criticamos.
Y el debate de la FAI y del treintismo, a mi ver, mas que una lucha de anarquistas contra sindicalistas, que no lo era, ni de puristas contra reformistas, ni nada por el estilo, era en realidad dos diferentes maneras de llevar la estrategia revolucionaria. A mi entender los treintistas pedian mas tiempo para la preparacion y formacion del obrero revolucionario y de la sociedad en general, y la gente de la FAI lo que dijo es que no se puede pedir paciencia a trabajadores que ya tienen muchos problemas y que aspiran a la revolucion para ya, y que ya se apañaran en la formacion revolucionaria, se esta es necesaria. Lo que habia es que un sector pedia mas planificacion y el otro mas accion. Era una cuestion de estrategia, por lo que se explica que algunos como Peiro que eran de la FAI (y de los primeros miembros) tambien firmo el Manifiesto.
En cuanto a el asunto que hablamos, el de los nazis, tampoco hagamos un dramon. Por lo que veo ahora entiendo las contradicciones en el comunicado de CGT. Parece que la cosa es de hace tiempo y que estaban informados, y que no fue tan despiste. Con todo, creo que hay que distinguir entre la organizacion CGT con sus estatutos, que sin duda no es filo-fascista ni nada por el estilo, con los errores de algunos de sus miembros.
Para que no haya confusion lo mejor es que CGT haga un comunicado coherente sobre lo que ocurrio. En todo caso, y lo mas importante, han hecho un comunicado claramente contrario al fascismo y a la presencia de estos elementos indeseables. Eso esta claro. Ahora, acaso, es una cuestion interna de ellos depurar si hubo responsabilidades y como se puede mejorar. Sin duda fallos hubo, por lo que veo, pero ahi a insinuar que CGT va por estos lares... no se, ni la gente de CNT llegamos tan lejos cuando la criticamos.
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Banderinegro
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Re: Nazis en sindicatos
Bueno, a ver, yo no creo, Alka, que aquí alguien esté intentando decir que la CGT sea una organización neonazi o de gustosa complicidad con el nazismo (eso lo veo más propio de les estalinistas que, paradójicamente, sí han pactado con el nazismo a lo largo de la historia). Lo que sí que veo es que desde CGT se está intentando hacer ver que el proceso ha sido completamente normal y, sin embargo, no paran de salir voces de dentro de la CGT que dicen que eso es falso. Esto me lleva a pensar, como ya se ha dicho, que el interés real de CGT (al menos de la sección sindical de Tecnocom) es mantener su presencia en la empresa, aún a costa de colaborar con los nazis estos.
"La Revolución debe ser, desde el primer momento, un acto de justicia hacia 'los explotados y los oprimidos', y no una promesa de realizarlo más adelante; de otro modo, está condenada a fracasar." Piotr Kropotkin
JJ.LL. de Madrid: http://juventudeslibertariasmadrid.wordpress.com/
FIJL: http://www.nodo50.org/juventudeslibertarias/
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Re: Nazis en sindicatos
La CGT está infiltradísima. Estos nazis "son lo de menos" comparado con todo lo que tienen, desde cúpulas enteras de partidos izquierdistas a firmantes de EREs (de esto se está hablando en otro hilo) que no verán , estoy seguro, un comunicado en su contra ni un expediente ni leches.
No hay que ser muy listos para saber porqué interesa esta historia a medios de difusión del calibre de Público o de Interviú. Y el tiempo que ha tardado la CGT en pedir que se vayan (que no expulsarles, como bien deja claro la compa Beatriz, dejaron de pagar sus cuotas y se fueron ELLOS tras unos cuantos meses donde la CGT les defendía) es cuanto menos sintomático, como lo del ERE o los ayatolás izquierdistas que tratan -y no es algo ultrasecreto- de utilizar al sindicato para sus intereses partidistas.
En el fondo de todo esto está el modelo organizativo, pero es un debate largo y viejo ya. De algo estoy seguro, y es de que en SO por ejemplo algo así no pasaría y, si pasase, no se tardarían meses en pedir la baja voluntaria ni mucho menos.
No hay que ser muy listos para saber porqué interesa esta historia a medios de difusión del calibre de Público o de Interviú. Y el tiempo que ha tardado la CGT en pedir que se vayan (que no expulsarles, como bien deja claro la compa Beatriz, dejaron de pagar sus cuotas y se fueron ELLOS tras unos cuantos meses donde la CGT les defendía) es cuanto menos sintomático, como lo del ERE o los ayatolás izquierdistas que tratan -y no es algo ultrasecreto- de utilizar al sindicato para sus intereses partidistas.
En el fondo de todo esto está el modelo organizativo, pero es un debate largo y viejo ya. De algo estoy seguro, y es de que en SO por ejemplo algo así no pasaría y, si pasase, no se tardarían meses en pedir la baja voluntaria ni mucho menos.
Re: Nazis en sindicatos
Te ha faltado decir lo de los carceleros.Besançon escribió:La CGT está infiltradísima. Estos nazis "son lo de menos" comparado con todo lo que tienen, desde cúpulas enteras de partidos izquierdistas a firmantes de EREs
Te recuerdo que las acusaciones hay que probarlas, y que eso de tener afiliada a gente de "cúpulas de partidos" o "cargos de responsabilidad" es contrario a los estatutos de los anarcosindicatos.
Así mismo, los estatutos de los anarcosindicatos dicen que se permite la afiliación de cualquier persona de clase obrera, sin importar la ideología política o religiosa. Otra cosa es que se cuele algún nazi, o algún votante del ppsoe, que todo podrá pasar. Mas sabiendo que no hay ningún tipo de control ideológico o político sobre los compañeros militantes, ni se hace ningún tipo de interrogatorio a los nuevos afiliados, ni tienen que pasar ningún examen de "anarquismo básico". A lo sumo se pide un número de dni, un domicilio, y se pregunta la empresa (pública o privada) a la que se pertenece. Si alguien miente por algún motivo tendencioso, tarde o temprano saldrá a relucir la verdad y se actuará en consecuencia.
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Beatriz Antifa
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Re: Nazis en sindicatos
"No hay que ser muy listos para saber porqué interesa esta historia a medios de difusión del calibre de Público o de Interviú"
Yo no soy muy lista, ¿nos lo aclaras al resto, por favor?
Yo no soy muy lista, ¿nos lo aclaras al resto, por favor?
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turiferario
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Re: Nazis en sindicatos
Sí, y también está llena de caníbales y pedófilos.Besançon escribió:La CGT está infiltradísima. Estos nazis "son lo de menos" comparado con todo lo que tienen, desde cúpulas enteras de partidos izquierdistas a firmantes de EREs (de esto se está hablando en otro hilo) que no verán , estoy seguro, un comunicado en su contra ni un expediente ni leches.
A ver, al hilo de lo que comenta Paria y, habida cuenta, de que para nada simpatizo con la línea sindical de CGT, las acusaciones hay que demostrarlas y un error cometido por un sindicato concreto de CGT no sirve de excusa para colgar el sanbenito a toda una organización.
Si se quiere hacer una crítica a CGT seguro que podemos encontrar muchos argumentos para hacerlo como organización, pero no extrapolar patrañas o sembrar confusión aprovechando una noticia encima difundida por medios de manipulación masiva.
Lo dicho, critico por muchas cosas a CGT, pero, mira por dónde, me fío más de los afiliados que conozco y con los que hablo, que de medios socialdemócratas con sus propios y oscuros intereses.
“Todo el problema con el mundo es que los tontos y los fanáticos siempre están tan seguros de sí mismos, y la gente inteligente tan llena de dudas.”
- Bertrand Russell (A Word a Day)
- Bertrand Russell (A Word a Day)