Anarquía Sin Tonterías
Publicado: 14 Nov 2012, 18:42
Anarquía Sin Tonterías
Anarquía Sin Tonterías es un proyecto que os presento ahora mismo, que me acabo de inventar y me parece de lo más sensato y razonable. Después de años siendo testigo de ideas a cada cual más absurda, asambleas interminables e infinidad de consideraciones a tener en cuenta al respecto de esa entidad abstracta que llamamos "los demás", por sus conflictos con esa otra tan concretísima que llamamos "yo" (al menos yo lo hago), me llega por ciencia infusa la respuesta a todos los problemas que causaba la inter-relación entre ambos agentes: la anarquía sin tonterías.
Propongo una anarquía sin orden ni organización ninguna, donde lo común se gestiona en base a unas simples 5 leyes fundamentales, que se pueden o no acatar pues para el caso, es lo mismo, y la labor del Anarquista Sin Tonterías es asegurar su cumplimiento:
*Ley de la Propiedad Temporal: Cada individuo defiende sus bienes como buenamente puede de la rapiña ajena. Si no funciona, sus bienes pasan al dominio común de modo temporal. Tarde o temprano, y siguiendo la misma lógica, estos bienes pasan a manos privadas, es decir, de otro individuo.
Nada tiene dueño fijo, y toda posesión está sujeta a la Ley de la Propiedad Temporal. Las comunidades pueden, no obstante, constituir sistemas más complicados para administrar los tesoros privados y colectivos, por ejemplo, mediante la costumbre. Ejemplo: la casa que toda la vida perteneció a la familia de Yoron el Kejica le pertenece por derecho natural. Esta enmienda de la Ley de la Propiedad Temporal es, no obstante, revocable, mediante la Ley del Poder Verdadero, que quedará aclarada a continuación.
*Ley del Poder Verdadero: Todo está permitido siempre y cuando uno pueda justificar sus deseos carismáticamente, es decir, por la fuerza (el código de honor es opcional), u ocultando sus verdaderas intenciones y confundiendo al personal para que acabe haciendo lo que uno mismo quiere sin darse cuenta (aunque esta segunda actitud deshonesta tiene el riesgo de que te cojan y te la líen parda). En casos excepcionales, como la minusvalía, queda la opción de resultar altamente convincente o contratar mercenarios. Este sistema también fomenta las propias capacidades de expresión y argumentación.
Todas las decisiones se toman por consenso y unanimidad, es decir, el que golpee más fuerte o tenga más amigos decide, hasta su derrota, envenenamiento o abdicación voluntaria. Esta ley se basa en el supuesto de que la fuerza bruta es un criterio tan arbitrario como cualquier otro, y sin embargo, no existe ninguno tan obvio. Nuestros investigadores han identificado por fin la causa de la problemática humana: allá donde se empleaba la navaja de Occam era necesario aplicar la espada salvaje de Conan.
*Ley de la Selva: el propio entorno y el medio ambiente se protegen con amor. Los animales se aprecian de todo corazón como nuestros iguales que son, independientemente de si nos los comemos o no. El canibalismo deriva de una consciencia ecológica anti-especista y se recomienda fervientemente su práctica.
*Ley de la Libre Asociación: Las personas se rejuntan por motivos de tipo informal, como el colegueo, aficiones comunes o el puro interés egoísta. A veces también por razones identitarias. El grado de afinidad se crea por sí mismo, manteniéndose a fuerza de diversión y siendo variable, pudiendo ir desde un discreto "Me cae bien este tío" a un "Me lo paso teta con esta peña, compadre".
*Ley de la Venganza: toda ofensa ha de ser restituida elevada por dos (o más, si uno es diestro en matemáticas). Esto asegura la dinamización del cuerpo social, y una interacción óptima entre los miembros que lo conforman.
Estas son algunas de las propuestas de Anarquía Sin Tonterías. Espero que las encontréis de interés. Todos aquellos que se consideren a sí mismos bravos y valientes Anarquistas Sin Tonterías pueden desde ya constituir sus propios grupos de afinidad y empezar a llevar a cabo la Anarquía Sin Tonterías.
Gracias a todos por vuestro interés.
Alabado sea el trono sangriento de Crom.
Anarquía Sin Tonterías es un proyecto que os presento ahora mismo, que me acabo de inventar y me parece de lo más sensato y razonable. Después de años siendo testigo de ideas a cada cual más absurda, asambleas interminables e infinidad de consideraciones a tener en cuenta al respecto de esa entidad abstracta que llamamos "los demás", por sus conflictos con esa otra tan concretísima que llamamos "yo" (al menos yo lo hago), me llega por ciencia infusa la respuesta a todos los problemas que causaba la inter-relación entre ambos agentes: la anarquía sin tonterías.
Propongo una anarquía sin orden ni organización ninguna, donde lo común se gestiona en base a unas simples 5 leyes fundamentales, que se pueden o no acatar pues para el caso, es lo mismo, y la labor del Anarquista Sin Tonterías es asegurar su cumplimiento:
*Ley de la Propiedad Temporal: Cada individuo defiende sus bienes como buenamente puede de la rapiña ajena. Si no funciona, sus bienes pasan al dominio común de modo temporal. Tarde o temprano, y siguiendo la misma lógica, estos bienes pasan a manos privadas, es decir, de otro individuo.
Nada tiene dueño fijo, y toda posesión está sujeta a la Ley de la Propiedad Temporal. Las comunidades pueden, no obstante, constituir sistemas más complicados para administrar los tesoros privados y colectivos, por ejemplo, mediante la costumbre. Ejemplo: la casa que toda la vida perteneció a la familia de Yoron el Kejica le pertenece por derecho natural. Esta enmienda de la Ley de la Propiedad Temporal es, no obstante, revocable, mediante la Ley del Poder Verdadero, que quedará aclarada a continuación.
*Ley del Poder Verdadero: Todo está permitido siempre y cuando uno pueda justificar sus deseos carismáticamente, es decir, por la fuerza (el código de honor es opcional), u ocultando sus verdaderas intenciones y confundiendo al personal para que acabe haciendo lo que uno mismo quiere sin darse cuenta (aunque esta segunda actitud deshonesta tiene el riesgo de que te cojan y te la líen parda). En casos excepcionales, como la minusvalía, queda la opción de resultar altamente convincente o contratar mercenarios. Este sistema también fomenta las propias capacidades de expresión y argumentación.
Todas las decisiones se toman por consenso y unanimidad, es decir, el que golpee más fuerte o tenga más amigos decide, hasta su derrota, envenenamiento o abdicación voluntaria. Esta ley se basa en el supuesto de que la fuerza bruta es un criterio tan arbitrario como cualquier otro, y sin embargo, no existe ninguno tan obvio. Nuestros investigadores han identificado por fin la causa de la problemática humana: allá donde se empleaba la navaja de Occam era necesario aplicar la espada salvaje de Conan.
*Ley de la Selva: el propio entorno y el medio ambiente se protegen con amor. Los animales se aprecian de todo corazón como nuestros iguales que son, independientemente de si nos los comemos o no. El canibalismo deriva de una consciencia ecológica anti-especista y se recomienda fervientemente su práctica.
*Ley de la Libre Asociación: Las personas se rejuntan por motivos de tipo informal, como el colegueo, aficiones comunes o el puro interés egoísta. A veces también por razones identitarias. El grado de afinidad se crea por sí mismo, manteniéndose a fuerza de diversión y siendo variable, pudiendo ir desde un discreto "Me cae bien este tío" a un "Me lo paso teta con esta peña, compadre".
*Ley de la Venganza: toda ofensa ha de ser restituida elevada por dos (o más, si uno es diestro en matemáticas). Esto asegura la dinamización del cuerpo social, y una interacción óptima entre los miembros que lo conforman.
Estas son algunas de las propuestas de Anarquía Sin Tonterías. Espero que las encontréis de interés. Todos aquellos que se consideren a sí mismos bravos y valientes Anarquistas Sin Tonterías pueden desde ya constituir sus propios grupos de afinidad y empezar a llevar a cabo la Anarquía Sin Tonterías.
Gracias a todos por vuestro interés.
Alabado sea el trono sangriento de Crom.