[Se creen invencibles...]
Publicado: 09 Jul 2006, 17:38
Se creen invencibles...
Los más duros
Miradas de prepotencia... ¿Nunca os habéis fijado en ellas? Gestos y expresiones que rebosan autoridad por todos lados... ¿lo notáis? Invencibles son algunos... o eso creen.
En todos los ambientes y lugares, podemos encontrar Invencibles, patéticos seres que miran a quienes están a su alrededor por encima del hombro, con una sonrisa cínica, y un humor que basa su alegría en ridiculizar a otras personas. Generalmente buscan blancos que consideren fáciles, tantean a quienes están cerca, buscando no pinchar a nadie que se les escape de sus posibilidades. Su invulnerabilidad se basa en la aparente debilidad de sus contricantes.
Les encanta abusar del resto, especialmente de los más, aparentemente, débiles. Les ven inofensivos y se divierten intentando aprovecharse de ellos, acosándolos, agobiándolos... En fin, tienen como afición dominar, asustar, ridiculizar.
A veces se trata de gente que le gusta dominar sexualmente; tocar a otras personas sin su permiso, acosarlas verbal o físicamente, es algo que les encanta, les hace sentirse poderosos. Otras veces disfrutan tratando de hundir a individuos delante de su grupo de amigos o, también, de desconocidos. Disfrutan manipulando o despreciando, en ambos casos. Hay otro tipo de individuos más cobardes, que se excitan pensando que hacen todo esto, pero por alguna razón no se sienten poderosos, sino profundamente acomplejados. Estos cobardes hablan a las espaldas, manipulan o mienten descaradamente. Inventan historias y procuran poner palabras en bocas ajenas. Pero no hablamos ahora de ellos...
En ambientes supuestamente alternativos y/o anti-autoritarios, fácilmente y a pesar de que supuestamente no debería ser así, encontramos montones de estos personajes. Contentos y cómodos en su posición, aún a sabiendas de lo odiados que muchas veces son.
Se les bronquea a veces, por parte de compañeros suyos, se les llama al decoro. Pero, pocas veces se hace lo único que debería hacerse con ellos: dejar de considerarles compañeros, y actuar como se haría con cualquier otro autoritario.
¿Cuál es la propuesta?
La creación de un núcleo de base para evitar las agresiones y abusos de estos individuos. Quienes forman tal núcleo deben conocerse y respetarse, y tener un mínimo de afinidad, para que las decisiones puedan tomarse por consenso y sin recurrir a mayorías ni minorías.
Han de tener un objetivo común: la intolerancia con cualquier tipo de acoso o abuso.
Han de observar y vigilar al Agresor (que por primera vez será víctima), compartir la información y analizarla para dar con las posibles debilidades de éste.
Actuar en consecuencia.
Análisis general de un perfil común
Estos individuos actúan como actúan por razones que, para nuestro cometido, no vienen al caso. Pues no somos ninguna organización humanista o caritativa, y nuestra comprensión se limita a las víctimas pues no somos de ese tipo de gente que va poniendo la otra mejilla.
Cada individuo tiene un espacio vital, tanto físico como psicológico, y eso es algo que no pasa desapercibido para nadie. La cuestión es que otros individuos, constantemente, se dedican a invadir el espacio vital de los demás, es decir, violar su intimidad. Para saber si a alguien le gusta algo o no, hay que preguntarle e interesarse, no pasar a la acción directamente, ya que ello, evidentemente, es autoritario, pues interfiere en la autonomía e intimidad de las personas.
Esto suelen pasarlo por alto ciertos obsesos de la dominación, que disfrutan ejerciendo su autoridad de las maneras más diversas.
Métodos de actuación recomendables
Sería interesante comentar qué formas de actuar pueden resultar más útiles, ya sea para realizarlas como, únicamente, para comprenderlas.
Debería recurrirse, según mi punto de vista, al miedo. Este tipo de gente suele creer que nada puede asustarlos, se creen invencibles, invulnerables. Piensan que pueden hacer lo que les de la gana, sin tener en cuenta los sentimientos y motivos de los demás. ¿Qué podemos hacer? Asustarles.
De forma psicológica: que personas conocidas y consideradas inofensivas por el Agresor le hagan saber lo que piensan, y le demuestren el asco que les da todo esto.
Otras personas desconocidas habrían de hacer lo mismo, mostrando así una realidad que este Agresor creía oculta. Sacándola a la luz y despreciándola en su cara.
Unas cuantas personas, de identidad oculta o no, deberían amenazar y advertir. Y, finalmente, si se cree conveniente, un grupo de anónimos debería agredir al sujeto.
Apuntes finales
Las personas tenemos una determinada autoestima, y una seguridad en nosotras mismas. Esta, mayor o menor, se sostiene gracias a barreras y sistemas de defensa, que nos protegen de comentarios, insultos, agresiones, en el terreno psicológico. Es decir, están ahí para que exista el mínimo sufrimiento psicológico posible, y poder reducir los daños a lo puramente físico. Los individuos de quienes hemos estado hablando se dedican a patear estas barreras de las personas, por pura diversión, a denigrarlas y a maltratarlas de diferentes maneras. La venganza puede no ser una solución, pero es sin duda deseable para cualquier persona que rechace la autoridad, puesto que la autodefensa es el único medio de conseguir el respeto ante agresiones.
Las personas que sufren acoso (escolar, sexual, ...) suelen pensar que están solas, y por ello no actúan. Ni siquiera se lo plantean. Uno de los objetivos de este núcleo de base sería mostrar la fuerza de la unión contra la autoridad y la dominación. Juntas podemos.
Otro objetivo, probablemente el principal, es destruir las barreras psicológicas de los agresores para hundirles y, de este modo, evitar que puedan volver a ejercer el abuso.
No se está hablando de una eliminación física (que quizá en algún momento alguien pueda plantearse), sino más bien de una anulación psicológica y una destrucción de la capacidad de dominar.
*Puede leerse en http://www.tiemblaelsuelo.blogspot.com
EDIT: Corregidas algunas faltas de ortografía y de expresión.
Los más duros
Miradas de prepotencia... ¿Nunca os habéis fijado en ellas? Gestos y expresiones que rebosan autoridad por todos lados... ¿lo notáis? Invencibles son algunos... o eso creen.
En todos los ambientes y lugares, podemos encontrar Invencibles, patéticos seres que miran a quienes están a su alrededor por encima del hombro, con una sonrisa cínica, y un humor que basa su alegría en ridiculizar a otras personas. Generalmente buscan blancos que consideren fáciles, tantean a quienes están cerca, buscando no pinchar a nadie que se les escape de sus posibilidades. Su invulnerabilidad se basa en la aparente debilidad de sus contricantes.
Les encanta abusar del resto, especialmente de los más, aparentemente, débiles. Les ven inofensivos y se divierten intentando aprovecharse de ellos, acosándolos, agobiándolos... En fin, tienen como afición dominar, asustar, ridiculizar.
A veces se trata de gente que le gusta dominar sexualmente; tocar a otras personas sin su permiso, acosarlas verbal o físicamente, es algo que les encanta, les hace sentirse poderosos. Otras veces disfrutan tratando de hundir a individuos delante de su grupo de amigos o, también, de desconocidos. Disfrutan manipulando o despreciando, en ambos casos. Hay otro tipo de individuos más cobardes, que se excitan pensando que hacen todo esto, pero por alguna razón no se sienten poderosos, sino profundamente acomplejados. Estos cobardes hablan a las espaldas, manipulan o mienten descaradamente. Inventan historias y procuran poner palabras en bocas ajenas. Pero no hablamos ahora de ellos...
En ambientes supuestamente alternativos y/o anti-autoritarios, fácilmente y a pesar de que supuestamente no debería ser así, encontramos montones de estos personajes. Contentos y cómodos en su posición, aún a sabiendas de lo odiados que muchas veces son.
Se les bronquea a veces, por parte de compañeros suyos, se les llama al decoro. Pero, pocas veces se hace lo único que debería hacerse con ellos: dejar de considerarles compañeros, y actuar como se haría con cualquier otro autoritario.
¿Cuál es la propuesta?
La creación de un núcleo de base para evitar las agresiones y abusos de estos individuos. Quienes forman tal núcleo deben conocerse y respetarse, y tener un mínimo de afinidad, para que las decisiones puedan tomarse por consenso y sin recurrir a mayorías ni minorías.
Han de tener un objetivo común: la intolerancia con cualquier tipo de acoso o abuso.
Han de observar y vigilar al Agresor (que por primera vez será víctima), compartir la información y analizarla para dar con las posibles debilidades de éste.
Actuar en consecuencia.
Análisis general de un perfil común
Estos individuos actúan como actúan por razones que, para nuestro cometido, no vienen al caso. Pues no somos ninguna organización humanista o caritativa, y nuestra comprensión se limita a las víctimas pues no somos de ese tipo de gente que va poniendo la otra mejilla.
Cada individuo tiene un espacio vital, tanto físico como psicológico, y eso es algo que no pasa desapercibido para nadie. La cuestión es que otros individuos, constantemente, se dedican a invadir el espacio vital de los demás, es decir, violar su intimidad. Para saber si a alguien le gusta algo o no, hay que preguntarle e interesarse, no pasar a la acción directamente, ya que ello, evidentemente, es autoritario, pues interfiere en la autonomía e intimidad de las personas.
Esto suelen pasarlo por alto ciertos obsesos de la dominación, que disfrutan ejerciendo su autoridad de las maneras más diversas.
Métodos de actuación recomendables
Sería interesante comentar qué formas de actuar pueden resultar más útiles, ya sea para realizarlas como, únicamente, para comprenderlas.
Debería recurrirse, según mi punto de vista, al miedo. Este tipo de gente suele creer que nada puede asustarlos, se creen invencibles, invulnerables. Piensan que pueden hacer lo que les de la gana, sin tener en cuenta los sentimientos y motivos de los demás. ¿Qué podemos hacer? Asustarles.
De forma psicológica: que personas conocidas y consideradas inofensivas por el Agresor le hagan saber lo que piensan, y le demuestren el asco que les da todo esto.
Otras personas desconocidas habrían de hacer lo mismo, mostrando así una realidad que este Agresor creía oculta. Sacándola a la luz y despreciándola en su cara.
Unas cuantas personas, de identidad oculta o no, deberían amenazar y advertir. Y, finalmente, si se cree conveniente, un grupo de anónimos debería agredir al sujeto.
Apuntes finales
Las personas tenemos una determinada autoestima, y una seguridad en nosotras mismas. Esta, mayor o menor, se sostiene gracias a barreras y sistemas de defensa, que nos protegen de comentarios, insultos, agresiones, en el terreno psicológico. Es decir, están ahí para que exista el mínimo sufrimiento psicológico posible, y poder reducir los daños a lo puramente físico. Los individuos de quienes hemos estado hablando se dedican a patear estas barreras de las personas, por pura diversión, a denigrarlas y a maltratarlas de diferentes maneras. La venganza puede no ser una solución, pero es sin duda deseable para cualquier persona que rechace la autoridad, puesto que la autodefensa es el único medio de conseguir el respeto ante agresiones.
Las personas que sufren acoso (escolar, sexual, ...) suelen pensar que están solas, y por ello no actúan. Ni siquiera se lo plantean. Uno de los objetivos de este núcleo de base sería mostrar la fuerza de la unión contra la autoridad y la dominación. Juntas podemos.
Otro objetivo, probablemente el principal, es destruir las barreras psicológicas de los agresores para hundirles y, de este modo, evitar que puedan volver a ejercer el abuso.
No se está hablando de una eliminación física (que quizá en algún momento alguien pueda plantearse), sino más bien de una anulación psicológica y una destrucción de la capacidad de dominar.
*Puede leerse en http://www.tiemblaelsuelo.blogspot.com
EDIT: Corregidas algunas faltas de ortografía y de expresión.