El Milenio se acerca
Publicado: 22 Sep 2005, 14:15
Bilderberg+Mad Max - El último capítulo de nuestra civilización
08/09/2005 13:57:53
Varias cosas se me están aclarando en el mal manejo de rescate en la Costa del Golfo. Cuando hablamos del colapso total como resultado del Peak Oil (una frase inglesa que define el declive final de la edad del petróleo), Nueva Orleáns sirve de microcosmo ejemplar, aunque un microcosmo realmente escalofriante, de lo que nos espera a todos en el futuro muy, pero muy próximo, inevitable, tenebroso y alienante. ¿Cuánto tiempo? Quizás, meses, con un poco de suerte, un año, máximo dos.

Sigan viendo las noticias. No será la primera vez que presenciamos el colapso de la civilización humana. Esta noticia tampoco es algo nuevo. Lo que sí es nuevo, aunque ya ha empezado a morir, es la profunda creencia de que no vamos a sufrir las consecuencias de nuestro consumo imprudente y compulsivo sumado a la destrucción del ecosistema. Lo que está muriendo una muerte terrible es la arrogancia y la brutalidad de la clase política y financiera, de los globalistas convencidos de su superioridad natural.
Lo que no nos están contando, ni tampoco se está diciendo ningún medio de comunicación, es el impacto de Katrina sobre la producción energética. No se atreven.

Como resultado directo del efecto Katrina, Arabia Saudí ha admitido que NO ES CAPAZ de aumentar su producción de petróleo. Yo he ido advirtiendo a cualquiera que está dispuesto a escucharme de que los Sauditas llevan mintiendo, como mínimo dos años. La Administración de la Información Energética acaba de reconocer que la demanda mundial de petróleo ha sobrepasado el suministro varios meses antes del huracán Katrina. Qué momento más inoportuna para empezar a decir la verdad! ¿A caso alguien tenía dudas? La naturaleza, por fin, está tomando las riendas del asunto. Los mentirosos, los engreídos y los mentalmente enfermos quedarán expuestos muy pronto y, por supuesto, pagarán un precio muy caro. La muerte será su recompensa más que justificada.

¿Por qué Nuevo Orleáns es el microcosmo de la Humanidad en estos momentos? La producción energética del Golfo de México incluye cuatro componentes: perforación y producción, suministro del oleoducto a la costa, capacidad de la refinería y, por último, la entrega al resto de la nación del petróleo. El Puerto Fourchon de Luisiana, el sitio con mayor traspaso de energía desde el mar hasta la tierra en la región, ha sostenido daños terribles y está casi inoperativo, a pesar de los optimistas informes financieros, hechos con el objetivo de calmar a los mercados, diciendo que “los daños son mínimos”. Una mentira!!! Según los cálculos del experto internacionalmente reconocido sobre el petróleo y la energía, Jan Lundberg, los EEUU acaban de perder entre el 20% y 25% de su suministro energético. ¿Mi valoración personal? Este suministro nunca más volverá.
El Puerto “Louisiana Offshore Oil Port” también está mucho más dañado de lo que nos cuentan los medios principales de información americanos. Los daños sostenidos por este Puerto, según me cuentan los agentes de los servicios de inteligencia americana, es increíblemente terrorífico. Es en este punto que los gigantescos buques petroleros procedentes de ultramar desembarcaron su petróleo. Ahora, como está casi destrozado, estos gigantescos buques petroleros no tienen ningún otro lugar donde atracar. Son demasiado grandes. He visto los vídeos secretos grabados por mis amigos de la FEMA y, os prometo una cosa: los “daños mínimos” son en realidad una catástrofe que está a punto de desencadenar una crisis mundial.
En resumen: mi apuesta personal es que el gobierno americano está preparando la campaña mediática para convencer a los americanos de que NO HAY QUE RECONSTRUIR A Nueva Orleáns y de que la producción doméstica de petróleo en los Estados Unidos nunca, pero nuca más alcanzara los niveles que disfrutaron antes del huracán Katrina. La infraestructura ha desaparecido, la gente han muerto y la economía americana estará en la UVI dentro de muy poco tiempo. Si la gente está quejándose cuando el petróleo está a $1 por cada litro, ¿qué hará cuando el petróleo alcance $8 o $10? ¿Alguien ha pensado lo terriblemente complicado que será la labor de reconstrucción en este tipo de clima y ambiente? Y si la producción del petróleo en los EEUU dentro de muy poco no sobrepasa los niveles previos al huracán, entonces hay que dar la economía americana por muerta. No esperéis que los chicos de Wall Street lo saquen en sus boletines oficiales, ni que la Reserva Federal lo admita, ni que el Presidente lo reconozca. El país entero está en el punto de colapso inminente y, lo peor de todo, que esta vez los ingenieros de las ciencias sociales o los chicos de Harvard no pueden hacer nada para arreglarlo. No hay que extrañarse entonces de que los Bilderbergers demostraran tanto miedo en su última reunión en Rottach-Egern, Alemania, en mayo de este año. Los Amos del Mundo no saben cómo construir el mundo, solamente cómo destruirlo. Y ahora, necesitan poder construir, no por nuestro bien, sino por el suyo. Esta vez, es en sus cuellos donde está la horca. La población hambrienta, y aterida de frío, las personas sin hogar que han perdido familias enteras, no tendrán mucha paciencia con la basura humana que encarna Bilderberg y su Nuevo orden Mundial. Carne humana de los primogénitos de los Bilderbergers será un adecuado sustituto de la carne de pavo y pollo que los seres humanos disfrutaron no hace mucho tiempo. Pero las cosas pintan mucho peor de lo que estoy explicando. Presta atención a la administración Bush y cómo este borracho degenerado explica al mundo entero que no hay forma de salvar a Nueva Orleáns. Ésta es mi apuesta. ¿Queráis saber por qué? Por que Bush y lo que representa este ser inhumano no está preocupado por salvar a Nueva Orleáns por que ya se ha dado cuenta de que no todo es salvable. En el futuro muy próximo, habrá que elegir lo que merece ser salvado y lo que no.
Bien, ¿quién entre los analistas financieros, está dispuesto a desafiarme en un debate público? Venga!!! ¡Mi desafío es contra todos vosotros y a la vez! Aunque tengo claro que ninguno de vosotros estará dispuesto a enfrentarse a mí porque destrozaré vuestros análisis financieros. La próxima vez que algún financiero saque un informe a la luz diciendo que el petróleo fluirá otra vez sin límites, que los precios bajarán a los niveles de antes y que el consumo sin límite volverá solo si nosotros dejemos de preocuparnos, hazle comerlo.
Ahora, cualquier que esté por ahí, con un par de neuronas todavía en condiciones operativas, escucha una observación que he tenido claro desde hace mucho tiempo. “La destrucción necesaria” ha llegado a ser la prioridad no solamente para paliar el fenómeno de Peak Oil, sino también de calentamiento Global. Los Estados Unidos, con un 5% de población mundial, consumen el 25% de la energía del mundo. Si uno quisiese destruir la demanda, ¿como podría hacerlo? Destrozando la economía, naturalmente. Los sin techo, sin empleo, los refugiados, no compran gasolina, no hacen viajes de ocio, no vuelan en aviones ni compran electrodomésticos (hechos con energía y que además requieren energía para funcionar). Tampoco utilizan el aire acondicionado porque no lo pueden pagar. Son el encarnamiento de la famosa expresión de Henri Kissinger, sacado del vocabulario Nazi, que los define como “comedores inútiles.”
Ahora, ¿qué pasará cuando nos quedemos sin los pobres, los sin techo, sin los hambrientos y sin las “minorías”, sin todos que los Bilderbergers históricamente han considerado prescindibles – y la bestia aún no este satisfecha? Entonces, llegará el turno de los chicos blancos y de sus queridas familias que provienen de las barriadas de alto standing de Paris, Londres, Madrid, Nueva York. Los Bilderbergers llevan años insistiendo en la reducción forzada de la población mundial. Así es, para que Planeta Tierra sobreviva (leese Bilderbergers), entre 3 y 4 mil millones de nosotros tenemos que perecer. ¿Algún voluntario? Tengo claro que Kissinger, Rockefeller o aquel degenerado alcohólico de Bush hijo no entregarían su primogénito para que nosotros, “las masas sucias” de la dictadura del Gobierno Mundial Único pudieran disfrutar lo poco que nos queda de la vida en esta catástrofe global en la que hemos reconvertido nuestro una vez tan bello planeta.
Los huracanes se nombran de forma alfabética. Katrina ha sido el decimoprimero del 2005 y la temporada de los huracanes acaba de comenzar. Habrá más huracanes, muchos más. Algunos de ellos se convertirán en huracanes temibles, porque la temperatura de las aguas de los océanos está demasiado alta.
Adelante. Dime que me he equivocado acerca del Peak Oil, acerca del colapso climático y la corrupción metastática de nuestros gobiernos y sistema económico. La apuesta es demasiado sencilla y el desenlace pronto será evidente. Apostad lo que queréis.
La Tierra ha alcanzado ese punto donde la consciencia humana no tolerará más los controles autoritarios sobre su destino. Los Bilderbergers lo saben y su plan es romper este espíritu con la cosecha de sangre a base de guerras, hambruna y miseria. ¿Alguien estaría dispuesto a apostar su vida en contra de mis pronósticos?
¿Qué parece una apuesta demasiado fuerte? Pues, vuestra vida es lo que os habéis apostado ya contra los Amos del Mundo.
08/09/2005 13:57:53
Varias cosas se me están aclarando en el mal manejo de rescate en la Costa del Golfo. Cuando hablamos del colapso total como resultado del Peak Oil (una frase inglesa que define el declive final de la edad del petróleo), Nueva Orleáns sirve de microcosmo ejemplar, aunque un microcosmo realmente escalofriante, de lo que nos espera a todos en el futuro muy, pero muy próximo, inevitable, tenebroso y alienante. ¿Cuánto tiempo? Quizás, meses, con un poco de suerte, un año, máximo dos.

Sigan viendo las noticias. No será la primera vez que presenciamos el colapso de la civilización humana. Esta noticia tampoco es algo nuevo. Lo que sí es nuevo, aunque ya ha empezado a morir, es la profunda creencia de que no vamos a sufrir las consecuencias de nuestro consumo imprudente y compulsivo sumado a la destrucción del ecosistema. Lo que está muriendo una muerte terrible es la arrogancia y la brutalidad de la clase política y financiera, de los globalistas convencidos de su superioridad natural.
Lo que no nos están contando, ni tampoco se está diciendo ningún medio de comunicación, es el impacto de Katrina sobre la producción energética. No se atreven.

Como resultado directo del efecto Katrina, Arabia Saudí ha admitido que NO ES CAPAZ de aumentar su producción de petróleo. Yo he ido advirtiendo a cualquiera que está dispuesto a escucharme de que los Sauditas llevan mintiendo, como mínimo dos años. La Administración de la Información Energética acaba de reconocer que la demanda mundial de petróleo ha sobrepasado el suministro varios meses antes del huracán Katrina. Qué momento más inoportuna para empezar a decir la verdad! ¿A caso alguien tenía dudas? La naturaleza, por fin, está tomando las riendas del asunto. Los mentirosos, los engreídos y los mentalmente enfermos quedarán expuestos muy pronto y, por supuesto, pagarán un precio muy caro. La muerte será su recompensa más que justificada.

¿Por qué Nuevo Orleáns es el microcosmo de la Humanidad en estos momentos? La producción energética del Golfo de México incluye cuatro componentes: perforación y producción, suministro del oleoducto a la costa, capacidad de la refinería y, por último, la entrega al resto de la nación del petróleo. El Puerto Fourchon de Luisiana, el sitio con mayor traspaso de energía desde el mar hasta la tierra en la región, ha sostenido daños terribles y está casi inoperativo, a pesar de los optimistas informes financieros, hechos con el objetivo de calmar a los mercados, diciendo que “los daños son mínimos”. Una mentira!!! Según los cálculos del experto internacionalmente reconocido sobre el petróleo y la energía, Jan Lundberg, los EEUU acaban de perder entre el 20% y 25% de su suministro energético. ¿Mi valoración personal? Este suministro nunca más volverá.
El Puerto “Louisiana Offshore Oil Port” también está mucho más dañado de lo que nos cuentan los medios principales de información americanos. Los daños sostenidos por este Puerto, según me cuentan los agentes de los servicios de inteligencia americana, es increíblemente terrorífico. Es en este punto que los gigantescos buques petroleros procedentes de ultramar desembarcaron su petróleo. Ahora, como está casi destrozado, estos gigantescos buques petroleros no tienen ningún otro lugar donde atracar. Son demasiado grandes. He visto los vídeos secretos grabados por mis amigos de la FEMA y, os prometo una cosa: los “daños mínimos” son en realidad una catástrofe que está a punto de desencadenar una crisis mundial.
En resumen: mi apuesta personal es que el gobierno americano está preparando la campaña mediática para convencer a los americanos de que NO HAY QUE RECONSTRUIR A Nueva Orleáns y de que la producción doméstica de petróleo en los Estados Unidos nunca, pero nuca más alcanzara los niveles que disfrutaron antes del huracán Katrina. La infraestructura ha desaparecido, la gente han muerto y la economía americana estará en la UVI dentro de muy poco tiempo. Si la gente está quejándose cuando el petróleo está a $1 por cada litro, ¿qué hará cuando el petróleo alcance $8 o $10? ¿Alguien ha pensado lo terriblemente complicado que será la labor de reconstrucción en este tipo de clima y ambiente? Y si la producción del petróleo en los EEUU dentro de muy poco no sobrepasa los niveles previos al huracán, entonces hay que dar la economía americana por muerta. No esperéis que los chicos de Wall Street lo saquen en sus boletines oficiales, ni que la Reserva Federal lo admita, ni que el Presidente lo reconozca. El país entero está en el punto de colapso inminente y, lo peor de todo, que esta vez los ingenieros de las ciencias sociales o los chicos de Harvard no pueden hacer nada para arreglarlo. No hay que extrañarse entonces de que los Bilderbergers demostraran tanto miedo en su última reunión en Rottach-Egern, Alemania, en mayo de este año. Los Amos del Mundo no saben cómo construir el mundo, solamente cómo destruirlo. Y ahora, necesitan poder construir, no por nuestro bien, sino por el suyo. Esta vez, es en sus cuellos donde está la horca. La población hambrienta, y aterida de frío, las personas sin hogar que han perdido familias enteras, no tendrán mucha paciencia con la basura humana que encarna Bilderberg y su Nuevo orden Mundial. Carne humana de los primogénitos de los Bilderbergers será un adecuado sustituto de la carne de pavo y pollo que los seres humanos disfrutaron no hace mucho tiempo. Pero las cosas pintan mucho peor de lo que estoy explicando. Presta atención a la administración Bush y cómo este borracho degenerado explica al mundo entero que no hay forma de salvar a Nueva Orleáns. Ésta es mi apuesta. ¿Queráis saber por qué? Por que Bush y lo que representa este ser inhumano no está preocupado por salvar a Nueva Orleáns por que ya se ha dado cuenta de que no todo es salvable. En el futuro muy próximo, habrá que elegir lo que merece ser salvado y lo que no.
Bien, ¿quién entre los analistas financieros, está dispuesto a desafiarme en un debate público? Venga!!! ¡Mi desafío es contra todos vosotros y a la vez! Aunque tengo claro que ninguno de vosotros estará dispuesto a enfrentarse a mí porque destrozaré vuestros análisis financieros. La próxima vez que algún financiero saque un informe a la luz diciendo que el petróleo fluirá otra vez sin límites, que los precios bajarán a los niveles de antes y que el consumo sin límite volverá solo si nosotros dejemos de preocuparnos, hazle comerlo.
Ahora, cualquier que esté por ahí, con un par de neuronas todavía en condiciones operativas, escucha una observación que he tenido claro desde hace mucho tiempo. “La destrucción necesaria” ha llegado a ser la prioridad no solamente para paliar el fenómeno de Peak Oil, sino también de calentamiento Global. Los Estados Unidos, con un 5% de población mundial, consumen el 25% de la energía del mundo. Si uno quisiese destruir la demanda, ¿como podría hacerlo? Destrozando la economía, naturalmente. Los sin techo, sin empleo, los refugiados, no compran gasolina, no hacen viajes de ocio, no vuelan en aviones ni compran electrodomésticos (hechos con energía y que además requieren energía para funcionar). Tampoco utilizan el aire acondicionado porque no lo pueden pagar. Son el encarnamiento de la famosa expresión de Henri Kissinger, sacado del vocabulario Nazi, que los define como “comedores inútiles.”
Ahora, ¿qué pasará cuando nos quedemos sin los pobres, los sin techo, sin los hambrientos y sin las “minorías”, sin todos que los Bilderbergers históricamente han considerado prescindibles – y la bestia aún no este satisfecha? Entonces, llegará el turno de los chicos blancos y de sus queridas familias que provienen de las barriadas de alto standing de Paris, Londres, Madrid, Nueva York. Los Bilderbergers llevan años insistiendo en la reducción forzada de la población mundial. Así es, para que Planeta Tierra sobreviva (leese Bilderbergers), entre 3 y 4 mil millones de nosotros tenemos que perecer. ¿Algún voluntario? Tengo claro que Kissinger, Rockefeller o aquel degenerado alcohólico de Bush hijo no entregarían su primogénito para que nosotros, “las masas sucias” de la dictadura del Gobierno Mundial Único pudieran disfrutar lo poco que nos queda de la vida en esta catástrofe global en la que hemos reconvertido nuestro una vez tan bello planeta.
Los huracanes se nombran de forma alfabética. Katrina ha sido el decimoprimero del 2005 y la temporada de los huracanes acaba de comenzar. Habrá más huracanes, muchos más. Algunos de ellos se convertirán en huracanes temibles, porque la temperatura de las aguas de los océanos está demasiado alta.
Adelante. Dime que me he equivocado acerca del Peak Oil, acerca del colapso climático y la corrupción metastática de nuestros gobiernos y sistema económico. La apuesta es demasiado sencilla y el desenlace pronto será evidente. Apostad lo que queréis.
La Tierra ha alcanzado ese punto donde la consciencia humana no tolerará más los controles autoritarios sobre su destino. Los Bilderbergers lo saben y su plan es romper este espíritu con la cosecha de sangre a base de guerras, hambruna y miseria. ¿Alguien estaría dispuesto a apostar su vida en contra de mis pronósticos?
¿Qué parece una apuesta demasiado fuerte? Pues, vuestra vida es lo que os habéis apostado ya contra los Amos del Mundo.