El trabajo es un castigo
Publicado: 02 Abr 2012, 09:32
No nos engañemos, no hay orgullo obrero,
tan solo miseria. Hoy más que nunca,
es en campos y fábricas donde se labran
y forjan nuestras cadenas.
El trabajo es un castigo.
Es más, Nadie debería trabajar.
¿No deseas más tiempo libre para leer, dormir, tener sexo o simplemente mirar al cielo en una tarde cualquiera?
¿No deseas salir de la fábrica, empresa, microempresa, tienda, lugar de trabajo al fin y al cabo; cuando ya estás cansado y no cuando el maldito reloj indique la hora de descanso?
¿No deseas charlar más en medio de tus labores?
¿No te gustaría elaborar tus horarios dependiendo del tiempo que consideras debes utilizar para ello?
¿No te gustaría darle un puño en la cara a tu patrón o patrona?
¿No te gustaría destruir el lugar donde trabajas?
¿No te gustaría no tener que perder tiempo trasladándote de tu casa hasta el trabajo todos los días?
¿No te gustaría no tener patrón?
¿No te gustaría dejar de trabajar?
Nosotrxs te lo proponemos. Deja de trabajar. Siéntete feliz de ser un ex-trabajador. Tal vez no haya sido por tu propio gusto. Tal vez hoy estés lleno de angustia porque estás sin trabajo, o porque puedes cualquier día quedar sin cadenas. Te tenemos que comentar un secreto: es el sistema el que te hace sentir angustiado. Tienes todo el tiempo libre que desearías, pero no lo puedes utilizar porque estás buscando dinero para pagar deudas, comprar alimentos, pagar transporte, mantener a tus hijxs… ¿hace cuanto no piensas en ti mismo? ¿Cuánto tiempo consumes al día tan sólo pensando en tu trabajo? ¿en tu familia? ¿en tus deudas?. Cuando llega tu salario qué haces: ¿compras un libro? ¿viajas a un sitio inhóspito? ¿aprovechas tu pago para descansar cómodamente un tiempo? O más bien compras una buena cantidad de basura que no necesitas, pagas arriendo de una casa que no te gusta, compras comida que no sabe a nada, compras ropa que se daña rápido y que en realidad no deseas, pero tienes que usarla para agradar a tus jefes… ¿te has dado cuenta que si disminuyes la cantidad de cosas que consumes puedes trabajar menos? Haz el ejercicio: mide cuanto gastas en cosas como cremas dentales, maquillaje, champúes, seda dental, papel higiénico, jabón en polvo, en barra, para baño, para lavarse las manos, para limpiar el piso, para limpiar las machitas del baño, para limpiar lo mesones de la cocina… ¿puedes eliminar algunos productos?, ¿hay otros que simplemente gastan tu dinero porque son de marcas multinacionales?, ¿te has preguntado alguna vez como hacían los indígenas para conservar su dentadura a pesar de no tener crema de dientes Colgate y enjuague bucal Listerine?, ¿te has dado cuenta que con el salario que ganas hoy si vivieras en el siglo XIX podrías vivir como un rey o una reina?, ¿en realidad necesitas desodorante? ¿en realidad necesitas energizantes? ¿en realidad necesitas trabajar 12 horas diarias para sobrevivir? ¿no sería mejor no trabajar y vivir? ¿no sería mejor seguir ritmos de vida naturales y no determinados por un reloj de pulsera? ¿no sería mejor no vivir angustiados por la cuota del televisor, del DVD, del computador, el arriendo, el pago de la luz, del teléfono, de la cuenta del celular? ¿te has dado cuenta de cuan dependiente eres del sistema? ¿qué haces si se va la luz? ¿y si se fuera para siempre? ¿y qué harías sin alcantarillado? ¿y sin gas natural? ¿imaginas el caos? Pero entonces, ¿Cómo hicieron nuestros antepasados – y no sólo los antepasados indígenas, sino los europeos y los africanos y los asiáticos – para existir sin luz, gas natural y teléfono? ¿no será que en lugar de vivir cómodamente estamos en realidad viviendo peor que un campesino de la edad media europea? Tenemos todo para vivir en el ocio, pero tenemos que trabajar como burros cincuenta años para tener una semana de descanso en el lugar que queremos, y aún así tenemos que pensar en la cuenta de hotel, los pasajes, la comida y en cómo vamos a pagar las deudas que tenemos en casa; al final no descansas y sientes un alivio cuando regresas a la rutina… ¿no te has dado cuenta que ya no existes? ¿Qué existe tan sólo una rutina que podría llevarla a cabo cualquier otro? No eres nadie en especial: te vistes como miles, escuchas la música que otros millones escuchas, conversas lo mismo que otros cientos de miles conversan, hablas como tantos otros, tus dichos son los de tantos, tus supuestas particularidades las compartes con otros cientos de miles, comes lo que millones comen, quieres lo que millones quieren, sueñas lo que millones sueñan; al final no eres nadie, tan sólo un trabajador, un ítem en la nómina, ¿Cuál es tu nombre? ¿Qué te gusta? ¿Cuáles son tus sueños? ¿Qué te gustaría hacer?, nada de eso importa, ¿alguna vez le haz preguntado a un tornillo o un martillo qué siente? Pues no esperes que tu jefe te lo pregunte, porque tu eres precisamente eso: un tornillo de la máquina del sistema…
anonimo.
Útopicos y salvajes.
tan solo miseria. Hoy más que nunca,
es en campos y fábricas donde se labran
y forjan nuestras cadenas.
El trabajo es un castigo.
Es más, Nadie debería trabajar.
¿No deseas más tiempo libre para leer, dormir, tener sexo o simplemente mirar al cielo en una tarde cualquiera?
¿No deseas salir de la fábrica, empresa, microempresa, tienda, lugar de trabajo al fin y al cabo; cuando ya estás cansado y no cuando el maldito reloj indique la hora de descanso?
¿No deseas charlar más en medio de tus labores?
¿No te gustaría elaborar tus horarios dependiendo del tiempo que consideras debes utilizar para ello?
¿No te gustaría darle un puño en la cara a tu patrón o patrona?
¿No te gustaría destruir el lugar donde trabajas?
¿No te gustaría no tener que perder tiempo trasladándote de tu casa hasta el trabajo todos los días?
¿No te gustaría no tener patrón?
¿No te gustaría dejar de trabajar?
Nosotrxs te lo proponemos. Deja de trabajar. Siéntete feliz de ser un ex-trabajador. Tal vez no haya sido por tu propio gusto. Tal vez hoy estés lleno de angustia porque estás sin trabajo, o porque puedes cualquier día quedar sin cadenas. Te tenemos que comentar un secreto: es el sistema el que te hace sentir angustiado. Tienes todo el tiempo libre que desearías, pero no lo puedes utilizar porque estás buscando dinero para pagar deudas, comprar alimentos, pagar transporte, mantener a tus hijxs… ¿hace cuanto no piensas en ti mismo? ¿Cuánto tiempo consumes al día tan sólo pensando en tu trabajo? ¿en tu familia? ¿en tus deudas?. Cuando llega tu salario qué haces: ¿compras un libro? ¿viajas a un sitio inhóspito? ¿aprovechas tu pago para descansar cómodamente un tiempo? O más bien compras una buena cantidad de basura que no necesitas, pagas arriendo de una casa que no te gusta, compras comida que no sabe a nada, compras ropa que se daña rápido y que en realidad no deseas, pero tienes que usarla para agradar a tus jefes… ¿te has dado cuenta que si disminuyes la cantidad de cosas que consumes puedes trabajar menos? Haz el ejercicio: mide cuanto gastas en cosas como cremas dentales, maquillaje, champúes, seda dental, papel higiénico, jabón en polvo, en barra, para baño, para lavarse las manos, para limpiar el piso, para limpiar las machitas del baño, para limpiar lo mesones de la cocina… ¿puedes eliminar algunos productos?, ¿hay otros que simplemente gastan tu dinero porque son de marcas multinacionales?, ¿te has preguntado alguna vez como hacían los indígenas para conservar su dentadura a pesar de no tener crema de dientes Colgate y enjuague bucal Listerine?, ¿te has dado cuenta que con el salario que ganas hoy si vivieras en el siglo XIX podrías vivir como un rey o una reina?, ¿en realidad necesitas desodorante? ¿en realidad necesitas energizantes? ¿en realidad necesitas trabajar 12 horas diarias para sobrevivir? ¿no sería mejor no trabajar y vivir? ¿no sería mejor seguir ritmos de vida naturales y no determinados por un reloj de pulsera? ¿no sería mejor no vivir angustiados por la cuota del televisor, del DVD, del computador, el arriendo, el pago de la luz, del teléfono, de la cuenta del celular? ¿te has dado cuenta de cuan dependiente eres del sistema? ¿qué haces si se va la luz? ¿y si se fuera para siempre? ¿y qué harías sin alcantarillado? ¿y sin gas natural? ¿imaginas el caos? Pero entonces, ¿Cómo hicieron nuestros antepasados – y no sólo los antepasados indígenas, sino los europeos y los africanos y los asiáticos – para existir sin luz, gas natural y teléfono? ¿no será que en lugar de vivir cómodamente estamos en realidad viviendo peor que un campesino de la edad media europea? Tenemos todo para vivir en el ocio, pero tenemos que trabajar como burros cincuenta años para tener una semana de descanso en el lugar que queremos, y aún así tenemos que pensar en la cuenta de hotel, los pasajes, la comida y en cómo vamos a pagar las deudas que tenemos en casa; al final no descansas y sientes un alivio cuando regresas a la rutina… ¿no te has dado cuenta que ya no existes? ¿Qué existe tan sólo una rutina que podría llevarla a cabo cualquier otro? No eres nadie en especial: te vistes como miles, escuchas la música que otros millones escuchas, conversas lo mismo que otros cientos de miles conversan, hablas como tantos otros, tus dichos son los de tantos, tus supuestas particularidades las compartes con otros cientos de miles, comes lo que millones comen, quieres lo que millones quieren, sueñas lo que millones sueñan; al final no eres nadie, tan sólo un trabajador, un ítem en la nómina, ¿Cuál es tu nombre? ¿Qué te gusta? ¿Cuáles son tus sueños? ¿Qué te gustaría hacer?, nada de eso importa, ¿alguna vez le haz preguntado a un tornillo o un martillo qué siente? Pues no esperes que tu jefe te lo pregunte, porque tu eres precisamente eso: un tornillo de la máquina del sistema…
anonimo.
Útopicos y salvajes.