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El sentido de la vida

Publicado: 23 Nov 2010, 14:05
por JeRiMo
El sentido de la vida. (más notas) JeRiMo)

La vida es un pulso diario, el gran objetivo del mañana no justifica perder la oportunidad de los placeres del ahora. Pearl S. Buck describió de una forma sencilla un tipo de personalidades complejos y autosaboteadoras que se perdían vivir la vida dejándola pasar de largo mientras esperaban un parámetro para vivirla que jamás alcanzaban. Ese perfil sigue afectando a una linea de comportamiento dominante. La vida es aquello que pasa mientras te preguntas lo qué es.

La soledad filosófica no es una soledad materia, es una falta de concordancia. No hay día que pase sin contactos y sin compartir anhelos. El antídoto a la soledad social no es más que una técnica de organizar una agenda de relaciones. Se puede tener al otro con quien hablar, es algo mas difícil verse auxiliado por su comprensión.

• De las perspectivas de futuro, la de desaparecer es la más segura de todas. Dado que no puede ser de otro modo, al menos que quede una marca en la historia de nuestro paso por la existencia social tal como apuntara con humildad pero con rotundidad Simone Weil. Positivizar esa marca no depende tanto de tener un objetivo finalístico como detener criterios para enfrentar cada final que irrumpa sin que se haya alcanzado finalidad alguna.

Trasladar la percepción de los componentes contextuales o externos del percibiente- al sujeto humano que lo percibe y/o a todo sujeto sensitivo- tralada la percepción misma no solo a la autopercepcion sensorial sino también a como se percibe un concepto. Esto enreda todavia más el sentido de cada significado y de cada instancia en relación. Luego entonces si el percepto lo es de cada objeto tambien lo puede ser de una noción. La noción ,mas complejo de todas es la de Ser. ¿que significa Ser? ¿estar siendo? ¿qué es una realidad de sujeto? ¿lo que envuelve una escafandra epidérmica? El conmcepto de ser no queda circunscrito al de la dimensión corpórea de un humano aunque la generalizacion de seres vivos se haga por especies animales y por individuos contables que la contengan y la de seres humanos en concreto como la nomina de todos lo svivientes de la especie humana en el momento de su censo imaginario o de referirlos. No hay ni va a ver una definición unitaria para lo que significa Ser en toda su enteridad mucho menos cuando la Realidad, la única realidad, ya habia sido definida por Heráclito como la que está por llegar. Si el ser es aquello que está por ser, lo que esta siendo antes es otra cosa, un proyecto, una pista, un bucle de su supuesto devenir. Si la discusión siobre Percepción mantenida en una psocion academica ordenada y sin aceptar fisuras ya es complicada la discusión sobre lo que significa Ser lo es mucho mas, en especial cuando la anterior no está termina o tan resuelta como los alegatos de los derechos a la subjetividad pretenden zanjar. Hay quien pone la posibilidad de ser en la fusion del individuo en la sociedad como Feuerbach (calificado de estar a la izquierdad hegeliana) que sostuvo que el individuo no tiene en sí la esencia ni como moralista ni como pensante. Su ser se halla en la comunidad, en la unidad del hombre con el hombre, una unidad que se apoya en la realidad de la diferencia entre el yo y el tú. Ello supone la extinción ética en el individuo separado y su desvaloración, siendo retomado como importante en la interacción mundana y en el espacio comunitario. ¿pero si el individuo separado no puede ni pensar ni moralizar con códigos de lo que es o no correcto, no significa que su desarrollo a esas categorías pasan por la presencia mediadora, y por lo tanto, represiva, del colectivo humano? Hay una presunción solapada de que el individuo es el que es y llega a actuar en función del peso de sus factores externos. Una inferencia directa y mecánica haría pensar en el individuo absolutamente aislado como un degenerado no humano, incapaz de distinguir entre lo adecuado y lo incorrecto. Su criterio serviría en una primera lectura para apoyar la explicación de la estructura del individuo disuadido por la colectividad a la que pertenece, y a partir de aquí distorsionado como tal, pero por otra parte con el precio teórico de renunciar a la autonomía de él en sí mismo, abocada a una permanente conducta compartida con los demás. El modo de percibir lo que es el ser tendría categoría de objetividad si todos los seres percibiéramos al ser humano de la misma manera. En lugar de eso nunca han dejado de prevalecer nociones distintas, incluso contrarios, a pesar de unos derechos universales en su nombre que concretaron en su momento la expresión de una noción (que no dejo de ser vaga) de su significado mismo. Si bien esos derechos sentaron que el ser humano no podía ser un esclavo o un prisionero sometido a tortura (sigue habiendo esclavitud y tortura, Bush junior acaba de justificar en su libro auto/no-disculpativo/biográfico, el visto bueno de las que emplea/ra el ejercito de su país) su aproximación filosófica pasa más por la deconstrucción de lo que no debería ser ni hacer que por lo que realmente es. Otras bases de conocimiento lo abordan desde sus enfermedades (la medicina y la psicopatología), sus caos organizativos (la sociología), sus fracasos económicos (la economía)…que recapitulan sobre sus faltas (lo que no es, lo que no consigue ser, la realidad pendiente –la heraclitana- que aun no tiene) que no quedan compensadas por las vías de estudio que cantan sus éxitos (la literatura de las odiseas, la tecnología del progreso en las telecomunicaciones o el conocimiento de la physis: astronomía y física nuclear). El ser en tanto que no es una maquina físico-electrónica con un número determinado de componentes y solo esos y en esa cantidad sino que tiene factores de psicología y sentimentalidad no medibles y ni siquiera enumerables en su totalidad, lo instala en un registro que en unas virtudes lo instala por encima de las máquinas y en otras funciones lo deja muy atrás de ellas. Su encanto mayor es su sentimentalidad y esta por definición no es valorable como buena o como mala. El P16 de Catell ya trató de definir personalidades pero no de medir si un valor de sujeto depende de la misma intensidad sentimental con respecto a un mismo tema. Existe una sentimentalidad universalizada lo que no existe-ni puede existir- es un código universal de sentimientos de traducción unitaria. Por eso, la percepción de todos los actos de todas las conductas humanas puede ser tan injusta a la hora de valorarlos/as en tanto que vienen en formatos de infoproductos o artículos mediáticos, ya que de un lado hay condicionamientos ideológicos previos (todas las mentes están condicionadas) y de otro, de la mayoría de asuntos de los que se hablan no hay acceso directo con los protagonistas o se conocen en vivo y en directo sus escenarios.


La propiedad de plaza laboral (algo de lo que el sector del funcionariado tiene motivos para sentirse privilegiado en comparación al conjunto del mundo del trabajo con altos índices de precariedad) ha sido reivindicado -por un lado por lo que hace a asegurar una carrera profesional- y objetado, por otra ,por el aletargamiento al que ha dado lugar como fenómeno colateral. La aguda observación de Laurence J.Peter (conocida como Principio de Peter: “en una jerarquía todo empleado tiende a ascender hasta su nivel de incompetencia”)se comprueba tanto más cuanto más seguro es un puesto de empleo independientemente de la efectividad desempeñada por quien la ocupa. La desagradable experiencia de pasar por revaloraciones de la función (docente y cualquier otra)lo es por partida doble: por quien es sometido a revisión y por quien tiene que someterlo. A menudo son los colegas los que pagan con más dedicación y ahínco los déficits de otros que no se toman en serio su cometido. Distintas instituciones tienden a descargar el volumen de funcionariado y contratar el trabajo a empresas subsidiarias cuyos contratos son rescindidos en cuanto no cumplen –o esa es la idea- con su cometido. La gestión de calidad que se aplica a productos pensados para ser mercancías y a formas de producirlas en empresas que se precien también debería ser extendida como principio organizativo de empresa a toda clase de trabajos sin que la función pública sea una excepción. Eso revertiría positivamente a toda la sociedad aunque su articulación pase por la cita episódica con los reajustes de empleo. Entender eso significa cambiar el chip de la seguridad de un trabajo para toda la vida, se haga como se haga. La tesios de Max Weber, analista atento de la burocratización del mundo, acerca de que el hombre es un animal inserto en tramas de significación que él ha tejido y que la cultura es tal urdimbre, sigue vigente.La burocracia se ha confundido con el aparato de estado (cuyos límites, por cierto, se dan por supuestos sin definirlos con precisión) pero la conciencia burocrática alcanza todos los estamentos de la producción y todas las capas sociales. La presunción legal de la propiedad de un puesto (un rol, un oficio, una ubicación) se contradice con la validación de su función en las coordenadas ahí donde esté activo. La exclusión – si es justa- de sus puestos de quienes no los detentan con corrección en lugar de ser tomado como una catástrofe biográfica se puede mirar desde otra óptica: como un perfeccionamiento del rol y por de pronto una mejora de la calidad cambiando un inoperante por un profesional operativo. Cruel pero realista.


No solo los políticos copando una buena parte de los discursos públicos sino cualquiera que ocupe el rol de la prédica (Salvador Cardús con sus speechs sobre nacionalismo dice que va a predicar) , sea desde una posición conservadora o una innovacionista, sea desde las religiones clásicas y los vendedores de crecepelos a la nueva saga de profetas de la new age, tiende a exponer la realidad objetiva tal como la entiende subjetivamente, con más retórica que demostración y con más voluntarismo –y actos de fe- que garantías. Cualquiera de nosotros/as constituyéndose en comentarista, con intencionalidad analítica seria, aspira a extender lo que es su visión personal a la categoría de conocimiento irrefutable, elevándola a la cosmovisión aceptada por su época. Para comprobar si lo que un hablante en lo que hace al hablar es colocar opiniones o tesis probadas hay que examinar el grado de coherencia de lo que dice y su lugar en el entramado de referencias de las que parte o en las que se mueve.(la pauta universitaria o la falta de ella se demuestra precisamente en este punto: referir lo propio a lo precedente o además de proponer la más excelente de las ideas echar una ojeado al patio de letras y al de ciencias para compilar y estudiar las que ya hay al respecto de lo que se quiere trabajar). El recurso a multitud de autores que nos preceden así como a los datos históricos no remite a un prurito enciclopedista sino a una verdadera necesidad de valerse de aportaciones ajenas al conocimiento para avanzar con las propias. Además de las improntas impresionistas que permiten diferenciar entre charlatanes y proponentes de ideas útiles . El conocimiento (el conocimiento del árbol de la vida, en definitiva del sentido existencial) no es algo ni libresco ni memorístico, se hace inaprensible desde la superficialidad e inalcanzable desde la pasividad del no-esfuerzo). El secreto de la receta divulgativa de conocimientos con una pedagogía atractiva pide una combinación de carisma y simpatía, de facilitación de la comprensión sin renunciar a hablar de los conceptos por densos que sean. Redes dirigido y presentado por Eduard Punset es un espacio que bien puede ser tomado como una forma de extender el conocimiento acudiendo a sus fuentes e investigadores sin presentarlo sin ninguna dogmática. La recursividad intelectual acudiendo a distintas fuentes de enunciado (remotas y atemporales) no limitándolas a la vecindad o a la coyuntura mediática del momento proporciona una amplitud de miras a la vez que reclama una humildad en las opiniones propias para no caer en la falsa idea de creer que aquello que piensas tú por primera vez no ha sido nunca jamás pensando antes de tu genial observación. Reinterpretada la noción de conocimiento como un proceso de flujos o proceso de procesos en vez de un material compacto y definitivamente clasificado, resultada que sus tautologías ocupan la menor parte del volumen global de proposiciones en las que las tentativas aproximativas y las hipótesis sugerentes pero no conclusas nos mantienen en ascuas en muchos puntos. La gran diferencia dentro de los discursos público-mediáticos es que los más abundantes (los políticos y los comerciales, dos caras de la misma moneda farandulera) no son precisamente los más serios y útiles (los científicos y los artístico-creativos). Las deformaciones sistemáticas en unos y los intentos de rigor y autorrealización en otros están expuestos de manera desigual aunque todos pueden ser encontrados. Quien necesite una realidad a satisfacción de sus egos y sus miedos encontrará un discurso público que se la represente a la medida de sus necesidades, quien quiera ir más allá en el saber existencial y en las explicaciones de la vida acudirá a la filosofía y a la ciencia. Hay pues una posición de sujeto de partida que lo hace proclive a la mentira o a la verdad según sus propios trazos personales. Esa disposición incide profundamente en la percepción de todo (incluyendo dentro de este todo, todos los demás y todas las ideas).

La comprensión del sentido de la vida y el universo de significados (plurales y contradictorios) que nos viene dada al trasegar en ella, tratando de entenderla consiguiendo disfrutarla, pasa por infinidad de averiguaciones que no quedan en meras tentativas fraseológicas sino en un verdadero compromiso con el lenguaje, por tanto, con la significación misma. Cuantas más veces pueda liberarse el observador de sus “no sé” (como una de las expresiones más estandarizadas del desconocimiento y de la alienación con el conocer) mas posesionario será de la existencia que le toca, más lo comprenderá todo. Cuanto más preciso sea su vocabulario (el rigor en la formulación acercándose al terreno de la exactitud matemática) más firme habitará el mundo y sabrá moverse en sus laberintos y enredos. Cuanto más capacidad tenga para enunciar predicados seguros que le sirvan y sirvan de referencia más disfrutará de la comprensión intelectual de los hechos y mayor goce perceptivo alcanzará. Lo ideal sería poder alcanzar tal conocimiento de los fenómenos y capacidad evaluativa de los hechos como para posicionarse con predicados tautológicos ante ellos. Desafortunadamente no tenemos santos que todo l oven y todo lo saben ni vivimos en tiempos de arcángeles de anunciaturas cuyas afirmaciones puedan ser tomadas por inamovibles. Lo más con que nos vamos encontrando son enunciados que aspiran a contribuir a la inteligencia colectiva y por tanto a la conciencia holística. Se trata de un proceso fluido e interactivo en el que cada enunciado (desde la oración más simple) tanto si es acertado como si es erróneo tiene de positivo que excita la necesidad elaborativa (pensante) de los demás, para un caso corrigiéndolo y para otro caso complementándolo. En esa imbricación creciente de predicados, desde los más fáciles de entender y simples a los más complejos (que se arman con una combinación de unidades simples) lo que menos concurre y puede concurrir es la tautología. La posibilidad estadística de dar con tautólogos es escasa (tal vez hubo sabios, si los hay deben haber dimitido o los han dimitido de los puestos públicos) y el mismo acto tautológico no forma parte del deseo creativo sino que es una consecuencia, mas a bien a largo plazo, del mismo, o bien una referencia necesaria de una verdad implacable y reconocida. (en otra acepción menos conocida el tautólogos es quien repite innecesariamente un concepto ya expresado, en ese sentido en todo debate, oral-directo o diferido e indirecto, en el que las partes recién llegadas o no, no se conectan al todo incurren en repeticionismos de conceptos u opiniones antedichos, con lo cual los tautólogos son mayoría en el planeta de los hablantes). La dinámica elaborativa acude a tautologías heredadas recicladas como premisas para sustentar el propio discurso. De hecho no habría forma de hablar y de entenderse mínimamente sin partir de un background común tomado implícitamente por consenso. Esas premisas combinadas permiten generar nuevas hipótesis con carácter más o menos de tesis firme sin pretender que sea una nueva tautología para la colección. Ya me gustaría sacar un dios omnipotente de mi cajón de sastre y pedirle que me soplara las tautologías a escribir para mi propio orgullo y para deslumbramientos ajenos, pero la cosa no va así, lo más que puedo hacer es discursear, repasar otros enunciados, corregir los propis, aportar una micra más de conocimiento en la medida de lo posible, convertir cada fragmento de texto en un chute para tratar de entenderme en mis vicisitudes como pensante y como ente sentimental-sensorial y las de los demás metidos en las bañeras sociales en las que coincidimos. El no compromiso con la palabra en el sentido de afirmaciones y negaciones lo menos relativistas posible y lo más inequívocas cuadra dentro de la ponderación pero también en un marco de reconciliación general en el que cabe todo, cada cosa y su opuesto, cada amigo y su enemigo. Fernando Arrabal dijo que La ponderación es el ídolo de cretinos y mezquinos Tal vez cargo las tintas pero vale reflexionar sobre su apreciación. En esta existencia compleja si queremos saber algo tienes que levantarle la sábana a cada fantasma, tienes que meter la lupa en cada huella, el microscopio en cada gota de bichitos, estudiándolo todo atentamente y comprometiendo con un juicio, es decir con un anunciado en firme. Cuantas más hipótesis rodeen tu discurso (con continuos “tal vez, quizás, puede ser,..”.menos dominio tienes de ti, de lo que eres, de lo que conoces, de lo que te falta por conocer y menos contribuyes a maximizar el saber.

Re: El sentido de la vida

Publicado: 19 Dic 2010, 21:14
por Robespierre
Quien no se apoya, de entrada, en su ignorancia? Creo que todos partimos desde este punto, del desconocimiento y de la endeble conjetura, y en efecto, sucede a veces, inmersos en la total ignorancia, atascarse de pleno y percibir cierto placer vacuo a fin de eludir algun compromiso, sea cual sea, y por el contrario, en algunos casos, nos proporciona un trampolin hacia la busqueda del sentido de la vida, el entramado proceso dialectico.


El sentido de la vida, en mi opinion, supone, sin lugar a duda, mas que el proceso dialectico del “ estado de conciencia” que una persona adopte, es decir, cada individuo sigue un proceso contraponiendo ideas y nociones, debatiendo entre pensamientos opuestos y contradictorios, con el objeto de establecer el proceso dialectico con el cual a traves, por medio de constantes confrontaciones de ideas, se alcanzara unos conceptos que rejiran su actuacion en el mundo.


La comprension de la vida no solo debe reducirse a una mera ereccion intelectual, sino tambien abarcar todos los por ques de la vida desde muchas perspectivas, eso si claro, uno tiene la obligacion de adquirir el sentido propio y unico de su vida, pero, sin desdeñar las demas perspectivas.

Re: El sentido de la vida

Publicado: 19 Dic 2010, 22:05
por Rumbero
JeRiMo escribió:De las perspectivas de futuro, la de desaparecer es la más segura de todas.
Eso seguro. Si dejas pasar tiempo, te mueres. Y más tarde se borra tu recuerdo. Y por último desaparece el planeta y el universo.

La vida carece de sentido hombre. Es un mero accidente.

Re: El sentido de la vida

Publicado: 29 Ene 2011, 20:46
por arkady
"Buddha dijo que no hay significado para la vida. El significado está en las frases, en los símbolos que simbolizan la vida. La vida en sí misma no tiene sentido porque es a eso a lo que se refiere el sentido. El sentido se refiere a la vida."

(Robert Anton Wilson, el señor de mi firma)