[Italia] Iniciativas para el 40° aniversario del Encuentro Anarquista Internacional «Venezia ’84»

“En 1984 se celebró en Venecia un multitudinario encuentro anarquista al que acudieron miles de anarquistas de múltiples países. Cuarenta años después el impacto de aquel evento aún resuena en muchas de las personas que participaron en él y ha quedado grabado en el imaginario anarquista contemporáneo. El 18 de octubre se celebrará la sesión inaugural de los actos organizados en Venecia para celebrar aquel evento.

texto del Centro de Estudios Libertarios
 

Visto en perspectiva, el Encuentro Anarquista Internacional de septiembre de 1984 -del que pronto se cumplirá el 40 aniversario- fue a su manera una orgía anarquista. Nos reunimos inesperadamente en los campos venecianos por millares, y enseguida quedó claro que veníamos de diferentes latitudes y longitudes, pertenecíamos a diferentes generaciones y encarnábamos diferentes historias personales y colectivas. Y así, un poco sorprendidos y un poco intrigados, nos miramos, nos olimos y finalmente nos aceptamos en una alegre promiscuidad que tuvo cuidado de no anular nuestras diferencias. Al contrario, las exponía. Y quizás sea precisamente éste el resultado más importante de aquel encuentro: la celebración de una diversidad fundadora capaz de dar vida -si se sabe mantener a raya cualquier tentación hegemónica- a una pluralidad de anarquismos igualmente «legítimos» (es decir, reconocidos y aceptados incluso cuando divergen del propio planteamiento).

Esto no quiere decir, ni mucho menos, que en aquel final de verano de inspiración orwelliana no hubiera desacuerdos y disensiones o que todo fuera como la seda. En absoluto. Las discusiones, las recriminaciones, los «animados intercambios de opiniones» estaban a la orden del día. Pero cuarenta años después, la perspectiva nos permite situarlas en su justa dimensión: no había avasallamiento, no había voluntad de imponer la propia línea ni de hacer proselitismo; en cambio, había -y muy fuerte- una sana voluntad de confrontación. Incluso al margen de las buenas maneras.

Al fin y al cabo, hacía décadas que los anarquistas no se reunían. Había habido algunos Congresos (un término en sí mismo ya significativo) convocados por federaciones específicas después de la Segunda Guerra Mundial. Pero hacía décadas que no se veía una reunión internacional de anarquistas, pertenecieran a la tendencia que pertenecieran. Y, sin embargo, el momento estaba más que maduro, como lo demuestran la masiva participación y la amplísima procedencia (treinta países repartidos por todo el mundo, aunque obviamente predominaron los europeos). Por otra parte, el movimiento anarquista internacional, ya extraordinariamente bien conectado para la época gracias a la red de sus publicaciones periódicas, acababa de salir de un renacimiento que duraba al menos quince años y tenía muchas ganas de hablar y comparar notas. Entre otras cosas, porque era evidente que se estaba pasando página, que el siglo XX estaba dando sus últimos coletazos (y la caída de la URSS, cinco años más tarde, le daría la estocada final). Y la chispa que encendió esa formidable explosión de vitalidad anarquista que fue Venecia 84 se debió precisamente al afortunado encuentro entre una convocatoria tan abierta y una necesidad de confrontación tan extendida.

No decimos todo esto para autocelebrarnos. Ya hemos dedicado un articulado proyecto digital a aquella reunión (https://centrostudilibertari.it/ven84-homepage) en el que hemos subido los numerosos materiales, en varios idiomas, recopilados entonces. Y se están subiendo más a medida que avanzamos en la reordenación de las ponencias, con la esperanza de poder devolver, al menos en parte, la riqueza y el entusiasmo de aquellos momentos.

Lo que nos hizo retomar el tema fue un hecho inesperado: el «descubrimiento» de aquel acontecimiento por una estudiante de la IUAV de Venecia, que lo convirtió en objeto de su tesis (con excelentes resultados, por otra parte). Y fue su inédita perspicacia la que reavivó nuestra atención y nos hizo ver las cosas desde otra perspectiva. Nos pareció, pues, que la «narración» de aquel lejano acontecimiento -con la complicidad del 40 aniversario- podía renovarse, podía prestarse a lecturas distintas de las que habían dado sus protagonistas. Y así, tras algunas vacilaciones, se tomó la decisión, y había que anunciarlo: ¡Venecia 84 ha vuelto!

Así que volveremos a encontrarnos en los últimos diez días de octubre con una serie de iniciativas (algunas de ellas decididamente convivenciales) que girarán en torno a una exposición fotográfica y documental que dará cuenta del pasado pero con una nueva mirada -la de Elena- capaz de situar aquel acontecimiento en un flujo de disidencia libertaria que nunca se ha agotado. Y nos encontraremos de nuevo en Venecia, aunque en una Venecia aburguesada que no es más que un pálido reflejo de la ciudad viva que acogió a los anarquistas hace cuarenta años. Y quizás también hablemos de ello, ya que -como en 1984- la UIAV volverá a acogernos. La invitación se extiende a todos, a los que estuvieron y a los que no estuvieron: para recordar, para contar, para aprender y, por qué no, para volver a experimentar la emoción de estar juntos en un mundo anarquista tan contradictorio y efímero como se quiera, ¡pero estimulante!

Traducción realizada con la versión gratuita del traductor DeepL.com

Actividades: https://centrostudilibertari.it/it/iniziative