Nuevo ataque a la CGT, desde dentro
Publicado: 24 Oct 2004, 22:56
La página web de la CGT recoge la siguiente noticia: En la Comunidad
valenciana se ha constituido una “Comissió 9 d’Octubre”, de la que forma
parte la CGT del País valenciano, junto con diversas organizaciones
políticas nacionalistas de su ámbito y otros colectivos locales
reivindicativos. Dicha Plataforma convocó para ese mismo día una
manifestación bajo el lema “Pels drets nacionals i socials, per la
defensa del territori” (Por los derechos nacionales y sociales, por la defensa del territorio), que llegó a reunir 15.000 personas según los organizadores. Aunque no se explicitan los derechos “nacionales” que reclama la CGT-PV, al alimón con el nacionalismo político local,
podemos aceptar como síntesis las palabras de Enric Morera (uno de los organizadores del acto y secretario general del BLOC):
“los valencianos tenemos que unirnos en un objetivo de
construcción nacional”, para la que la manifestación del 9 de octubre es un acto importante.
Tanto el Secretario General de la CGT, como el SP, no se han dado por
aludidos con esta actuación de la CGT-PV, como tampoco lo hicieron en el
caso de la participación de CGT en el referéndum recusatorio del
presidente de Venezuela, Chaves (comentado en La Campana, nº 3 - III
Época, del 4.10.2004). Semejante silencio ante tal vulneración de la
filosofía anarcosindicalista constituyente de la CGT, puede calificarse
de muchos modos: negligente, cómplice, fruto de la incompetencia ...,
pero lo que no cabe decir es que sea inocente o vaya a dejar de tener
consecuencias.
Más aún, para aclarar su posición en estos asuntos, el militante sincero
de la CGT no tiene más que aludir a los estatutos de su propia
organización, cuyo artículo primero, dice: “La Confederación General del
Trabajo (CGT) es una asociación de trabajadores y trabajadoras que se
define anarcosindicalista, y por tanto: de clase (y no interclasista,
como lo es por definición toda formación nacionalista), autónoma,
autogestionaria, federalista (no centralista, como lo es toda formación
política nacionalista que aspira a materializar la “soberanía popular” en
un estado “propio”), internacionalista (es decir, entre otras cosas, no
nacionalista) y libertaria” (afirmación antijerárquica, absolutamente
incompatible con cualquier fórmula de nacionalismo político).
No menos contundente es el artículo 2 de los estatutos, que definen los
fines y objetivos de la CGT, así: “La CGT se propone: a) Desarrollar la
voluntad de asociación de los trabajadores, independientemente de su
sexo, raza, nacionalidad, lengua, ideas políticas o religiosas; b) La
emancipación de los trabajadores y trabajadoras, mediante la conquista,
por ellos mismos, de los medios de producción, distribución y consumo, y
la consecución de una sociedad libertaria ... Baste con estas dos
citas estatutarias para caer en la cuenta de la gravedad de
las conductas asumidas por CGT-PV y por el Secretario general y
SP de la CGT que, incumpliendo con su obligación y tarea
encomendada, se lo consienten y nada les reprochan.
Sólo añadir en este breve artículo un apunte final:
La CGT es una Confederación de sindicatos (locales y de rama)
y no una Confederación nacional de sindicatos y tampoco una Confederación de territorios o cualquier otra cosa.
Colectivo Justo Fierro.
Artículo publicado en La Campana nº 4 del 18.10.04
valenciana se ha constituido una “Comissió 9 d’Octubre”, de la que forma
parte la CGT del País valenciano, junto con diversas organizaciones
políticas nacionalistas de su ámbito y otros colectivos locales
reivindicativos. Dicha Plataforma convocó para ese mismo día una
manifestación bajo el lema “Pels drets nacionals i socials, per la
defensa del territori” (Por los derechos nacionales y sociales, por la defensa del territorio), que llegó a reunir 15.000 personas según los organizadores. Aunque no se explicitan los derechos “nacionales” que reclama la CGT-PV, al alimón con el nacionalismo político local,
podemos aceptar como síntesis las palabras de Enric Morera (uno de los organizadores del acto y secretario general del BLOC):
“los valencianos tenemos que unirnos en un objetivo de
construcción nacional”, para la que la manifestación del 9 de octubre es un acto importante.
Tanto el Secretario General de la CGT, como el SP, no se han dado por
aludidos con esta actuación de la CGT-PV, como tampoco lo hicieron en el
caso de la participación de CGT en el referéndum recusatorio del
presidente de Venezuela, Chaves (comentado en La Campana, nº 3 - III
Época, del 4.10.2004). Semejante silencio ante tal vulneración de la
filosofía anarcosindicalista constituyente de la CGT, puede calificarse
de muchos modos: negligente, cómplice, fruto de la incompetencia ...,
pero lo que no cabe decir es que sea inocente o vaya a dejar de tener
consecuencias.
Más aún, para aclarar su posición en estos asuntos, el militante sincero
de la CGT no tiene más que aludir a los estatutos de su propia
organización, cuyo artículo primero, dice: “La Confederación General del
Trabajo (CGT) es una asociación de trabajadores y trabajadoras que se
define anarcosindicalista, y por tanto: de clase (y no interclasista,
como lo es por definición toda formación nacionalista), autónoma,
autogestionaria, federalista (no centralista, como lo es toda formación
política nacionalista que aspira a materializar la “soberanía popular” en
un estado “propio”), internacionalista (es decir, entre otras cosas, no
nacionalista) y libertaria” (afirmación antijerárquica, absolutamente
incompatible con cualquier fórmula de nacionalismo político).
No menos contundente es el artículo 2 de los estatutos, que definen los
fines y objetivos de la CGT, así: “La CGT se propone: a) Desarrollar la
voluntad de asociación de los trabajadores, independientemente de su
sexo, raza, nacionalidad, lengua, ideas políticas o religiosas; b) La
emancipación de los trabajadores y trabajadoras, mediante la conquista,
por ellos mismos, de los medios de producción, distribución y consumo, y
la consecución de una sociedad libertaria ... Baste con estas dos
citas estatutarias para caer en la cuenta de la gravedad de
las conductas asumidas por CGT-PV y por el Secretario general y
SP de la CGT que, incumpliendo con su obligación y tarea
encomendada, se lo consienten y nada les reprochan.
Sólo añadir en este breve artículo un apunte final:
La CGT es una Confederación de sindicatos (locales y de rama)
y no una Confederación nacional de sindicatos y tampoco una Confederación de territorios o cualquier otra cosa.
Colectivo Justo Fierro.
Artículo publicado en La Campana nº 4 del 18.10.04